Mi Tía -Camren-

Capitulo 13...

Maratón 4/5

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Capitulo 13.-

Camila no se le pudo resistir. No a ella. Instintivamente cerró los ojos y rodeo su cuello con los brazos. Lauren profundizó el beso pegándola mas a su cuerpo, demostrándole así lo caliente que estaba. La menor gimió sobre sus labios.

- Mmh....- gruño Lauren.- estoy muy mojada.

- Entonces... haz algo al respecto.

Y por supuesto que lo iba a hacer. Incapaz de soportar por mucho tiempo más, acunó con las manos el trasero de su sobrina y la levantó, obligándola a que envolviera sus piernas en las caderas de la otra chica. En poco tiempo ya estaban en la habitación de su hermana. Aun besándose, Lauren la dejo encima de la cama matrimonial y le desabrochó los primeros botones de la blusa, dejando ver así sus pechos cubiertos por un atractivo sostén negro.

- Tía.- gimoteó.- hazme el amor...

- Con una sola condición.

- ¿Cuál?- pregunto con desesperación, dispuesta a hacer cualquier cosa.

Lauren deslizo su mano por el seno derecho de Camila. Lo acaricio sobre la tela del sostén y aun así, pudo sentir lo duro que estaba su pezón. Camila volvió a gemir.

- Por favor, haré lo que tu quieras.- dijo ella.

- ¿Lo que sea?

- Si.

- Entonces... dime que no vas a volver a ver a Dinah.

Camila la miro, esta vez con el ceño fruncido. Se incorporo mejor en la cama e iba a hablar, pero Lauren se le adelantó.

- Prométemelo.

- Ya te dije que no.- dijo segura, y es que no pretendía ceder.

Y eso basto para que a Lauren se le fuera la excitación de golpe, substituyéndolo por odio. Apretó los puños tan fuertes, que las manos le comenzaron a temblar y se levantó de la cama par dirigirse hacia Camila . Sus músculos se tensaron, y mientras le hablaba, la estaba apuntando con el dedo índice, como si se tratara de un padre llamándole la atención a una hija fastidiosa.

- Si no lo haces...

- ¿Y si no lo hago qué?- dijo firme, desafiándola.

- Llamaré a tu papá.- le amenazó.

Enseguida Camila se tensó. Su pulso se aceleró, y comenzó a respirar agitadamente. Su tía estaba jugando sucio con ella, y de la peor manera.

- No te atreverías a llamarlo.- le dijo, ahora mirándola con terror.

- Claro que sí. Y tenlo por seguro que lo haré si no me obedeces.

- Tía, por favor, no llames a mi papá.- le pidió.

- Entonces prométeme que no la volverás a ver.

Camila solo bajo la mirada y, despacio, negó con la cabeza.

- Vale, tú lo quisiste. Llamaré a tu padre.- y se giro con la intención de irse.

Pero ella la siguió.

- Tía, no lo llames.- suplico al borde del llanto.- por favor, ¡Por favor!- gritó, pero su tía la ignoró, y para entonces Lauren ya se había encerrado en su cuarto, y coloco seguro a la puerta, para que la otra chica no pudiera entrar.

Pero Camila no se movió de allí. Apretó los labios, mirando la puerta y sintió sus ojos arder por las lagrimas que amenazaban con salir de sus ojos. Tragó saliva bruscamente, para desatar el nudo en su garganta y abrió la boca para hablarle, por que sabia que aunque no la viera Lauren aun la escuchaba, pero lo único que consiguió fue que sollozara. Tapo rápidamente su boca con las manos y ya no aguantó, varias lágrimas deslizaron por sus mejillas.

Y fue ahí cuando entendió que Lauren no la escucharía. Lentamente, se giro y camino hacia su habitación para tirarse a su cama y llorar en silencio.

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