Capitulo 27...

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Capitulo 27.-



- ¿En efectivo o con tarjeta?- le preguntó la chica, al mismo tiempo que mordía su carnoso labio inferior.



- Con tarjeta.- contestó Lauren.



La vendedora cogió y dobló la falda junto con las camisetas que Camila a duras penas se las entregó. La menor fulminó a la vendedora con la mirada por enésima vez cuando se giró y se agachó, buscando unas bolsas, o tal vez... para colocarle todo su culo en la cara a Lauren. Camila codeó a su tía al ver que no le quitaba los ojos de encima. La mayor por su lado carcajeó.




- Gracias por su compra.- dijo la vendedora, inclinándose en el mostrador, haciendo que la abertura del cuello de su camisa se abriera dejando a la vista unos grandes y vultuosos pechos blancos. Lauren bajó la mirada, pero al instante la quitó.



- Gracias a ti, guapa.- dijo, esforzándose por mirarla a los ojos.- volveré mas seguido a esta tienda.- sonrío y cogió las bolsas.



- ¡Me llamo keana, por si acaso!- gritó para que la escuchara, en cuanto Lauren y Camila se alejaron.



Lauren solo río por lo bajo y la otra chica rechinó los dientes, roja de rabia y golpeó a Lauren en el hombro. Aunque leve, logró captar la atención de la ojiverde.


- ¿Qué?



- Con que soy la única muñequita de tus ojos, ¿Eh?- dijo irónica.



- Vamos, no te enojes pequeña...



- Eres una cerda que le mira las tetas a la primera mujer que se te cruza por delante. Estúpida, tonta.- masculló.



- Mmh... te vez jodidamente sexy cuando me insultas.



Ella se sonrojó. Era imposible tener una conversación seria con Lauren sin que digiera algo que la hiciera sonrojar.



- Tú siempre mezclando las cosas, eres tan... tan...



- ¿Tan qué?- pregunto Lauren alzando una ceja, divertida.



- ¡Tan terca! Un idiota que piensa... ¡Pero con la vagina!



Lauren entrecerró los ojos.



- Eso no era lo que me decías el otro día mientras me montabas...



Camila sintió sus mejillas arder, por enésima vez.



- Es toda tu culpa.



- ¿Mi culpa? Ni que yo fuera la única calentona por aquí.



- Tú me pones así.



- Me alegra oír eso.- dijo, sonriendo pícaramente.- me encantas, pequeña.



- ¿Aun así con mis celos y todo eso?- preguntó con una inocencia que la albina no le creyó por ningún segundo.



- Absolutamente toda. Me fascinas.- dijo y tomo su rostro con las manos, para luego acercarla hacia ella y devorarla en un beso hambriento.



Camila suspiró enamorada cuando se separaron. El hecho de que Lauren la besara en público le encantaba. La hacia sentir mas segura, fascinada por qué no tenían que ocultar su relación fuera de la casa de su padre.



Después de haber recorrido unas cuantas tiendas más del centro comercial, compraron útiles escolares y zapatos para Camila. Decidieron tomarse un descanso, al sentarse en una de las bancas mientras tomaban de sus bebidas antes de volver a casa.



- ¿Sabes, Camz?- habló Lauren, con la mirada fija en su bebida.- he estado pensando en algo...



- ¿En qué?- dijo y bebió de su coca-cola.



- Creo y es tiempo de dar el segundo paso. Quiero que nuestra relación sea más formal.- dijo, tratando de que ella entendiera la indirecta. Pero no la captó.



- ¿A que te refieres?- preguntó, frunciendo el ceño.



- Me refiero a decirles a Alejandro y a Clara sobre nuestra relación.



Camila casi escupió la bebida en su cara. ¿Había escuchado bien?



- ¿Hablas en serio?



- Si.- suspiró.- yo... ya estoy cansado de las mentiras. Quiero que lo sepan... que sepan que a la mujer a quien amo eres tú.



- Yo... no lo sé....- agachó la mirada.



- Amor.- le levantó el mentón con un dedo.- mírame, sabes que tarde o temprano lo sabrán.



- Lo sé, pero esque....- suspiró.- ¿Y si se lo toman mal?



- Tendrán que tomárselo bien, les guste o no. No te preocupes, ¿Por qué tanto miedo? No soy tu tía de sangre, ¿O si?



La otra chica solo negó con la cabeza.



- Vamos, no estés nerviosa, corazón.



- Está bien.- dijo insegura. Sabía que la decisión sobre decirle a su padre y madrastra sobre su relación, seria un gran paso. Estaba conciente de ello, pero al igual que Lauren, ya estaba harta de las mentiras. Ya no quería ocultar el amor que sentía por la otra chica, y menos con su propia familia.- quiero hacerlo.



- Vale.- sonrío.- le diremos primero a Clara y después a Alejandro, ya que ella es más tranquila en comparación a él.



- Perfecto. ¿Cuándo se lo diremos?



- Pronto.



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Otra vez yo☺

Espero que disfruten el capítulo.

Las amo!❤

Mi Tía -Camren-Where stories live. Discover now