22 de septiembre

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Leed la nota del final, es importante.

Es de noche y estoy sentada en mi ventana mirando el cielo, la noche de hoy esta llena de estrellas y es fria como si estuvieramos en diciembre. Pienso en Gale, ¿cómo no hacerlo despues de la cagada de antes?

Vale, se lo que estarás pensando; "¿Y de qué está hablando?" Pues nada, te cuento.

Habíamos quedado en el McDonalds del centro para comer un McFlurry, soy completamente adicta a los de oreo y chocolate y por eso insistí para quedar con él allí.

Me puse unos vaqueros negros, sudadera de Black Veil Brides, mis zapatillas de cuña (adivina el color, ¿negras? ¿Difícil, eh?) y mi adoradisima cazadora de cuero. Apenas me maquillé, entre que iba tarde, no amo en exceso el maquillaje y ni siquiera se hacerme la raya de arriba solo un pintalabios morado y un toque de rimel. Contrasta tan bien con mi piel pálida, hay quien se asusta por ello y quien me envidia tambien, pero se olvidan de algo, es mi piel no la suya, es mi color y a mi me gusta, si me envidian no consiguen nada y teniéndome miedo solo hacerme reir.

Llegué a las seis y media y Gale ya me estaba esperando apoyado en una columna o eso pensé yo. Me acerco y veo que no es él. Era un chico muy parecido. Me moría de la vergüenza y salí corriendo. El verdadero Gale me esperaba a unos metros y lo había visto todo.

Cuando entramos al McDonalds y compramos los helados, me pareció ver a Blackness a lo lejos observándonos desde una mesa en la otra esquina con una mueca de asco y disgusto. No se qué haría allí pero decidí ignorarlo aunque aún sus palabras seguían muy presentes en mi cabeza.

Nunca había salido con nadie, menos aún un chico, ya fuese mi amigo o algo. Solo quedaba con Blackness.

Puede sonar triste pero mi infancia no fue muy distinta a como es ahora, yo me alejaba del resto, nadie mostraba señales de querer acercarse a mi ni yo a ellos, alguna niñata tonta como la famosa Ayleen y Blackness, sobre todo él, mi único amigo y mi apoyo. El que siempre está ahi para mi.

Puede sonar raro porque solo se dedica a criticar todo lo que hago pero en alguna parte oí una vez eso de "quien te hace llorar es quien te quiere bien y el que solo está ahi cuando estas riendo, no te quiere". Tampoco tengo mucha experiencia en familia, soy hija única, Michelle ya ves lo que se ocupa de mi, cuanto me quiere y lo que me apoya y luego mi padre, Mark, se fue con una cualquiera. Ahora tienen dos hijos. No los quiero ver en mi vida, no son mis hermanos, son fruto de una traición. Para mi, estan muertos, tan muertos como mi "padre", si asi se le puede llamar y la furcia de su nueva mujer.

En definitiva, Blackness me quiere y se preocupa por mi como nadie lo ha hecho nunca y reconozco que me pasé de la raya porque llevamos varios dias sin hablar pero se que se arreglará, siempre lo arreglamos.

Cuando salimos con los helados, vamos a un parque cercano y allí nos sentamos en la hierba para hablar mejor.

-Rachel...

-Dime, Gale.

Se tumbó y fijó su mirada en el cielo, ese color azul intenso como el mar se confundía con el de sus ojos. Era una vista realmente preciosa.

-Tú alguna vez, has tenido, no se ¿novio? ¿Te ha gustado alguien?- me pregunta soltando todo de golpe.

Pienso detenidamente mi respuesta. Lo de que si he tenido novio, pues no, es muy obvio. Pero lo de si me ha gustado alguien...

No lo se. Mi capacidad de amar no es como la del resto. No siento amor como ese que describen los libros cursis, no soy capaz de querer a nadie, no me quiero a mi misma.

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⏰ Última actualización: Nov 13, 2015 ⏰

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