Señor desconocido

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POV de Taemin


Mi cámara, mierda y mil mierdas. Ahora si que estaba jodido, iba a tener que cruzar la frontera y cambiarme el nombre su es necesario, porque me pasan estas casas a mi. De seguro la pudo haber tomado cualquiera, tampoco me demore tanto en bajar, ahora toda la escuela se iba a enterar de todas las foto que hay en esa cámara. Ya no tenía y tampoco podía hacer nada que me salvara. Corrí hasta mi casa sin querer saber nada del mundo y me encerré en mi habitación, Jinki llego muy noche, yo aun no había cenado, pero no hubo mucha conversación más que un "¿Estás durmiendo?" Que yo no conteste, estaba.demasiado concentrado en lo que le diría mañana para faltar a las clases.

La noche paso en un parpadeo, ya apenas pude pegar mis pestañas cuando ya tenía que ir a la escuela, inconsciente como rutina, me vestí y me arregle, ya cuando iba bajando la escalera recordé el motivo por el cual ni debía ir. Pero era tarde mi hermano me vio apresurándome para tomar desayuno. No tuve momento para protestar.

- Hey hermanito -mi hermano me llamo, a lo que alce la cabeza desanimado mientras me terminaba mi tostada- Necesito la casa vacía para está noche por lo que te quedarás en otro lado.
- ¿Qué? ¡Pero Hyung!
- Nada de peros hermanito, son cosas de adultos. Pero no te preocupes, Minho está encantado de recibirte está noche, vete con el después de clases ¿Vale?

Espera dijo que iría con Minho-hyung, no alcance a decirle nada otra vez porque el timbre sonó y Jinki salió disparado, claro era su novia la que estaba allí, doblemente mierda, no quería ir con Hyung después de lo que podría llegar a suceder con mi cámara y además sería muy incómodo después de lo que ha sucedido, tan solo de acordarme de ese gesto se me hizo agua la boca ¡Diablos que pienso!

- ¡TAEMIN YA NOS VAMOS!

Pise la escuela con un miedo enorme, pero se me paso cuando iba entrando y no había nadie mirándome ni apuntándome con el dedo. Pero para tranquilidad mía todo estaba normal, demasiado normal...fue ya hasta la clase después del almuerzo que comencé a sentirme algo más tranquilo, di por perdida mi cámara además de todas las hermosas fotos que le saque a Mi casi novio con ellas, suerte para mi que pase la noche anterior las fotos que había en ella. 

Sufriré por la perdida de ella, era mi favorita.

Salí do horas antes que lo normal, la anciana que nos hacía física no vendría hoy ¿Enserio estaba de racha? Jugaré la lotería por si acaso, fui el último de salir de mi salón caminaba tranquilamente por los pasillos, ahora que lo pienso no había visto a mi casi novio durante todo el día, curioso. 

Y si...no, hay que ser.positivos, hyung no debió haber recogido la cámara.

Entonces unido a mis pensamientos, sentí un leve jalón de uno de mis brazos y una mano en mi boca que me tomaron por sorpresa llevándome a la oscuridad de una habitación, la puerta cerrada la tenía en frente, apenas la veía con la leves luz que de seguro estaba en el techo, me asuste de inmediato, no sabia que carajo pasaba por lo que comencé a forcejear pero de nada me sirvió ya que sentí como mi cuerpo lo lanzaron a una mesa al costado de la pared, alce la vista para encarar a mi secuestrador pero no me dejo ni siquiera moverme, sus manos fueron más rápidas y tomaron las muñecas de las mías tras mi espalda totalmente sumiso, mi secuestrador me separo las piernas con su rodilla supuse, pegándose como un animal a mi, teniendo su pelvis tan unida a mi trasero que sentí su verga abultada entre mis muslos, chille del miedo pero fue ahogado por su fuerte mano, estaba cagado, con toda sus letras, no me sirvió nada forcejar o moverme como lombriz por la desesperación, él tenía mucha mas fuerza, mi cuerpo se paralizó al sentirlo restregar de ese enorme bulto, podía sentir lo que quería, sentí mis lágrimas caer intentando rogar para que alguien me ayudará, volví a soltar un grito cuando la palma del otro se estrecho en mi nalga con firmeza ¿Qué tenía contra mi?. 

- Taeminnie, eres tan perfecto~ -Sentí un cálido aliento tras mi nuca acompañado de un tranquilo beso, abrió los ojos con sorpresa al haber escuchado la voz de mi amado Minho.
- ¿H-hyung? -dije al fin ya que el había sacado su mano de la boca, me puede apoyar en mis manos alzandome y luego mirarlo sobre el rabillo de mi hombro, si era él, algo en mi se tranquilizo como a la vez no.
- Pequeño no me mires así
Pude notar un tono coqueto que hizo estremecer cada célula de mi cuerpo, aun más cuando sus manos pasaron por mi cintura abrazándome por la espalda, su rostro estaba muy cerca del mío lo cual hizo que me ruborizara, sentí una de sus manos limpiando mis lágrimas como cuando se inclino sobre mi dejando un casto beso en mis labios.
Lo aparte un poco de mi para poder voltear mi cuerpo y estar frente a frente, pude tomar más en cuenta donde estaba, el lugar era mucho más estrecho y húmedo, colgado en cada pared algunas herramientas simples y en una esquinas habían implemento de aseo, era uno de los cuartos de los conserjes.

- ¿En qué piensas minnie? 

Minho llamo mi atención tomando de mi barbilla, sin alcanzar a darle una respuesta, sello nuestros labios con otro beso, dejándome a su merced cerré de mis ojos lentamente siguiendo el ritmo que me exigía a mover mis labios con la habilidad que no tenía produciendo una extraña fricción que me avergonzaba pero al menos hyung se da el tiempo de enseñarme. Me arrincono contra la mesa hasta sentarme sobre la mesa, apoyando detrás de mi espalda baja sus manos, lo aloje entre mis piernas abrazándole la cintura lo cual me hizo jadear, mi cuerpo se estaba calentando, nuestros pechos estaban juntos rozándose al igual que nuestras entrepiernas, ahogue un pequeño gemido cuando mi hyung me tomó de los cabellos de mi nuca, me excito de sobremanera, la lengua de hyung invadió mi boca, oh Dios, besaba demasiado bien, si fuera chica ya estaría húmeda, sentí que ladeo mi cabeza al lado contrario del suyo encajando mejor forma nuestros labios, simulando algunos toques con su sinhueso fue devorando la mía.

Sin quedarme atrás tome el valor de apoyar mis pequeñas manos en el pecho del menor bajándolas hasta su deseable eightpack lo que entusiasmo mucho a mi amiguito. Después de acariciar cada detalle de su torso me atreví a colarlas debajo de su ropa, fue un poco dificultoso por el uniforme pero no imposible, quería arrancarle la ropa, pero no tenía el valor necesario para hacerlo ¡Por que! Enterré mis pequeñas uñas en su torso arañando lentamente a lo que el soltó una risita entretenida, dándome unos segundos para que mi respiración volviera a la normalidad, quería marcarlo como mío. Cegado por lo ardiente que me sentía me acerque su cuello, lamiendo la extensión de libre piel que alcanzaba a exponer, él se dejo totalmente ante mi atrevimiento, entonces como cual vampiro encaje mis pequeños dientes en la curvatura de su cuello, haciéndolo jadear y subiéndome el ego, mis abultados labios succionaron su piel, lo que dejaría una notoria marca, y sin darme el mucho lujo de pensar toque su entrepierna, Minho me obligo a separarme estando sorprendido, de mi no te escapas hyung, reí travieso al frotar mi mano encima del pantalón de arriba para abajo como si fuera un experto, el porno que veía me entreno bien. 

Hasta que el estúpido tono de mi teléfono me asustó haciendo que soltara un gritito y separar mi mano del pene de mi casi novio como si fuera fuego, sentí mis mejillas arder cuando mi hyung se rió de tal acto, me disculpe tomando mi teléfono, mire la pantalla y mi rostro se descompuso de rabia al saber quien era. 

- Jinki ... -dije enojado, acaso no tenia otra cosa que interrumpirme-
- No te preocupes minnie, contesta -Minho se había acercado hasta mi oido tomando entre sus labios mi lóbulo dándole una leve succión que me hizo estremecer aunque el molesto ruido del teléfono no ayudaba al ambiente- Nos vemos en la noche.

Susurro lo último antes de dejarme totalmente plasmado ¿Acaso dijo DESPUÉS?

Complejo de psicópataWhere stories live. Discover now