Realeza vs plebeyos

capitulo 1

-Hija ¿ como vas con Harold?-

-ay madre, todo va estupendo-

-hija ya hable con su padre y esta dispuesto a que ustedes dos se casen-dijo mi padre con un tono autoritario, pero al mismo tiempo entusiasmado

-no estoy segura padre, a veces me causa un poco de conflicto pensar en el matrimonio-

-hija ese muchacho es perfecto para ti, tiene una buena posición económica  y se ve que es un chico respetuoso-

-es lo mejor para ti Leonor- dijo mi madre

-¿el esta de acuerdo?-

-el esta mas que feliz de que seas su mujer-

-no te voy a mentir padre, el también me encanta como esposo, lo amo, sólo que estoy un poco temerosa, eso es todo-

-pero ya ves que es un grandioso hombre  para ti-dijo mi padre algo sonriente

-si, harán una gran familia, ya quiero ser abuela-

-bueno me voy a trabajar-mi padre le dio un beso a mi madre y se fue

De ahí termine de coser algunos vestidos que me habían encargado para las personas que gozaban de una vida de fortunas y riquezas.

De repente alguien llamo a la puerta, yo me pare para ir abrir porque tocaban con gran insistencia.

-mi amor- Harold

-mi vida-dije abrazándolo, el me cargo y me empezó a dar vuelta,  como me hace sentir el cada vez que lo miro

-ya te dijo tu padre-

-si-

-¿y qué opinas?-

-que me encanta ser la esposa de Harold Adam-

-oohhh, a mi también me encanta esa idea-dijo dándome un tierno beso

-vas a ir a el gran baile que dará el rey Fernando-

-no, tengo que cerrar un negocio muy importante ese día, ya avise al conglomerado de mi falta ese día, supongo que tu padre va a ir-

-si-

-¿te acuerda de como nos conocimos'?-

-si, como olvidar esa tarde en el parque, con ese hermoso vestuario que traías, esos ojos verdes-

-y tu con ese hermoso vestido, yendo a dejar todos los vestidos que habías cosido esa tarde-

-si jajaja, o cuando mi padre no te daba el visto bueno-

-ves  pasamos muchas cosas, y ahora vas a ser mi esposa-dijo sonriente

-así es Harold-dijo mi padre apareciendo de la nada

-suegro-dijo un poco espantado

-me alegro de que de verdad quieras a mi hija, espero nieto, pero dentro del matrimonio-

-por supuesto que si, seremos una gran familia-mi padre se sentó en una silla que había en el comedor y empezó a toser mucho

-padre-dije acercándome a el

-no me siento muy bien hija, debe ser por el trabajo que he tenido estos últimos días, pero estaré bien no te preocupes-

-te voy a preparar un té- al momento que le dije eso mi padre se callo de la silla, se había desmayado.

-¡¡Harold ayúdame!!!-el reacciono  rápido y cargo a mi padre hasta la recamara.

después de una hora mi padre al fin estaba empezando a reaccionar de aquel desmayo que tuvo. Estaba muy preocupada por lo que estaba pasando, y mi madre no había llegado de ir a vender los vestidos que habíamos hecho.

-padre, lo mejor es que no vayas a la junta del rey-

-tengo que ir, es la repartición de los medios mercantiles-

- ¿por que no va su hija? podría ser una buena idea-sugirió Harold

-¿que?-

-si, que su hija asista a su representación-

-no lo se, no creo que sea una buena idea-

-vamos padre, no quiero que te pongas peor de lo que ya estas, me preocupas-

-ahhh, esta bien, pero iras con Carlos-

-esta bien padre, quiero que te tranquilices, mañana yo me presento frente a rey y el príncipe Cristopher- dije abrazándolo, me preocupaba mucho su estado de salud actual, pero si iba yo le iba servir para que descansara.