Parte 228: Espíritus de Venganza

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La Niebla Negra cubría Runaterra nuevamente, siendo su segunda llegada anual. Y esta llegó a la mansión de Veigar con consecuencias.

Lulu se quedó temblando conforme veía las siniestras figuras de Hecarim y Kalista detrás del yordle. Aparentemente atraídos por el fenómeno.

"Parece que te ha comido la lengua el gato"

"Ve-veigar...." - intentaba avisarle la chica

"¿Qué pasa?"

"La... la..."

"¿Qué demonios? ¿Cuándo ha llegado aquí la niebla?"

"¡De-detrás tuya Veigar!" - le gritó el hada

"¿Mmm?"

El Maestro del Mal se dio la vuelta para encontrarse con los jinetes de las sombras, quienes le miraban fijamente.

"¿Qué hacéis aquí?" - preguntó el brujo sin alarmarse - "Aquí no se os ha perdido nada"

"Soy el espíritu que vaga buscando a los traidores e insolentes"

"Y yo aquel que encarna la guerra..."

"Muy bonito resumen de vuestras no vidas"

"Y tu estás marcado...."

"¿Marcado para qué?"

"Para la venganza" - respondió Kalista con voz fría

La mujer fantasma agarró su lanza con firmeza y atravesó el pecho del yordle antes de que pudiera reaccionar.

"Argh.... aaargh...." - gemía el brujo de dolor

"¡Veigar! ¡No!"

"Q... qu...."

El hechicero estaba en el suelo, sin moverse y con la lanza aun atravesando su pecho, desde el cual empezó a salir sangre.

"Ve-veigar... no... todavía..."

"Estamos aquí para reclamar su alma" - dijo Hecarim colocando su mano sobre él

"¡No! ¡Deteneos!"

En un solo instante el alma del mago salió de su cuerpo y fue absorbido por el jinete.

"No.... ¡no!" - gritó la chica entre lágrimas

"La niebla también te reclama a ti..."

La brujita echó a correr por el pasillo, donde se encontró con el armadurillo.

"Lulu, ¿qué pasa?" - le preguntó calmadamente

"¡Han matado a Veigar!"

"¿Cómo? No creo que Veigar halla....."

Antes de terminar la frase vio a los dos espectros manifestarse al final del pasillo.

"La niebla..."

"E-están ahí...." - dijo colocándose tras Rammus

"¿Quién ha soltado a esos fantasmas?"

Antes de poder reaccionar Kalista lanzó una de sus armas contra Rammus, atravesándole el cuello (creo que era el cuello) y haciendo que cayera hacia atrás.

"Ra-rammus....."

"La niebla te quiere a ti" - dijo la mujer amenazante

La niebla negra empezó a avanzar hacia Lulu y esta no podía escapar por ningún lado. Llegados a un punto empezó a rozar su piel, convirtiéndola en una especie de madera gris.

"No... no... ¡no!"

"........"

"¡Deteneos! ¡Por favor!"

"De... de... despierta..."

De repente la chica se despertó en su cama, con el brujo a uno de sus lados.

Se le veía sumamente calmado, como si no hubiese pasado nada. La chica se quedó sumamente confundida.

"Por fin te despiertas" - comentó el brujo

"¿Do-dónde estoy? ¡Veigi! ¡Estás vivo!"

"Veo que la niebla te ha afectado a la cabeza..."

"¿La niebla? Si, vi como nos rodeaba..."

"........"

"Nos rodeaba y salían Hecarim y Kalista... luego vi como te mataban a ti... y a Rammus"

"La niebla negra castiga a quienes se lo merecen, pero a los que entran en contacto con ella sin haber hecho nada suelen caer en un estado de pesadilla"

"¿En serio?"

El yordle sabía que eso no era cierto, pero no quería que ella volviese a tener esas pesadillas...

"Eso creo... no soy tan entendido"

"Entonces fue solo un sueño..."

"Si, solamente un sueño" - comentó el mago relajado

"Me alegro mucho..."

Lulu suspiró aliviada mientras que en el jardín se podía ver que aún seguía la niebla negra, con Kalista observándoles con ojos brillantes.

Las Crónicas de VeigarWhere stories live. Discover now