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Harry estaba buscando que ropa ponerse era el cumpleaños número cinco de Louis, su hermano, la persona que quería demasiado, se encontraba tan feliz, soltó una pequeña risa al recordar la vez que al apagar las velas de su pastel de cumpleaños había deseado tener un hermanito con el cual jugar y pasar todo el tiempo con el, aunque Louis por ser más pequeño no quería jugar con los video juegos de Harry, ni a la pelota porque su mamá le había dicho que Louis no se podía agitar demasiado, pero aun así con tal de pasar tiempo con su hermano menor el jugaba con todos los juguetes de Louis.

Al ver su chaqueta verde recordó que tenía que vestirse abrigado porque irían al parque y afuera hacia demasiado frío y no quería enfermarse y menos y el día del cumpleaños de su hermano, así que sacó su chaqueta, un gorro de lana, un pantalón y sus zapatos.

Cuando terminó de sacar su ropa, miró a su hermano acostado en la cama durmiendo boca arriba, se acercó a él y se sentó en la punta de la cama con cuidado para no despertarlo, estiró su brazo hacia la cabeza de Louis y comenzó a acariciarla.

Louis había despertado unos minutos atrás, pero al ver que su hermano estaba también en el cuarto decidió hacerse el dormido para más tarde hacerle una pequeña broma.
Quería reírse, las manos de Harry le hacían muchas cosquillas, pero el mismo se dijo que tenía que aguantar. El mayor se dio cuenta de cómo los ojitos de su hermano se movían como si quisiera despertar, pero enseguida capto que Louis solo se estaba haciendo el dormido, Harry al ver que su hermano no tenía suéter puesto decidió hacerle cosquillas y el pequeño estalló en grandes carcajadas y enseguida abrió los ojos diciéndole a Harry que parara.

— ¿Con que estabas haciéndote el dormido Lou?— pregunto continuando con las cosquillas.

—No, no, para Harry, creo que me orinare si sigues— las palabras que decía no se le entendían por estar riéndose.

—Si quieres hacerlo, hazlo, para que mi mamá te regañe— se burlo.

Pero Louis al captar que si se orinaba en la cama su mamá lo regañaría y lo castigaría como la otra vez que lo hizo, entonces se le fueron aguando los ojos. Harry paro de inmediato, pensó que le había hecho daño, así que lo agarro y lo levantó para abrazarlo.

— ¿Que tienes Lou? Perdóname si te hice daño, para por favor— dijo asustado, pensando que le había cometido un error, tal vez le había golpeado o raspado a Louis por las cosquillas con sus uñas.

—Mi mamá me regañara como la otra vez Harry si me hago pis encima de la cama— Harry se calmo y soltó una pequeña risa.

—Tu no me quieres—Soltó Louis al ver que su hermano mayor se burlaba de el. —Aléjate de mi, eres un mal hermano — se bajó corriendo de la cama y se encerró en el baño para así poder orinar y no estar cerca de su hermano.

Harry se había quedado en la cama de Louis pensando en las pequeñas pero dolorosas palabras que le había dicho su hermano y se hizo una pregunta en voz baja: ¿Por qué Lou dijo eso? Si yo lo amo más que a nadie, mientras que decía eso una lágrima se le salía de sus ojos. Harry era muy sentimental.

Después que terminó de orinar, se quedo sentado en el retrete, Louis se encontraba triste con su hermano mayor, pensó que no lo quería, solo por el simple motivo de haberse reído de el, Louis no entendía por qué Harry se había reído cuando él dijo que su mamá le pegaría si se orinaba en la cama, decidió salir del baño, estaba molesto con Harry y no le iba a hablar.

—Lou perdóname, te juro que no me estaba burlando de ti— le dijo Harry levantándose enseguida al verlo salir del baño.

—No me hables, tú eres feo y no te quiero en mi fiesta de cumpleaños— respondió Louis dirigiéndose a la salida de su habitación.

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