126. Valeria

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Valeria. 13 años.

La primera vez que sufrí de bullying tenía unos 9 años. Comenzaba 4to grado, me acaba de cambiar de escuela. Mi ex escuela no era como todas, era una especial, para niños con... mmm problemas tanto Síndrome Down, hasta problemas de ansiedad.

Yo tengo problemas de ansiedad y nerviosismo ahí el ende de por qué estaba ahí, me gustaba esa escuela, no habría más de 12 niños por salón y la escuela era pequeña, unos 100 niños en total diría.
Cuando mi hermano mayor termino la primaria en esa escuela, tuvimos que buscar otra -la escuela solo manejaba primaria- y me tuve que ir con él.

Siempre fui una niña obediente, nunca cuestione nada ni a nadie. Nunca me queje de que mi madre me pusiera moños y/o broches para la escuela.

Cuando fue mi primer día en la escuela, mis padres me acompañaron al salón, quede asombrada al notar que eran más de 20 niños y que ahí no había mesas y sillas, si no mesa bancos. Me senté en una esquina del salón en lo que mis padres entregaban lo faltante de mis útiles, usaba mis moños azules ese día - me gustaban mucho-.

Mientras estaba sentada un grupo de niñas me observaba y susurraba cosas mientras se reían, se reían de mí.

Me hice pequeña en mi lugar, de un momento a otro una niña se me acerco, su nombre es Erika -fue mi primera amiga en la escuela- fue amable conmigo, era muy agradable conmigo y en ese momento decidí que quería ser su amiga y así fue. Me senté con ella después de despedirme de mis padres.
Las primeras horas pasaron y mientras más tiempo pasaba con Erika, más me agradaba.
Veía que las otras niñas del grupito aún se reían de mí, pero todo empeoro en clase de inglés.

Unas de mis pocas materias favoritas es el inglés, no era una experta pero aprendo rápido si me lo propongo.

En la clase se suponía que solo debíamos hablar inglés y como ya mencione antes, jamás cuestione. El profesor me hizo pasar al frente y presentarme, hice lo debido pero el profesor y los demás lo esperaban en español, así que cuando lo dije todo -lo normal- en inglés, se sorprendieron. El maestro me felicito y me indico que volviera a mi asiento. Obedecí y me sentía orgullosa de mi misma, sin embargo el gusto no me duro mucho ya que tan solo unos minutos después un bola de papel fue lanzada a mi lugar y por ende a mí. La abrí y dentro decía:

"Bien echo rarita"

Supe de quien pertenecía después de haber escuchado las risas del mismo grupito de niñas, volví a hacer bolas el papel y lo tire a la basura.

Pasaron los días, Erika me presento a sus demás amigas y me llevaba bien con ellas.

También ya conocía el nombre de las niñas del grupito.

Y también caí en la peor trampa... me gustaba un niño del salón.

Me volví más participativa en clase y para ese entonces me volví la cerebrito del salón, por así decirlo. Eso solo fue una razón más que se sumó a las burlas de mis compañeras. Sus nombres eran Ximena,
Sahjarai. La cual tenía el cabello casi rubio y extremadamente largo, junto con una tes bronceada. Mejor amiga de Ximena y líder. Paulina, una rubia de una muy baja estatura. Y Valeria. Cabello castaño claro, estatura media y tes pálida.

Se podría decir que ellas eran las populares.

Entre ellas 4 se centraron en hacerme la vida imposible. Empezando con burlas y apodos.
Pero un día se detuvieron y fueron amigable conmigo, me ofrecieron formar parte de su grupo, para mi ese era mi boleto de salvación y sin duda acepte.

Pero que idiota, me había metido en la boca del lobo yo sola.

Deje a Erika y a las demás, en ese momento no me importo, ¿por qué? Porque iba a ser de las populares, las burlas se detendrían, me tratarían bien.

Pero que ingenua.

Unas 2 semanas después me tenían haciendo sus tareas, proyectos que eran en "equipo", dijeron que mis moños eran ridículos y que si quería estar con ellas me los tendría que quitar y no dude un segundo cuando le pedí a mi madre que no me los pusiera más.

BULLYING STOPS HEREWhere stories live. Discover now