Miraculous Ladybug - Secreto de Superhéroes

Capítulo 6: Escondite

Marinette estaba por dejar pasar al rubio, pero entonces recordó que su pared estaba llena de sus fotos. Si el bajaba se daría cuenta que ella se había pasado los últimos años espiándolo en secreto. Y el mayor de los problemas era que Tikki estaba a la vista.

- Adrien, solo dame un segundo. Debo guardar unas cosas antes – Para la peli azul seguía siendo difícil hablar con él, el traje de Chat Noir hacía un poco más fácil el trabajo, aunque no podía mantener el contacto visual por mucho tiempo.

- De acuerdo, pero no tardes mucho, sigo siendo buscado por la ciudad –

Marinette bajó lentamente para parecer tranquila, pero apenas cerró la escotilla corrió rápidamente hacía su kwami

- ¡Tikki! Despierta, es una emergencia – Susurraba cerca de su compañera.

- Marinette... ¿Qué sucede? - Frotó sus ojos tratando de entender la situación.

- Chat Noir está aquí, debes ayudarme a esconder las fotos y esconderte –

- ¿Chat Noir? Vaya, será mejor apurarse – bostezó

Ambas estaban despegando todas las fotos que encontraban del rubio, Marinette apagó la computadora antes de que él viese el fondo de pantalla. Y por último escondió todo lo relacionado a Tikki.

- Bien, Ya está todo... creo que está limpia – Dijo la criatura

- Gracias Tikki – Respondió la muchacha suspirando

- ¿Marinette ya puedo pasar? – La voz del rubio se escuchaba desde afuera.

- Voy a esconderme, pero Marinette... Piensa que vas a hacer con esto. No puedes ocultar tu identidad por siempre – Tikki se acercó a la puerta

- Lo sé, veré que hacer en el momento... - susurró mientras su kwami salía de la habitación – Ya puedes pasar Chat Noir –

La escotilla se abrió y el gato bajó de un salto. Nuevamente la peli azul trataba de evitar el contacto visual. Por más que Adrien ya había estado en la habitación antes, el silencio incómodo era inevitable. Ambos estaban sin palabras. Las circunstancias habían cambiado. El rubio iba a decir algo pero su transformación se deshizo.

- Adrien llevamos horas transformados, necesito un descanso – Dijo Plagg moviéndose como si fuera una pluma cayendo lentamente. Pero en lugar de caer en las manos de su portador se dirigió hacia la peliazul.

Marinette lo sostuvo antes de que cayese al suelo. El kwami era un pequeño gatito negro con ojos verdes e igual de cabezón que Tikki.

- ¡Oh! El debe ser tu kwami ¿No? – Sonrió Marinette – ¿Necesitas comer algo para recuperar energía? 

- Oh señorita, ¿tiene algo de queso qué pueda convidarme? –

- Claro, espérame aquí – Dejó a Plagg acostado en el escritorio y se dirigió a la puerta.

- ¿Marinette te acompaño? – Pregunto amablemente Adrien. Por lo que la peliazul no puedo evitar ruborizarse.

- Oh, no no, está bien. Mis padres están abajo y no les he dicho que estás aquí. Ya regreso –

- Uuhh... De acuerdo – La muchacha cerró la puerta y bajó. Adrien se sentó en la silla que Marientte estaba usando y resopló. Había estado todo el día escondiéndose de las personas. Su padre debería estar buscándolo y no podía quedarse siempre en la misma posición.

- Plagg, esto es un desastre. LadyBug debe estar decepcionada de mi –

- ¿Adrien eres lento o qué? – Dijo el kwami mirando fijamente al rubio – ¿Es que no te das cuenta? –

- ¿Cuenta de qué? ¿De qué me hablas? – Adrien sabía que Plagg estaba enterado de la identidad de su compañera, Pero ambos habían accedido a no descubrirla hasta que ella lo decidiese.

- Probablemente eres la única persona que es capaz de resolver problemas complejos de física pero no capaz de darse cuenta de la cosa más obvia del universo... -

Cuando Adrien iba a responder, Marinette abrió la puerta con un plato pequeño repleto de queso Camembert. La criatura emocionada voló hacía ella y sacó unos de los pedazos. Pero antes de irse hizo equilibrio con el plato en su cabeza y se dirigió hacia el escritorio. La peli azul no puedo evitar reír. El rubio la miraba y no podía evitar sonreír también. Su sonrisa era contagiosa y siempre parecía estar contenta. Pero al ser muy tímida solía parar en seco y disculparse

Era parecida y a la vez diferente a LadyBug. Marinette solía ser mucho más tímida y cerrada que la mariquita. No podía evitar preguntarse como unas chicas tan diferentes llegaron a ser amigas. A tal punto que LadyBug la mencionase más de una vez.

- Marinette... ¿Cómo conociste a LadyBug? – El rubio notó como ella se tensaba, pero lo dejó pasar si más

- Oh, esto... - Por su parte la peli azul estaba ideando una escusa lo suficientemente creíble para que Adrien se lo tragase – Ella me salvó un día, hace varias semanas. Y yo le dije haber visto al akuma en la víctima. Por lo que luego de desakumatizarlo me dio las gracias. Y a veces cuando... ella estaba herida venía para que la ayudara... si... – La mentira parecía bastante bien desarrollada. Pero eso le hizo recordar algo.

En la lucha contra Black Angel su herida se abrió. Por lo que en un rato tendría que cambiar sus vendas. Vendas que iban desde el pecho hasta la cintura. Si Adrien veía las vendas iba a sospechar.

- Oh Adrien... se está haciendo tarde. Duerme en mi cama. Yo iré abajo dónde está el sofá -

- Oh no, yo iré abajo... está es tu cama después de todo. Y ya te estoy metiendo en problemas... - El rubio se sentía sumamente mal al obligar a la muchacha dormir fuera de su propia habitación.

- Pero Adrien, mis padres podrían bajar y verte... - Repuso la peli azul.

- ¿Y si te ven abajo no sospecharían? – Agregó

Oh no, no había pensado en eso...

- Mari, tengo una idea. No lo malinterpretes. Pero ¿No sería mejor compartir cama? – El rubio no pudo evitar sonrojarse al decir aquello.

Un pensamiento parecido a un "¿QUÉQUÉQUÉQUÉQUÉ QUÉEEE?" pasó en la cabeza de Marinette. ¿Dormir con Adrien en la misma cama? ¡Pero si planeaba hacerlo una vez en pareja! Ahora que ella estaba confundida y estaba adaptándose a la situación... Tenía que pasar esto.

Lo peor es que por parte le gustaba la idea.

No se dijeron mucho más. Marinette avisó que no bajaría a comer porque estaba cansada. En silencio cada uno se acostó en un lado de la misma. Para engañar el vendaje la peli azul se puso un piyama largo blanco y Adrien pidió prestada ropa vieja del padre de Marinette.

Se formó otro silencio incómodo el cuan interrumpió Marinette diciendo "Buenos noches Adrien" a lo que él respondió "Buenas noches Prrrrrincesa"

Y LO VOY A CORTAR AQUÍ PORQUE SOY TERRIBLE MUAJAJAJJAJAJAAJAJAJ (?

No mentira, pronto la voy a continuar, pero les dejo un poco de suspenso 

bye!!