Matrimonio Arreglado

Capítulo X

*Narra Emily*

Había salido de la habitación obedeciendo las palabras de Williams, mire el pasillo dirigiéndome a la sala para después sentarme en el sillón. Pasado unos minutos de estar viendo el techo tome mi celular de mis cosas que se habían quedado en el mismo lugar cuando llegue.

— Comunique me con mi padre, por favor —

— ¿De parte de quién? —

Suspire tranquilizándome, acaso ya no conocían el celular de las personas que Vivian en el lugar.

—De su hija, ¿De quién más? —

— Señorita Emily, siempre con su actitud —

Baje mis hombros apenada por mi actitud — Lo siento mayordomo — Escuche como una pequeña risa salía del otro lado de la línea.

— Su padre ha estado muy preocupado por usted —

— Lo sé, me disculpare con él —

— ¿Emily? —

Inconscientemente había guardado silencio. Tome mi celular y colgué la llamada, mirando como salía Williams y Andreu de la habitación dirigiéndose a la cocina.

*Narra Williams*

La cena había transcurrido tranquila y placentera. Andreu y Emily se llevaban bien, a pesar de que hace unos minutos ella quería ser culpable de un crimen con plumas, sonreí ante la ocurrencia de algo así.

Pasado los minutos Emily decidió irse a bañar y cambiar con la ropa adecuada esta vez, mientras tanto Andreu se dirigía a su cuarto. Minutos de tranquilidad, sonreí dejándome caer en el sillón mirando el techo blanco del apartamento. El día de hoy habían sucedido muchas cosas, desde el encuentro con Emily, hasta el accidente con Andreu y ella, negué con mi cabeza para alejar esos pensamientos.

Cerré mis ojos sintiendo una vibración a mi lado. Mire la pantalla del celular confundido, al parecer era una llamada de un numero sin registrar, aunque tuviera duda no podía contestar algo que no era de mi propiedad. Suspire ignorando el dispositivo para mirar esta vez a la persona frente a mí, ¿Cuánto tiempo llevaba en ese lugar? — ¿Emily? —

— Williams —

Estaba confundido, hace unos minutos estaba bien, ¿Es que acaso las mujeres son muy complicadas? — E-Emily — Mire como me abrazaba mientras miraba la pantalla de su celular. Ahora lo comprendía, tal vez la persona que la llamaba era la responsable de que Emily estuviera tan distraída y confundida. Respire profundamente rogando que no me odiara después de esto.

— Emily, por fin contestas —

— Lo siento, pero ella no quiere hablar contigo —

— ¿Quién eres tú? ¿Qué has hecho con ella? —

Suspire intentando reconocer la voz —Tranquilízate — Hable intentando controlarme. No sabía quién era esa persona o lo que significaba para Emily — Emily se encuentra bien, por eso fue el motivo de su llamada, has me el favor de decirle a su padre que se encuentra bien que no se preocupe —

— ¿Quién te crees para darme ordenes? Quiero hablar con ella —

— Soy quien está cuidando de ella, soy quien la ayudo, soy quien no la dejo sola y soy su prometido — Mire nuevamente el techo sin escuchar respuesta de parte de la otra línea — Si has entendido, espero que le digas eso a su padre — Colgué la llamada para dirigir mi mirada a Emily — ¿Te encuentras bien? — Sentí como asentía aun escondiendo su mirada en mí. Pasado los minutos se separó de mí sonriendo.

— Gracias Williams —

Mire como se alejaba a la habitación de huéspedes — Sin duda son complicadas —

* Día siguiente *

Golpee levemente el despertador junto a mi cama, era Domingo por lo cual no era necesario ir a la empresa o trabajar, sin embargo necesitaba levantarme. Me senté en la cama mirando la hora del despertador, generalmente colocaba la alarma a las 7 a.m., aunque ayer había sido un día largo.

Abrí lentamente mis ojos sorprendiéndome de la hora que marcaba el reloj, tome mi ropa y entre a la ducha para bañarme y arreglarme, era tarde, demasiado tarde como para seguir dormido.

Una vez listo salí de mi habitación al comedor.

— Por fin despiertas —

— ¿Quieres callarte? Ya es bastante malo despertarse tarde —

— Deberías de ser como tu prometida, se levantó desde las 7 a.m., y no a las 10 a.m., como tú, demás es bastante buena y justa, si no fuera por ese espíritu caritativo, me hubieras lanzado a aquella isla nuevamente —

— Si no te cayas no le hare caso y te iras —

— ¿Qué dices? Estoy completamente en silencio —

— Por cierto, ¿Dónde está ella? —

— No lo sé, no ha regresado —

— ¿A qué hora salió? —

—Desde las 7 de la mañana —

— ¿Por qué no me dijiste antes? —

Me levante de mi lugar rápidamente dirigiéndome a su habitación.

— Porque tú dijiste que me callara —

Maldije por lo bajo entrando a la habitación. No estaban sus cosas, abrí el armario del lugar encontrando la ropa que había comprado para ella, y colgado se encontraba el abrigo que le había prestado aquella noche, limpio y con un pequeño sobre de papel en la bolsa. Lo tome confundido sentándome en la cama para abrirlo y leerlo.

"Williams" Sonreí imaginando su voz en mi cabeza.

"Sé que ha sido poco el tiempo que convivimos, e inicialmente te odiaba, odiaba el hecho de que no rechazaras el compromiso que nuestros padres acordaron, odiaba que mi padre pensara que necesitaba a un hombre a mi lado. Al principio creía que eras una persona engreída, una persona que solo veía el bien propio, una persona que se dejaba manipular por los demás, sin embargo por el poco tiempo que convivimos puedo decir que estaba equivocada, en un día pudiste demostrarme tu amabilidad, tu sinceridad y tu humor, o por lo menos eso fue lo que me hiciste comprender.

Las despedidas suelen ser largas y dolorosas. No quiero causarte más dolor del que ya le hice a tu mejilla, me disculpo por no curarte en el momento, dejo un pequeño frasco con medicina, te ayudara a quitar la marca.

Lo siento Williams, no seré capaz de cumplir con el acuerdo que tuvimos. Me da miedo que mi codicia empiece a desear vivir contigo y envejecer a tu lado. Necesito un tiempo para eliminar estos pequeños sentimientos que en el futuro pueden ser mi derrota.

Te pido que no me busques y si puedes inventes algo a mi padre, no quiero que me encuentren. Con el tiempo conocerás a alguien mejor que yo, no quiero mantenerte atado en un matrimonio arreglado, así que te doy mis buenos deseos en tu futuro matrimonio, espero que seas feliz"

"Sin más agradezco todo lo que hiciste por mi Williams"

Doble el pequeño trozo de papel volviéndolo a guardar en su sobre, no entendía sus palabras, decía que me quería, pero se iba. Me deje caer sobre la cama cubriendo mi rostro con mi brazo analizando sus palabras, estaba cansado, confundido, sentía un sentimiento que hace años no sentía.

— ¿Iras por ella? —

Escuche como la voz de Andreu hacía eco en mi cabeza — ¿No crees que es tarde ya? —

— Nunca es tarde cuando realmente quieres algo, existe el tiempo, el espacio, y la distancia, pero ninguno determina cuando es tarde para alguien —

Me senté rápidamente en la cama suspirando, desgraciadamente tenía razón — No me esperes, manda a investigar las estaciones de autobuses, de trenes, de aviones, necesito la información de donde está en media ahora —

— Maldición —

Salí corriendo del apartamento tomando mi celular y llaves del automóvil — Espérame un poco más Emily —