Capítulo 13

2.9K 232 106
                                    

April: ¡Hola! Bueno

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

April: ¡Hola! Bueno... realmente esto es algo incómodo, no estaba segura de si debía o no escribirte, pero estaba algo aburrida y dije: ¿por qué no?

Le di a enviar antes de arrepentirme. Estaba haciendo el ridículo definitivamente, ¿pero cuando no? Había perdido las esperanzas en ese aspecto conmigo.

Caminé de un lado a otro en la habitación, esperando una respuesta del chico piropo de ayer. Le había apodado "chico piropo" al no saber su nombre y... ¡no le había dicho quién era en el mensaje!

Cogí el móvil y escribí:

April: Soy... ¿la chica de ayer? Me llamo Spril, por cierto.

April: Spril*

April: April*

Si antes no había hecho el ridículo, no sabía ya cómo llamarle a aquello. Yo lo dije, ¡adiós esperanza!

Me di un golpe en la frente con la palma de la mano reprendiéndome y esperando que el chico piropo no se burlara de mí.

El móvil vibró en mis manos y rápidamente abrí el mensaje.

Chico piropo: ¡Hola, Spril! Fue un alivio encontrar un mensaje tuyo. Por cierto, tu nombre es fantástico, creo que llamaré a mi futura hija Spril también.

Inevitablemente sonreí luego de terminar de leer. Creo que no fue tan mala idea enviarle el mensaje.

April: Oh, pues muchas gracias, creo que cambiaré tu apodo a "chico payaso".

Chico piropo: ¿Y cuál es mi apodo actual? Así te ayudo a escoger el mejor ;).

April: No te lo diré. Aún no se tu nombre, chico piropo.

April: Demonios.

Me di un golpe mental riendo. Le había dicho el apodo que le había puesto sin querer.

Mi móvil vibró en mis manos y esperé hallar un mensaje, pero se trataba de una llamada.

Contesté.

Creo que mi apodo para ti será "chica fuego". ―Fue el saludo que chico piropo me dio. Sonreí.

Oh, pues, hola. De hecho, estoy excelente, gracias por preguntar.

Lo siento, bella, hermosa y delicada dama, ¿está usted tan bien como deseo que esté?

Solté una risotada al oírlo.

―Depende de que tan bien desee que yo esté, pero, le puedo asegurar que mi charla con usted me está rescatando de lo que podría haber sido una mañana desastrosa.

Es un honor oír eso, señorita fuego.

Espera, ¡aún no se tu nombre! ―me quejé.

El infiltradoWhere stories live. Discover now