52//dad!

9.8K 779 241
                                    

Todo en mi cabeza comenzaba a tornarse confuso en mi mente; deje caerme de rodillas sintiendo el ardor en ellas. Las aves cantaban demostrando que a ellas no les preocupaba nada.

Las palabras de mi líder —si es que aún puedo llamarle así— fueron demasiado claras: —Tomaremos Alexandria si estás personas se acostumbran al nuevo mundo. —ordenó.


—Ruby — la voz jadeante de Maggie se hizo presente haciendo que la mirara el grupo que venía atrás de ella— Entiendenos solo queremos un lugar seguro.

—No —mi voz ronca se hizo presente  me levante lentamente colocándome recta ante ellos—¿Intentaron ya hablar con ellos? —pregunté acercandome a la última Greene, Rick salió de un costado de Maggie colocándose enfrente de ella— Ellos pueden cambiar Rick, lo sabes.

—Ellos han vivido detrás de este muro desde el principio, no podrán.


—¡Pueden cambiar, todos lo hacemos!— grite ganandome una mirada con pena por parte de todo el grupo


Todos cambiamos— me habló Houdini mientras me daba una lata de duraznos— Podemos cambiar o volver de lo que éramos sólo es cuestión de querer de poder. Sólo necesitamos un detonante para cambiar, es eso.

Carl me dio una mirada de desaprobación, mientras que Michonne se colocaba a su lado todos me miraban como una extraña.

Empecé a correr sintiendo mi sangre hervir de coraje ante lo que escuche. Me detuve para poder observar el cielo «—El ya no existe—» recordé las palabras de Carol.

—¡Quiero que vuelva!— le grite al cielo, mientras las lágrimas brotaban.— ¡Quiero que Houdini vuelva!



—Nadie te hará caso— la voz de Ron hizo que volteara de golpe— Aveces me pregunto si hay alguien haya arriba que nos escucha.

—Dejame sola— grite para volver a correr saliendo de Alexandria. El bosque parecía tan grande, tan inmeso.

«—El ya está muerto—»

Me deje caer cerca del Río observando mi reflejo

—Deja de llorar— me repetí— Houdini no le hubiera gustado verte llorar ¡Maldición no seas débil!

Avente una piedra haciendo que mi reflejo se deformara. Unos brazos en mi cintura me tranquilizaron era un tacto ajeno a mi. Muy ajeno al que estaba acostumbrada.

—¿Cuánto tiempo aguantaste este dolor?—preguntó Ron susurrando en mi oido sólo cerré mis ojos— Ya no debes estar sufriendo Ruby.

No respondí sólo me deje llevar por el hermoso silencio que estaba alrededor nuestro. Mi respiración de volvió tranquila, Ron se separó de mi. Abrí mis ojos lentamente para ver que se colocaba a mi lado ayudándome a levantarme.

—Enseñame disparar— dijo tan derrepente, sonreí.— Podrás distraerte conmigo y dejar de pensar en otra cosa.

—No tenemos un arma— contesté pero el saco una de su espalda con el cartucho lleno.—¿Tenías planeado esto?

—¿Por qué crees que tarde en llegar cuando saliste corriendo?— pregunto rodeando los ojos

—Pensé que no me seguirias—respondí sin verlo a los ojos, el tomó mi mentón haciendo que lo mirara.

—Los amigos están en las buenas y malas ¿No es así?—preguntó y yo asenti—Somos amigos y no pienso dejarte

Sonreí. Quizá Ron tenía cara de niño mimado, engreído. Pero era más tierno, noble. Nadie lo conoce como yo lo conozco. Observé a Ron que observaba el arma y apuntaba al árbol. Me recordaba tanto a Houdini tanto por su forma de pensar y su peculiar gorro. Si Ron se fuera no se que haría sin el.

—Me seguirás observando o me enseñarás a disparar— añadió Ron dandose la vuelta con una risa gatuna.— Vamos tenemos que volver antes de que se den cuenta que una pelirroja y no castaño no están.

Me acerqué a paso seguro haciendo que algunas hojas se rompieran. Me coloqué atrás de el y tome sus brazos colocandolos a la altura de su rostro mientras sostenía el arma.

—Alzala a la altura de tus ojos— susurre en su oído, hizo caso a mi indicación puso su dedo en el gatillo— No coloques el dedo en el gatillo si aún no estás dispuesto a disparar.

—¿Qué pasará si disparo?— pregunto aún viendo hacia al frente.

—Ya no hay vuelta atrás— respondí y el se dio vuelta de golpe haciendo que quedaramos a una distancia poco apropiada— Estás dispuesto a matar

—¿Y si lo hago para proteger a los que amo?—pregunto haciendo que su olor a menta llegará a mi nariz.

—Estarás haciendo lo correcto.

Unos gruñidos nos hicieron voltearnos un caminante se acercaba a nosotros. Saque mi cuchillo alejándome de Ron matando al caminante.

—Hay que volver-—habló y escondió el arma detrás de su espalda.— No hay que tener problemas con Deanna o con Rick.

—Vamos

Regresamos en silencio, quizá yo puedo superar a Houdini con ayuda de Ron. Hicimos el mismo procedimiento que siempre para volver a entrar a Alexandria.




—¡Rick!— escuchamos el gritó de Jessie haciendo que corrieramos hacía donde se escucho el gritó.


Justo en ese momento también Carl venía corriendo con Enid, pero eso no era lo importante. Rick saco un arma apuntandonos a todos, trague saliva. Pete el padre de Ron inconsciente a un lado de Rick.

Ron empezaba a ponerse nervioso, intento correr hacia su padre pero antes de que lo hiciera lo jale del brazo haciendo que los dos quedaríamos sentados en el suelo.

—¡Papá!— grito Ron solo pude abrazarlo.

Tome su rostro entre mis manos. Y junte nuestras frentes.

—Así se sana el dolor— añadí y Ron cerró los ojos.

—Así se sana el dolor— repitió despegue nuestras frentes y este al instante se lanzó a abrazarme.

Michonne dejó inconsciente a Rick, sólo abrazaba más fuerte a Ron mientras se llevaban a Rick.




No se si ya veía al grupo como unos monstruos o si yo había cambiado.

诅咒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora