Alice: La fiebre de las 10:12

Todo un caso en el reencuentro con Dálton: Cuarta Parte

"Cada persona decide como guiar su vida, ya sea para bien o para mal"

"Una pequeña alteración en un factor crucial de tu destino puede alterar el resto de tu vida"

-Kurisuka

Aún tengo vagos recuerdos de aquel día, pero que más, es un día nuevo y hay que olvidar el pasado... ¿no?, en fin, hoy Dálton cumple 13 (pero miren que emoción!!!... la verdad es que no es nada del otro mundo, lo que pasa es que llevo meses sin verlo y es un buen detalle... (supongo... eso espero), quedamos de vernos en un andador lleno de bancas, muy agradable para pasar el rato, faltaban dos días para San Valentín, por lo que decidí regalarle algo por adelantado y algo por su cumpleaños.

Me apresuré en llegar al lugar puesto que me había atrasado con 5 minutos, llegué, tenía una sonrisa pintada en mi cara, no voy a mentir, me sentía emocionada porque ahora era un nuevo comienzo y a partir de este día se arreglarían todas las cosas del pasado, mi corazón estaba agitado y latía a mil por hora, miré el lugar... Mi sonrisa desapareció, busqué nuevamente con la vista y nada, el no estaba ahí, sentí que algo dentro de no se derrumbaba, tenía ganas de que alguien me abrazara, caminé un poco y me senté en la ultima banca, miraba cautivada las estrellas, sí, son hermosas cuando brillar, sin darme cuenta me la pase hora y media mirando el cielo estúpidamente, mire mi reloj y tuve la iniciativa de marcharme, me levante y comencé a caminar, ya me encontraba al final del andador cuando decidí mirar por ultima vez... Nada, sentí una sensación rara, como ganas de llorar pero no había nada, ni una sola lágrima, mire el cielo y estaba a punto de dar el siguiente paso cuando alguien gritó mi nombre, rápidamente miré para ver de donde provenía aquel grito, era él, a decir verdad a cambiado bastante, ahora es más apuesto y mucho más alto, venia agitado como que si hubiese corrido bastante, me acerqué a él y lo observé con detenimiento.
-Lo siento...
-No pasa nada.
-Tuve un par de distracciones... Y vine lo más rápido que pude... Enserio lo siento. -Hablaba con un poco de dificultad por la fatiga.
-Tu regalo.
-Eh?
-Espero que te guste, tiene un poco de temática de San Valentín.
-Pero...
-Te gustan los bombones y chocolates no?
-Si... No te hubieras molestado... Gracias.
-No hay de que. -Una sonrisa estaba pintada ahora en mi cara.
-Te quieres sentar? -Señalo una de las bancas de aquel andador.
-Claro!
Nos quedamos alrededor de dos horas platicando de lo que había sido de nosotros durante los dos años y medio que casi no nos tratamos y sobre Daniel, me contó que se quedó un tiempo en su casa y que en estaba viviendo en Estados Unidos, entre otras cosas, miré mi reloj y ya era tarde y ya había llegado la hora de despedirse, lo abracé y el me respondió el abrazo, al separarnos miré hacia abajo y cuando me percaté, él estaba a punto de besarme, me volteé y evité el beso, quedando así como un beso en la mejilla, no sé que me pasó, en el interior si quería aquel beso pero había entrado en pánico, sentía que no era el momento, el se apartó un poco y se rió.
-Parece que aun no estas lista, eh?
-...
-No te preocupes, no importa, no haré algo que no quieras. -Sonrió amablemente, con esa mirada matadora. -Bueno, me voy, gracias por venir y esperarme.
-... -Me encontraba un tanto shokeada. -Adiós!
Se dio la vuelta y se marchó, yo me quedé ahí parada un rato más, mirando al piso, después yo también me marché.