ONLY ME FOR YOU [GTOP]

CHAPTER 2: "Hurt"

"Alguien que me despierte. Mi alma está lleno de recuerdos"

- Es un placer – dijo sosegado.
Seung soltó su mano y Ji sintió un malestar. Su corazón se sintió incompleto.

- ¿Podría reconsiderar mi despido? – el pelirrojo salió de su letargo, para prestándole atención. – G-DRAGON sunbae-nim

"¿Sunbae-nim? No sigas... por favor. No podré soportarlo. No soy fuerte. No lo soy. Soy un cobarde."

Los ojos de Ji Yong comenzaron a adormecerse. Sus parpadeos eran pausados, sentía mareos y su estómago revuelto. Náuseas, dolor e indisposición. Sus piernas temblequearon tumbando levemente su cuerpo a un lado. Los brazos de Seung reaccionaron por reflejo para sostenerlo. Pero las manos del otro no se lo permitió.

- ¿Se siente mal? – se dirigía a él de manera formal. Eso lo lastimó.

- No estás despedido – habló bajo, giro para alejarse.
Dae Sung observó vigilante el comportamiento de Seung. Su rostro se veía intranquilo mientras su cuerpo se movía angustiado.

"Existe un llamado de la sangre... supongo que este es el llamado del primer amor"

- No vayas – alcanzó sostener la muñeca de su amigo – Déjalo – el otro no podía regresar la mirada a quien le hablaba.

- Parece... que se va a desmayar.

- No es nuestro problema – el otro volteó a mirarlo disgustado.

- ¿Cómo puedes ser tan desinteresado con alguien que conoces?

- No lo conozco

- Cuando llegué parecía lo contrario

- ¿Vas a preocuparte por un extraño?

- No es un extraño. Es mi ex jefe. – tomó su mano y lo apartó – No quiero que piense que soy una mala persona. Ya vengo.

Seung salió del salón, recorrió su mirada intranquila por todos lados. Sin ver con exactitud a larga distancia debido a sus problemas de visión.

- ¡Seung! – la chica movió la mano y se acerco a él. Lo abrazó por la cintura y le dio un beso en los labios – Amor ¿Dónde estabas? ¿Encontraste a Dae? – él sonrió atendiéndola. Dejó de lado a quien estaba buscando.

- Sí, amor.

- ¿Qué estabas haciendo?

- Conocí en persona a G-Dragon. Estaba yendo detrás de él...

- ¿Por qué? – interrumpió – ¿Querías hablar con él de nuestro despido? – asintió. – No te preocupes por eso. Hoy solo centra tu atención en la ceremonia de nuestra boda ¿ok? – dijo mimosa apachurrando sus mejillas.

- Está bien.

Empujé la puerta del baño, entré con desesperación. No tragaría mis lágrimas por un segundo más. Mi cuerpo cayó sobre mis rodillas. Apoyé mi espalda en la puerta, impidiendo que alguien entrara a molestarme.

- Ah – un primer gemido se escapó de mis labios.

Sujeté con fuerza mi camiseta, mi uña arañó mi piel por encima. El pecho lo sentía cerrado, mi corazón estaba intentando latir en el poco espacio. Duele. Tenía un nudo en la garganta que no me permitía respirar con facilidad.
Mis lágrimas ya están brotando, se llenó en mis ojos cayendo gota a gota como la lluvia. Trato de ocultarlas con mi mano pero es inútil. Mis glándulas lacrimales están rotas.

Este conflicto me produce una arcada, arrastrándome voy hasta el inodoro y vuelvo todo lo que desayuno. Mi boca está asquerosa, el dolor no se va, estoy cada vez más débil.

Me siento apoyando mi brazo sobre la tapa del inodoro cerrado. Sigo llorando. No tengo idea de cuando pararé.

"Una vez viviste en mi corazón, me llamabas amor y ahora no me recuerdas."

- Aaaah – sollozó sin tener un ápice de vergüenza. – Aaah... hy... ung... aah... hyung.

"Tengo la absurda idea que dará la vuelta y regresará a mí. Tocará la puerta y me dirá que era una broma. Solo estaba bromeando como castigo por abandonarlo por diez años"

Me recuesto en el suelo y jaló mis cabellos. Tan fuerte para disminuir el dolor de su desprecio.

"¿Por qué no puedo dejar de llorar? Cuento los recuerdos uno, dos, tres mientras estoy solo en este lugar"

*FLASH BACK*

Ji Yong escapó de su casa aprovechó que su madre dormía. Corrió las cinco casas que lo separaban de su hyung y se trepó al árbol para entrar al dormitorio de Seung. Cuando estuvo en el balcón, tocó suavemente para no despertar a nadie más que a su hyung.

- Hyung – susurró. – Abre...

Seung se despertó al escuchar la delicada voz, limpió su rostro penoso y prendió la lámpara de su mesita de noche. Se había quedado dormido mientras lloraba. Corrió a abrir la puerta a Ji y se abrazaron como si no se hubieran visto en siglos.

- Hyung, te extrañé. – sollozó – No quiero estar sin ti... nunca.

- Mi pequeño amor. No dejare que nadie nos separe.

- Por siempre juntos. – dijo y lo besó.

- Entra. Hace frío.

Entraron y se sentaron abrazados en la cama.

- ¿Cómo llegaste aquí?

- Escapé. Aproveché que mamá se quedó dormida. Tenía que verte. No he podido respirar bien desde que no estoy a tu lado.

- Ya estoy contigo. Te daré el oxígeno que necesitas – bromeó y sopló sobre la pequeña nariz. Ji cerró los ojos, el vaho tibio era como un alucinógeno para él.

- Hyung... escapemos. – abrió los ojos con decisión. El otro se distanció y lo miró confundido. – Si no escapamos, mamá nos separará. Escapemos hyung. Tengo mucho dinero ahorrado. Nos alcanzará para comprar pasajes.

- ¿A dónde quieres ir? – preguntó. El pequeño castaño se alegró y lo abrazó con fuerza. – También tengo dinero, mucho dinero. Podría pedir la ayuda de mamá. Ella nos ayudará, ella comprende y apoya nuestro amor.

- Amo mucho a tu mamá – el pelinegro fingió estar celoso. Entre sonrisas, el castaño contestó – A ti te amo mucho, más, hyungie.

- Lo sé. Te amo, Ji Yongie.

El pequeño atrevido empujó al mayor y se echó encima. Apoyó sus manos sobre el pecho ajeno. Sus corazones latían sin control. Estaban tan cerca que intimidaba a cualquiera. Unió sus labios con los labios de Seung.

Era un beso suave y tranquilo. Estaban tomándose todo su tiempo para recorrer cada centímetro de sus bocas.
Seung estiró sus manos y las apoyó sobre la cintura de Ji, lo acarició como se toca la seda.

- Hyung... estoy seguro de amarte – dijo agitado sobre la piel del cuello del mayor – Y también estoy seguro de... unirme contigo.

- ¿Unirme conmigo? ¿Quieres casarte? – preguntó con inocencia causando una carcajada del menor.

- No, tonto hyung. Quiero... hacer el amor contigo. – el otro abrió los ojos desmesurado. Le había asustado su propuesta.

*END FLASH BACK*

No siento más mi cuerpo. Estoy sucumbido en una intensa crisis nerviosa. El único que puede salvarme de este laberinto es Seung Hyun.

**

- Todo está hermoso y perfecto – expresó mirando el salón mientras sus manos estaban sostenidas. Era como una fiesta para príncipes.

- Mi suegrita adorada se encargará de todo lo que falta. – dijo con una radiante sonrisa.

- Moeka ¿mi madre ya llegó? – preguntó mirando a los ojos enamorados de la modelo japonesa. Ella asintió.

- También está tu padre

- Estoy tan feliz que mis padres estén juntos. Hoy será un gran día – abrazó a su novia y la llenó de besos en el cuello. Ella correspondió el abrazo. Disfrutó de las caricias.

- Es hermoso – cayeron plumas blancas del techo.

Levantó la cabeza. Ambos miraban sonriendo hacia arriba. Con sus cuerpos pegados se tomaron de las manos y lo estiraron a los lados, practicando como harían cuando el matrimonio fuera concretado.

- Solo faltan unas horas y serás mío para siempre – ella dijo.

- Soy tuyo desde hace cinco años, mi linda enfermera – rio.

- Pero... ya quiero presumirlo. Nadie te podrá alejar de mí.

- Cuando eres posesiva. Me asustas – bromeó.

- ¡Señorita Moeka! – escucharon el grito de la asistente de la modelo japonesa.

- Ya vengo.

- Nos vemos en unas horas – dijo y le dio un beso fugaz.

- Ponte más bella. Te quiero

- ¡Yo te amo! – gritó mientras corría. Él sonrió.

En el centro del salón, observó dándose una vuelta en el mismo lugar.

Dae Sung estaba a un lado supervisando que todo esté a la perfección. Su hermana Hye Yoon al otro extremo, haciendo lo mismo dándole el toque femenino. Su sobrino Yeon Jun jugando con las rosas blancas.

Todo era extraordinariamente perfecto.

Con sus pasos de modelo salió del salón a seguir insistiendo para una oportunidad en el trabajo. Él se sentía muy augusto trabajando para "YG", además que ganaba súper bien.

- Si tengo que estar de zalamero con el nuevo diseñador. Así sea de difícil carácter lo haré. Fighting, Seung!! You can, baby!!

- ¿Dónde se habrá metido? – Taeyang desesperado se despeinaba. Era la evaluación para los modelos y su amigo había desaparecido como por arte de magia.

- Iré a buscarlo – Ri dijo a su novio y salió a buscar a su hyung favorito.

- ¡Búsquenlo! – gritó el encargado del evento. No sonaba enojado, pero sí preocupado. Todos sabían que el diseñador no estaba acostumbrado a Corea.

- Min Ho – tomó la mano de uno de sus compañeros de pasarela – ¿Qué sucedió?

- El nuevo diseñador está retrasado. Hace más de media hora tenía que estar aquí y no aparece. ¡Todos están preocupados! Él es una persona puntual, nunca... ¡TOP! ¡¿Dónde vas?!

Mientras caminaba, su cerebro pensaba en opciones.
- Los baños. Es al primer lugar que iría si me sintiera mal – corrió a los baños principales.

"Nada"

Primer servicio. Descartado. Segundo servicio. Descartado. Tercer servicio.

La última puerta y opción se encontraba a dos pasos de él. Abrió lentamente y se topó con GD en el suelo.

- Oh, my god!! – actuó de inmediato.

Tomó el cuerpo del menor en sus brazos y lo subió al lavamanos. Apoyó el cuerpo de Ji en un solo brazo, su mano libre abrió el grifo y lo mojó. Su mano húmeda paso por el rostro ajeno. No tenía fiebre. No se veía pálido. Así que era un desmayo sin importancia.

- G-DRAGON – sonrió mientras seguía mojándolo – Soy tan mal empleado que no sé cuál es su nombre real. Lo siento.

- Hmm... – se removió adolorido.

- Tranquilo – susurró.

Ji abrió los ojos de inmediato al escuchar su voz, se encontró con una amable sonrisa.

- ¿Mejor? – preguntó – ¿Quieres ir a enfermería? En este hotel, hay un excelente doctor.

- Estoy bien – musitó.

"Sus brazos siguen siendo cómodos"

- Me alegra. ¿Puede sentarse? – asintió y el modelo lo ayudó a sentarse en el lavamanos. Frotó sus ojos bajo la atenta mirada del otro.

- Me están esperando – bajó preocupado.

- Espere – capturó su mano de inmediato – Séquese el rostro. – jaló unos paños del contenedor – No creo que quiera presentarse así.

- ¿Cuánto tiempo has vivido en Japón? – preguntó sin tomar lo que le estaba entregando.

- Se nota en mi acento ¿verdad? – lo soltó para rascar su cabeza, avergonzado. Ji ante el vacío de su corazón, asintió – Desde niño.

"¡Es mentira! ¡¿Quién te mintió?! Tú de niño vivías a mi lado."

- Oh – tomó los paños y secó su rostro. Lo echó al tacho – Si quieres que te vuelva a contratar, asiste a la re-elección – el otro asintió contento y salió corriendo para prepararse.

- No sientes nada cuando me tocas. – afirmó, lastimándose.
Necesitaba una explicación. Llamó a su amigo después de revisar el historial de llamadas y aviso que en media hora estaba para la evaluación.

Fue al mismo salón dónde vio a Dae Sung, lo buscó con la mirada hasta que le encontró y se puso delante de él.

- ¿Por qué Seung Hyun no me recuerda? – preguntó ansioso. El otro lo ignoró y siguió caminando, pero no lo dejaría en paz hasta que respondiera – ¿Por qué cree que vivió en Japón? ¿Por qué le han mentido? ¡DAE SUNG! ¡NO ME HAGAS ESTO! – giró y lo encaró fastidiado.

- Desde el día en que dejaste a Seung Hyun esperando todo el día bajo esa intensa lluvia. Perdiste los derechos sobre él. No eres más su amigo. Eres un cero a la izquierda en su vida.

- No lo abandoné, fue culpa de mi mamá...

- Me vale un cuerno lo que hizo tu madre. Por más que sigas hostigándome, no te diré nada. No vuelvas a acercarte a mí. Aléjate de Seung, no vuelvas a re-contratarlo... y déjalo en paz. Hoy se casa y no quiero que nada lo perturbe – concluyó y lo dejo solo y destrozado.

"¿Casarse? Esto es una pesadilla... ¿Cuántas puñaladas más recibiré hoy?"

**

La re-evaluación de los modelos comenzó.

Los jurados eran Seungri, Taeyang y GD en medio de ambos. Observaron minuciosamente a cada modelo, su porte para caminar, la elegancia para presumir la prenda. La belleza y la talla estaban ubicados en segundo plano.

Soo Joo, fue elegida como la modelo protagonista. Quien había hecho la elección de modelos había realizado un gran trabajo los modelos eran perfectos para la campaña otoño-invierno del gran G-DRAGON.

El turno de los varones. Seung fue el primer en deslumbrar la pasarela. El diseñador a través de sus lentes oscuros veía lo perfecto que seguía siendo él. Sus amigos se dieron cuenta de su nerviosismo, dedujeron así que ese modelo era el dueño de todos sus sueños.

Después de una hora de desfile. Escogieron a TOP como el modelo protagonista. Todos se despidieron con una reverencia.

El diseñador se retiró al lado de sus amigos.

- Sunbae-nim – él volteó y fingió una sonrisa – Gracias

- Eres un modelo espectacular, no tienes que agradecer – dijo volteó para marcharse.

- Sunbae – se quedó quieto – En unas horas me caso. Me gustaría que asistiera – se situó delante del pelirrojo y le extendió una invitación. Lo tomó y el otro desapareció.

Entró a su suite detrás lo seguían sus amigos. Lanzó la invitación. Aventó un par de cosas y se arrodilló al suelo para llorar.

- ¿Por qué no te recuerda? – el moreno preguntó.

- Tanto has cambiado que no te recuerda – secundo el novio.

- No es eso – sollozó – A Seung Hyun hyung... algo le sucedió. Estoy seguro. Quien podía explicarme todo, no quiere saber de mí... ¡¡Y PARA COLMO!! ¡¡SE VA A CASAR!! ¡¡ODIO A MI MADRE!! ¡¡LA ODIO!! ¡¡ODIO SIN CONOCER A LA BASTARDA QUE SE CASARÁ CON MI HYUNG!! ¡¡LO ODIO A ÉL, CABEZA DE CHORLITO!! ¡¿CÓMO PUDO OLVIDARME?! ¡¡ME ODIO!!

- No te desesperes. Solo hay que hacer que su memoria regrese – su mejor amigo dio la primera idea. – Ayudará fotos o algún regalo que te haya dado.

- No tengo nada... absolutamente nada... que pueda usar para que me recuerde. Mi madre destruyó todo. – sollozó en un grito.

- Tendrás que comenzar de cero.

- No. Aún nos queda su amor – dijo el menor de todos – Si algún día te amo de verdad. Te amará por siempre. Ese amor debe estar escondido en un lugar profundo de su corazón. Solo tienes que sacarlo a la luz. Tienes que reconquistarlo, hyung.

- No puedo. Se va a casar.

- Un matrimonio no impide nada. Además, me enteré que hoy solo será un matrimonio simbólico porque el registro del mismo será dentro de unas semanas. Tienes tiempo de sobra.

- No puedo – dijo por vencido – Quiero regresar a París.

- No te des por vencido. Te ayudaré a saber la verdad. Me dirás quien es ese asqueroso bastardo que no quiere decirte la verdad. Sé un método como conseguir lo que quiero. En menos de lo que piensas sabremos que le pasó a Seung Hyun

- Ri, no juegues con fuego.

- Amor, soy inmune al fuego. – guiñó el ojo. Su novio suspiró con gracia.

- Vamos G-hyung. Así se casen, el divorcio está de moda. - puso una mano en el hombre de su hyung - Te ayudaremos.

- ¿Cómo comienzo? – preguntó frustrado. No estaba seguro de seguir con el plan de su pequeño amigo.

- Ponte más bello. Hoy tenemos boda. Alcohol y comida gratis.

**

La hora del extremo dolor abordó.

Seung estaba en el altar esperando a la novia. Con su traje de alta costura, Chanel, ceñido a su escultural cuerpo. Color negro. Su cabello bien peinado hacia arriba recortado a los lados y ahora castaño. Maquillaje suave. Una sonrisa en los labios. Nadie podía quitarle la mirada.

Al otro extremo, Ji no podía dejar de llorar a través de sus lentes oscuros.

"Tapo mis ojos para que no duela más. Así no te veré sonriéndole y dándole el sí a otra persona."

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Gracias por leer ^-*