Cambios (Maluma & Tu) *Terminada*

Capítulo #53: "Un día más de vida"

  Un mes después...

Abrí la puerta lentamente, con la cabeza latiéndome a mil por segundo. La imaginaria, herida en mi pecho parecía abrirse más con cada paso que daba dentro del apartamento. 

Su aroma no tardo en llegarme, "menta y canela", pensé, cerrando los ojos para evitar volver a llorar. Su aroma era lo más cercano a el que obtuve en una semana. Ciento sesenta y ocho horas exactas en el hospital, tirada en un frió y sucio rincón frente a la sala de terapia intensiva. Los médicos dijeron que existían la misma cantidad de posibilidades que despierte, como que muera. Que tan solo debíamos esperar, esperar y esperar. Acompañarlo desde donde estábamos e intentar pensar positivamente, rezar y tener fe en Dios.

"Fe...", repetí en mi cabeza, dando otro paso más dentro del apartamento. La fe y el amor eran lo único que aun guardaba en mi corazón.

Logre mantenerme de pie y caminar hasta llegar a la sala de estar, donde me tire sobre el sofá y abrace mis piernas, haciéndome un ovillo con las mantas. No quería dormir, no quería meterme en las pesadillas donde él se despide una y otra vez, donde me susurra que me amara para siempre y luego se marcha. Ya no tenía fuerzas para mantenerme viva y no sabía cuánto tiempo mas resistiría, hasta cuando mi corazón soportaría estar sin él. Y yo tampoco sabía cuánto tiempo más soportaría el dolor y la angustia que habían tomado lugar en mi mente. 

Me di por vencida y cerré los ojos, dejando que las pesadillas me invadan la mente.

-No sé cuánto tiempo más podrá estar así...- Hablo una voz que conocía pero mi mente giraba y giraba y me resultaba imposible lograr identificarlo- Ya ha pasado un mes... Y ella sigue sin avanzar, solo come lo poco que su cuerpo acepta y duerme; y si gritar y llorar se considera dormir.

-Jamás imagine que reaccionaria así... parecía tan fuerte por fuerte- Contesto una voz femenina que también conocía- Pero no podemos hacer mas... hasta que el no despierte, ella no saldrá de su pozo oscuro.

-Temo por ella- Admitió el muchacho- Temo que jamás logre salir de su oscuridad y que esos bellos ojos no vuelvan a brillar... La aprecio mucho, ¿sabes? y verla así me parte el alma.

-Pero logra salir, ya verás...- Dijo la muchacha consolándolo, llegue a oír como sus manos palmeaban las espalda del triste muchacho- Debes tener fe, Dios ya actuara y arreglara todo esto.

Aun no había abierto los ojos y dado lo último que había escuchado, ya no tenía intenciones de hacerlo. Había identificado dos voces; Tania y Arthur y pude captar perfectamente como lloriqueaban en voz baja. 

¿Verdaderamente ya ha sucedido un mes?, me pregunte.

El tiempo parecía volar cada vez que cerraba mis ojos y me sumergía en mis oscuras pesadillas. Me lleve las manos al cuello en busca del colgante, de su colgante, lo tome con fuerza en mi puño y apreté aun mas mis ojos.

"Llévame, Dios" Rogué mentalmente "Llévame a mí y deja a el libre... El no se lo merece, no se merece nada de lo que está sufriendo. Es un gran chico y tú lo sabes perfectamente. Sabes que ha sido un muchacho casi perfecto y que jamás ha daño a nadie... Por favor te suplico que me lleves a mí, yo lo merezco, el no. Por favor... Dios... Llévame" Casi susurre. Las lágrimas volvieron a caer por mis ojos, rodando por mis mejillas hasta llegar a mis labios. Dejando una marca a su paso, una marcas más para el montón.

tres meses después...

Abro los ojos lentamente, adaptándome a la poca luz que entra por los grandes ventanales del living. Por los cálidos rayos de sol deben ser las primeras horas de la mañana. Poco a poco, me quito las grandes mantas que me cubren y logro sentarme en el sofá. Me llevo ambas manos a la cabeza e intento acordarme de lo sucedido pero mi mente está en blanco. Miro por las ventana y veo como las hojas de los arboles ya están en tono marrón, secándose. Lo que me dice que estamos en... Otoño.