Capítulo 3. ¿Iremos al baile?

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—¡Maddy! ¡Espera! — Escuché que gritó una voz masculina detrás de mí. —Caminas muy rápido.

Al voltearme vi a Tom correr hacia mí con su mochila colgando de un hombro, llevaba unos jeans algo grandes un poco rasgados de las rodillas, unos sneakers blancos con rayas rojas, una camisa blanca sencilla y encima una chamarra negra con rojo, y el cabello en una pequeña coletita muy graciosa. Se veía demasiado cool.

Yo llevaba unos jeans rectos, una blusa sencilla azul, una sudadera gris encima, unos flats azul marino, el cabello en una coleta de caballo sencilla y nada de maquillaje. Era demasiado temprano para maquilarme. Aunque después de llevar dos meses en clases ya debía haberme acostumbrado a despertarme temprano para ir a la escuela, aun no lo hacía. ¡Eran las 7 AM por dios!

—Hola Tom, no te escuché, ¿qué pasa? —Dije saludándolo de beso en la mejilla antes de entrar a nuestra primera clase del día. 

—Nada nuevo, ¿terminaste la tarea de cultura mediá...

—¡Hola Tom! — Lo interrumpió una chica alta, rubia y de hipnotizantes ojos azules. Si, la más popular de la facultad, ¿cliché? ¿Coincidencia? Llámenlo como quieran, yo la llamo, estereotipo de universitaria rica que aprueba solo con cojerse a los maestros.

—Hola Mackenzie ¿Cómo estás? —Tom era gracioso cuando estaba con Mackenzie, se veía incómodo.

—De maravilla, quería preguntarte si te postularás para rey de la facultad.

En la facultad cada año varios estudiantes, por lo general los "populares", se postulan para ser reyes de la facultad, algo como los bailes de graduación sólo que aquí es a mitad del semestre.

—No lo había pensado, para ser honesto no es algo que me llame mucho la atención, ¿tú qué opinas Maddy? —Volteo a verme mientras yo estaba distraída respondiendo un mensaje a Bill en el celular.

—Supongo que no sería mala idea, eres guapo y alto, eso bastará para que ganes, la mayoría de las chicas del salón se mueren por estar contigo o ser tus reinas ¿no es así Mackenzie? —Volteé a verla con un poco de diversión.

—Eso creo, bueno, si sería bueno que ganáramos tú y yo, el premio este año será un viaje de dos días a la playa para los reyes de la facultad. —Dijo con la cara más sexosa que jamás vi.

—Lo pensaré— dijo Tom terminando la plática con Mackenzie y jalándome con él hacia una mesa aparte y lejos de Mackenzie o "Mack" como la llamaban sus amigas.

Ya sentados muy aparte de los demás Tom me dijo:

—La próxima vez que veas que esa chica se me acerca así, inventa algo y rescátame de su presencia, por favor.

—Sí claro, como si no te gustara la atención que recibes de las chicas del salón, en especial Mack. —Le dije sacando la libreta de la tarea que sabía que me pediría.

—No son mi tipo, detesto a las chicas tan ofrecidas, en su momento me encantaron las chicas fáciles pero eso ya es pasado, aún me duele un poco mi ex relación ¿sabes? — Me dijo haciendo un puchero mientras ponía una mano en su pecho haciendo la dramatización. —En fin, ¿serías tan amable de pasarme la tarea de Cultura mediática?

Le entregué la libreta con cara de burla

—Deberías empezar a hacer tus tareas, un día me hartaré de pasártelas.

—Pero mientras ese día llega, aprovecharé que eres un amor de cuñada, así que, ¡gracias! — Su comentario me hizo rodar los ojos pero me reí de todas maneras. Era un idiota, pero era divertido.

Mi Príncipe. Bill Kaulitz. NovelaWhere stories live. Discover now