Distancia

Capitulo 14

No creía lo que mi padre acababa de decir, mi mundo se iba derrumbando de a pasito. En ese instante, como si fuese apropósito, llegó Nick que al vernos la cara a los dos solo se quedo en cuclillas junto a mi.
-Lo siento, pensé que nunca iba a decir esto. Se me parte el corazón.-
-Interrumpo algo?- preguntó Nick casi en silencio.
-Resulta que mi padre no es mi padre. No lo se, ya no entiendo nada- dije casi gritando al mismo tiempo que me largaba a llorar.
-Zoe... Tu siempre seras mi hija dentro de mi corazón. Todo paso de repente, tu mamá ya casi no pasaba tiempo en casa y la veía rara hasta que no pudo ocultarlo mas y su barriga fue creciendo... -las lagrimas inundaron no solo los ojos de mi papá si no también su corazón - al verla me puse feliz creyendo que ese niño o niña era mio pero su respuesta no fue lo que esperaba. Tu madre se largo a llorar diciéndome que solo había sido una aventura, que en realidad habían sido meses.-
-Y que hiciste?-
-Lo que todo hombre... No dije nada y te adopté dentro de mi corazón.-
-No entiendo porque ella te amenazaba- dije con la voz casi quebrada
-Zoe... Yo no quería que te enteraras que no eras mi hija, no es de egoísta pero tenia miedo que no me quisieras mas y cuando la vi con su amante -papá callo por unos segundos, tomó aire y siguió -quise terminar con ella y me dijo que si yo la echaba de casa se iba a ir con vos y que no te vería nunca mas- terminó con la mirada hacia el suelo.
Se lo mucho que le dolían estos recuerdos y se lo mucho que me ama. En realidad yo siempre había tenido mejor relación con papá y mi madre siempre había estado celosa de nuestra relación.
-Claro... Ella sin vos no tendría nada. Todo el dinero es tuyo. No me quiere a mi, quiere a tu dinero.- que maldita, pensé. -No quiero verla nunca mas- grité con todas mis fuerzas y salí corriendo de ese maldito lugar.
Al salir de la clínica pude visualizar el auto de Nick, me subí y lo primero que vi fueron sus cigarrillos. Él fumaba muy poco pero siempre por alguna razón, es decir, si estaba cansado; enojado y todo tipo de sentimiento que lo agobiara. Siempre decía que un cigarro le calmaba y, aunque no le solucionara ningún problema, él creía que si, que al menos por un momento podía estar tranquilo sin problemas. Sin saber como hacerlo, porque nunca había probado uno en mi vida, lo tome entre mis dedos y lo encendí. Al principio me ahogué, luego sentí como si me quemara la garganta hasta que me relajé, cerré los ojos y creí estar en las nubes o en algún lugar tan tranquilo como el cielo, y sentí que estaba sola, que debía tranquilizarme y todo en algún momento iba a estar bien.
-Zoe! Que estas haciendo?!- me gritó Nick al mismo tiempo que me sacaba el cigarrillo de las manos -Esto te va a hacer mal!-

-Hago lo mismo que vos, que tiene de malo?-

-Tiene todo de malo, Zoe, no hace falta que te lo explique.-

Sin soltar por un segundo el cigarrillo le conté como me sentí al inhalar aquello que mi cuerpo sintió extraño. Intenté explicarle lo agobiada que me sentía en ese momento y todas las cosas que pasaban por mi cabeza.

-Sé que todo lo que pueda decirte no va a solucionar nada, pero acá estoy mi amor para lo que quieras-

-Vallamos a casa por favor, saluda a mi padre de mi parte y dile que mañana sera otro día, él lo entenderá-

En cada momento o situación en la que me sintiera triste o estuviera llorando, mi papá me abrazaba fuerte y me decía que mañana seria un nuevo y gran día.