Capitulo 20

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Catorce meses internada, mi madre a esa edad, ya no tenia ganas de seguir... Pero hubo una doctora, y solo una, que no perdió las esperanzas en ella, Carola. Actualmente mi abuela del alma y de la vida, sin hijos y viuda de muy joven, vio en mi madre una necesidad de familia y cariño, tuvo una relación mas allá de doctor-paciente. Logro que mi mamá se recupere física y mentalmente, la alejaron de su padre, y éste fue preso con una pena de varios años, dos años antes de que ésta terminara murió de un paro cardiorrespiratorio. Lo que llevo a la total tranquilidad de mi abuela y mi madre.  Respecto a su tio, Eduardo, luego de que mi madre logró hablar y confesar, se pudrió en la cárcel junto con su hermano.
Hoy en día tengo contacto con mi nana, Carola.
Mi Abuela murió cuando mi mama tenia unos diecisiete o dieciocho años, la causa de su muerte fue él cáncer. Maldita enfermedad que la fue consumiendo de a poco, mi madre sufrió y lloró tanto... Pero nada la iba a volver a la vida y con la ayuda de Carola junto fuerzas y siguió adelante. Y yo creo que un poco de eso se trata la vida, caerse, aprender y levantarse.
Hoy estaba leyendo uno de mis libros favoritos y encontré una frase que me dio vuelta la cabeza, es de Nelson Mandela y dice así:
"Al salir por la puerta hacia mi libertad supe que, si no dejaba atrás toda la ira, él odio y él resentimiento, seguiría siendo un prisionero."
Y lo que entendí fue que valla a donde valla esta historia me va a seguir, no me va a dejar en paz. Tomar la mejor decisión y así liberarme para siempre, no estoy hablando de perdonar a mi madre y listo, sino de darle la oportunidad para que me demuestre cuan arrepentida esta, y por sobre todo, que no va a mentir más. Permitirme estar bien, en equilibrio y paz interior. Saber perdonar, borrar rencores y seguir...

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