Mi corazon te pertenece

Capitulo 12

Capitulo 12

Pov Karina

Dos días habían pasado y mi hija no había despertado.  Los médicos decían que estaba bien que solo descansaba debido a toda la sangre que perdio.   Todavía me siento furiosa y dolida, todavía se me aceleraba mis pulsaciones cuando recordaba lo que ese desgraciado le hizo a mi bebe.   Yo se lo que se sentía que alguien intentará abusar de ti, pero que me abusaran no.  Michael intento decirmelo de la mejor manera,  pero no funciono.

FLASHBACK

-Kari necesito hablar contigo - dijo después de casi dos horas de avisarme con Pablo que vendría dentro de una hora. 

Se veía que  se había duchado, tenía unos jeans negros y una camisa de manga larga violeta dejando ver sus marcados músculos.

  -¿Qué paso amor?- pregunte cuando habíamos llegado a las afueras del hospital.  Me tomó ambas manos y vi en sus ojos el dolor que sentía. 

  -Ya sé el motivo de lo que acabo de hacer Layla.  Necesito que estes tranquila porque nuestra hija va a necesitar ayuda - dijo apretando su mandíbula, mientras se tensaba.

  -Mi amor me estás asustando, dímelo ya - dije apretandole la mano para que tomara confiesa y comenzara a hablar.  Él solto un suspiro y las lágrimas salieron de sus ojos. 

  -Mi tío... abuso de la nena - dijo con la voz quebrada y yo sentí que me dio un mareo.

Michael me agarro antes que cayera al suelo.  Sentía que mi cuerpo quemaba y me sentía horrible. 

  -NO, ES UN MALDITO, PERO LO QUIERO TRAS LAS REJAS. MI HIJA POR DIOS.  ELLA SUFRIENDO SIN YO PODER AYUDARLA - Michael no dejo de abrazarme en ningún momento mientras yo lloraba a todo pulmón.

  -shhh, ya yo me encargue de eso.  Ahora tenemos que estar bien por ella - dijo acariciando mi pelo y dandome un beso en la cabeza.  

Hace semanas extrañaba aunque una simple muestra de cariño y hoy me la estaba dando, pero en una situación que no quería. 

FIN DE FLASHBACK

No había ido a trabajar estos días por estar cerca de Layla.  Geraldo por poco se muere cuando me llamo de Madrid para darme detalles de los contratos.  Estuvo maldiciendo un buen rato hasta que lo escuché quebrarse en llanto.  Mi mamá estuvo aquí un buen rato, pero se fue porque iba a cuidar a Keila, hija de Geraldo y Mikaela.

Michael tampoco a ido al trabajo y no quiere separse de su hija, solo en las noches se ha tenido que ir porque solo permiten una persona que se quede con el paciente.  Mientras que Daniela y Carla se han tenido que ir al colegio obligadas por su padre.   Además de darle un sermón sobre tener cuidado con los hombres, se veía tan tierno haciéndolo.  

Ahora estaba en la habitación mirando el rostro pálido de Layla, mientras que Michael fue por unos cafés.  Cuando vi que movió su cabeza y comenzo a abrir los ojos.  No pude evitar sonreír, estaba tan ansiosa por verla abrir sus ojos que mi corazón no cabía de la felicidad.

  -Mi amor que bueno que despertaste - dije en un hilo de voz abrazandola.

  -¿Por qué me trajeron al hospital? - pregunto sin mirarme, sus ojos solo miraban el blanco techo.

  -¿Cómo que, Por qué? Teníamos que traerte o podías morirte. Hemos estado muy preocupados por ti, Layla  - dije desconcertada por su pregunta.   Ella no quería vivir.

  -Ese era el plan y lo echaron todo a perder.  Yo no quería que me salvaran - volvió a decir entre dientes, girando la cabeza mirando a la pared.