Capitulo 36

915 83 8
                                    

Se tiro en la cama y lloro, lloro hasta no poder mas, nadie podía calmarla y quería estar sola.

Varias llamadas de Mariano la obligaron a apagar el celular para que nadie la moleste.

Al estar sola y en esas condiciones, podría agarrarle un ataque de pánico, pero ni eso le importo, nada le importaba en estos momento.

En su cabeza solo habitaba aquel hombre que la lastimo profundamente, no podía sacarla de su mente, y al parecer ni de su corazón. Aunque le haya hecho tanto daño, parece que Juan Pedro Lanzani no se iba a ir por mucho tiempo.

Se preguntaba miles y miles de veces porque mierda volvió en el momento mas feliz de su vida, pero no pudo encontrar respuesta.

El teléfono de su casa suena y no le queda otra que atender.

-Hola.

-Lali, estoy abajo, abrime.- la voz de Mariano se escuchaba del otro lado.

-Ahí voy.- solo le sale decir a ella, después de cortar. 

Baja de su departamento y se dio cuenta que ya era de noche y que a pesar de que hoy la lluvia había parado, volvió otra vez.

-Donde estuviste todo el día? Te busque en la productora, en la empresa, pero no estabas por ningún lado.- le pregunta Mariano, cuando ya estaban adentro.

-Ya dije que a la empresa no voy a volver por un tiempo.- dice ella, sentándose en el sofá, frustrada del cuestionario de Mariano, si no paraba de hacerle preguntas en cualquier momento iba a explotar.

-Donde estabas? Porque ni las llamadas me atendías.- le vuelve a preguntar, sentándose a su lado.

-Estuve acá todo el día mi amor, apague mi celular, quise desconectarme un rato.- la paciencia era una virtud en esos momentos.

Mariano la toma de la cara, mirándola profundamente a sus ojos y los noto tristes, noto que había estado llorando. La morocha desvía sus ojos de los de su novio, no quería que se de cuenta de lo que estaba pasando.

-Estuviste llorando La...- le dice el, era inútil negarselo, se dijo ella por dentro.

Las ganas de romper en llanto eran mas grandes que la herida que le había dejado Peter, aprieta sus labios fuertemente, aguantándose, mientras apoyaba su frente en el hombro de Mariano. Finalmente rompe en llanto, otra vez.

-Mi amor, mi amor.- dice el preocupado, abrazándola y tratando de contenerla.

-El volvió...- le confiesa Mariana, después de un rato, entre sollozos.

-Quien, quien volvió?- le pregunta confundido.

-Peter...- le dice ella y se abraza mas a el.- Peter volvió.

Y de nuevo? Si, de nuevo aparece el miedo por parte de Mariano, otra vez tiene miedo a perderla.

Se terminaaaa gente, se terminaaaaa!! Gracias por los votos y comentarios, me hizo y me hace muy feliz hacer esta novela.


Aprender a amarWhere stories live. Discover now