Tonto.

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Y entonces cayo en cuenta de que lo habia perdido, pero aun no lo admitia, aun no aceptaba que estuviera con otra persona, que alguien mas lo viese dormir, que alguien mas lo tomara de la mano, que alguien mas besara lo labios que alguna vez reclamo como suyos.

Habia sido su culpa, lo sabia y se maldecia por eso, si tan solo no hubiese sido tan tonto, tan ciego, si tan solo lo hubiese pensado dos veces antes de poder llegarle a ser infiel, quizas no estaria asi ahora, solo y con una bolleta de Wisky en la mano derecha. Mirando los albumnes con fotos de los dos, albumnes que ya estaban desgastado, fotos que alguna vez expresaron lo felices que eran.

Si tan solo no hubiese sido tan tonto.

Ya no pasaba una solo noche con que no lo llamara, llamadas anonimas, porque al oir la voz de otro, simplemente se quedaba en blanco y rompia a llorar.

Se sentia solo, inutil, lo extrañaba, demasiado, pero le habia echo mucho daño. Le habia dejado heridas que con ayuda de otra persona ya empezaban a cicatrizar.

Bebia dia y noche, brindando una y otra vez a la salud del amado que ya no podia tener en brazos.

Lloraba una y otra vez, suplicando entre sollozos que volviera a el.

Ya no comia, ya no dormia. Ya nada valia la pena para el, lo unico que le quedaban eran bonitos recuerdos y una botella de Wisky que le hacia compañia.

Si tan solo no hubiese sido tan tonto.

Mas le dolio el enterarse de que él se iba a casar, pero mas grande fue su desdicha al caer en cuenta de que no iba a ser con el.

Le dolia imaginar que otra persona lo tomara de las manos en el altar, le dolia imaginar que tendria un bello hogar y que probablemente adoptarian hijos y que su unico proposito de ahora en adelante era cuidar el uno del otro.

Hasta que la muerte los separase.

Llego a la iglesia, con un mejor porte, ignorando el consejo que le habia dado Natasha.

-Si vas, lo unico que conseguiras es hacerte mas daño.-

Ya nada la importaba, simplemente lo queria ver por ultima vez, no se acerco a nadie, simplemente se paro en un pequeño rincon.

No habia sido invitado, pero su unico proposito era ver lo feliz que era su amado, aunque fuese en brazos de otro hombre.

Un gran nudo se le hizo en la garganta, al ver lo hermoso y despampanante que habia llegado, vestia un hermoso traje de gala blanco y llevaba una preciosa rosa roja en la mano derecha.

Irradiaba felicidad, no lo podia negar, se notaba que habia una fuerte conexion entre los dos, estaba claro que se amaban y eso fue lo que mas le dolio.

En el altar se encontraba Tony, quien tambien parecia estar muy feliz. No lo odiaba, para nada, al contrario, le agradecia la ayuda que le habia brindado a su amado, le agradecia ser el hombre que el nunca pudo ser.

Y si Steve era feliz con él, no le quedaba de otra que compartir su felicidad, apesar de que le doliera como los mil demonios, apesar de seguir lamentandose, apesar de todo.

Pero lo que mas le dolia era saber que el pudo haber ocupado el puesto de Tony...

¡Si tan solo no hubiese sido tan tonto!

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Me dolio escribir esto v':

Para quienes siguen mis otras historia, pedirles perdon por no actualizar ¡Oh no, Bucky! Pero es que estado un poco ocupada ;u; estare actualizandola el martes o si puedo el lunes :3

Nos leemos luego ^^

-Miku.

One-Shots.-. [Stucky]Where stories live. Discover now