24†

221 12 0
                                    

Capítulo 24: Chau perra

Me desperté en un hospital, recordaba perfectamente lo que había pasado, sabía por qué estaba conectada a una máquina para poder respirar y hasta comer.
Había llegado al borde de la muerte y la quise tocar, pero una persona no me dejó.

Estaba con un vestido blanco de verano manchado de sangre caminaba por un largo pasillo buscando una salida. Las ventanas eran de vidrio, podía ver todo Malibú desde aquí ¿Como termine encerrada aquí?

¿Mori?

- Aasiyah, estás en el límite. Bienvenido a los perdidos- me saludó.

La chica era un ángel literalmente, tenía alas de color marfil. Su cabello era rizado y naranja como el de Mérida, sus ojos eran de un Verde esmeralda intenso. Era bella, pero era un niña

-¿Como sabes mi nombre? ¿Quien eres? ¿Que es esto?- pregunte asustada

-Hay mi Gala, una pregunta a la vez niña- río - Aasiyah, conocí a tu madre cuándo éramos pequeñas. Bueno, hasta que morí. Me asesinaron a los catorce años. Tu madre además de una exelente amiga y persona fue mi niñera. Siempre estuvo para mí.
Este es el mundo del medio, Bienvenido a los perdidos. Somos las almas que deambulan entre el cielo y la tierra por diferentes motivos. Sólo sé que este no es tu momento querida, te falta mucho para morir , antes deberás resolver muchas cosas mi niña. Tendrás que averiguar sobre tus padres, tendrás que buscarlos , yo te acompañare en todo momento. Tenes que aprender a perdonar y a sanar de lo contrario vas a terminar dañando a todos.

-Es difícil perdonar cuándo no sabes nada de tí, de donde sacaste el color de tus ojos o tu piel blanca. No saber en dónde naciste y cuándo. No saber quiénes y por que te abandonaron. No se nada de mí, eso no lo puedo perdonar. ¿Como perdono al que fue mi mejor amigo y primer amor , si me lastimó mucho?, ¿Como se hace eso?- comencé a llorar

-Debes mirar al fondo de tu corazón, sentir con el corazón. Mirar a un futuro, Dios tiene otros planes para ti-

-¡Se nos va!- grita una mujer- Resiste cariño, yo se que puedes. Quédate con nosotros.. Despejen 1...2...3-

-¿Que es éso?- pregunté asustada

-Tu cuerpo está dejando de luchar, si dejas de luchar morirás

-Pero... Me faltan muchas cosas por hacer-

-Pense que querías morir

-Si quiero, pero no quiero que mi cuerpo siga sufriendo

-Entonces vete- me empujó

Se abrió como una puerta, y caí al vacío o eso creí

Cuando abrí los ojos, ya estaba aquí. Era odioso no haber muerto y tener que soportar todo el dolor físico y sentimental.

Los primeros dos días no podía abrir bien los ojos, apenas podía parpadear. Ya para el cuarto día podia abrir los ojos, y empezaba a respirar mejor, aunque seguía necesitando la máscara del oxígeno ya que los pulmones me dolían como el infierno.

Los doctores me dieron 1 mes de descanso. Un mes, un puto mes, me atrasare con todo.

Lo bueno es que expulsaron a Emily por casi matarme, al parecer el Director estaba harto de sus problemas y que casi mate a una chica inofensiva fue el colmo. El director presentará cargos judiciales contra a ella por daños Psicológicos a otras chicas.

Ojalá esa perra tenga lo que se merezca.

-¿Como esta la princesa más linda?- pregunta Gus

-Perfecta,  estaba pensando en hacer acrobacia pero bueno tengo la espalda casi abierta , nada grave- lo veo rodar los ojos y sonrió

-Si sigues con esa actitud te haras vieja en seguida y no te daré tu regalo-

-Bueno, pero quiero mi regalo-

Sale por unos minutos y vuelve a entrar con un enorme peluche de chanchito.

-¡sii! - Chillo y lo abrazó

De repente la  vista se me nubla y se vuelve negro

-¡Mami! Ya es navidad- grita la niña encima de la cama de sus padres

-Aysi, calma- dice el hombre

-¡Pero papá la nieve esta casi adentro de la casa!-

El padre se levanta de la cama y a paso lento baja las escaleras de madera. Llega al salón y va a la puerta, efectivamente la nieve entra por la puerta del cachorro.

-¡Nos olvidamos de entrar al cachorro!- grita el padre

-Yo lo entre a noche, cielo.- dice la madre bajando con su abrigada bata

-¿Puedo ver mis regalos?- pide la nena

-Claro, cielo-

La niña comenzó a abrir la cantidad de regalos que había, pelotas , muñecas, ropa de todo un poco. Pero lo que a la niña más le gustó fue un peluche de un cerdito justo para el tamaño de ella

-¡Santa me trajo un cerdito!- decía mientras que lo abrazaba.

-¿Gala que fue eso?- preguntó Gus

-¿Gus vos conociste a mis padres?- pregunté luego de salir del transe del sueño

Su rostro cambió, se puso recto , serio y pálido. Algo sabía

Chica Universitaria [Completa]Where stories live. Discover now