Compasión

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Era tan tarde que ya casi seria temprano, la noche que cayó estaba por levantarse, pero aun en ese momento, él seguía despierto, en vigía, incapaz de escapar de su propia mente hacia el mundo de los sueños.

Sus pensamientos eran una combinación grotesca y espeluznante, predominaba el miedo y la incertidumbre,  pero otras emociones más oscuras también se encontraban vagando en esa laguna del desastre, desconfianza, odio, dolor, arrepentimiento, tristeza,  soledad, el despliegue era tal que yo misma me vi afectada, no lo supe al principio, pero cuando la primera lágrima se derramó por mi mejilla, me di cuenta, el sufrimiento era tan grande que podía contagiar a la propia muerte, cuyo trabajo gira en torno al dolor.

No era mi costumbre pero me acerque, él se giro y al verme no hubo miedo ni sorpresa, sufría tanto que no entraban en él más emociones, ¿que ocurre? Le pregunte, me miro y en sus ojos se reflejo algo,  apenas visible por un milisegundo,  lo suficiente como para verlo si prestabas suficiente atención, preguntaba si interés era sincero, así que asentí, y escuche.

Su vida mortal era común,  eventos buenos y eventos malos,  pero a medida que la iba relatando sin que lo dijera lo note, su destino era incierto, su corazón afligido exigía saber que pasaba y su mente confundida no hacia más que jugar en su contra,   la historia avanzaba y me sorprendí llorando a su lado,  era nuevo para mí, una empatia que jamás experimente antes, entonces terminó su relato, su vida, en resumen era un conjunto de momentos sin sentido  ni objetivo, él estaba agotado de la agonia producida por el miedo y la soledad, sabía con la certeza de alguien que ya ha sufrido más de lo debido, que nada iba a mejorar.

"¿Sabes a qué vine?", le pregunté, y asintió.

Vi en su mirada un "por favor" y por primera vez en mi existencia, por primera vez en ciento cuarenta y siete millones doscientos treinta y siete mil quinientas veinte ejecuciones, no baje mi Oz por obligación o por trabajo, si no por compasión.

Cartas a la LunaOnde histórias criam vida. Descubra agora