No te enamores

Capitulo 9

Algunas veces nuestros pensamientos llegan a superar la realidad pero en mi caso no, muchas veces pensé e imagine como sería hacer el amor con Lucas y mi imaginación no le hace justicia a lo que sucedió.

Fue un momento totalmente fantástico, pareciera como si nuestros cuerpos se conocieran, Lucas movió cada partícula de mi cuerpo, no cambiara nada de lo sucedido.

Cuando era adolescente, algunas de mis amigas decían sentirse en las nubes cuando daban su primer beso, espere demasiado para dar el mío y cuando eso sucedió fue una total decepción, para empezar me tomo tan fuerte de la nuca que casi se me cae la cabeza y a eso súmenle que me babeo más que un bebe. Pero hoy con Lucas, comprendí esa ridícula sensación de estar en las nubes.

― ¿Estás bien?― pregunta levantando mi rostro con su dedo.

― Más que bien― le digo dándole un beso.

― ¿En qué tanto piensas?

― En que jamás imagine terminar en la cama contigo― digo riendo.

― Si hubiéramos apostado, habría ganado.

― Pero no lo hicimos, por lo tanto no te debo nada.

― Me debes todos los besos que no me diste cuando eras una inmadura adolescente.

― Inmaduros tus calzones― digo golpeándolo con una almohada.

― Te arrepentirás― dice tomando mi cintura y colocándome debajo de él, y no tengo que ser adivina para saber lo que sucederá.

Una semana después de nuestro magnifico fin de semana, nos vamos de compras con Leslie, pues ya hace mucho que no compartimos, primero porque el tener un esposo demanda demasiado tiempo, segundo estamos en exámenes finales en la universidad y casi no dormimos de tanto estudiar y tercero, Leslie se ha enamorado, ¡Otra vez! Personalmente creo que en la vida nos enamoramos una sola vez, un solo amor, un solo corazón roto, pero mi querida Leslie no, ella es una romántica empedernida.

― ¿Y cómo es el?― le pregunto tomando una taza de chocolate.

― Genial, es todo...

― ¡Lo que siempre he querido!― termino la frase que ya me sé de memoria.

― Eres una bruja.

― ¿Por terminar la frase que dices cada vez que conoces a un chico nuevo?― no puedo más con la seriedad y río a carcajadas.

― Pero de verdad, este si es

― Veremos por cuanto tiempo, le doy dos meses de encanto.

― Te lo agradezco, pero te recuerdo que no todas tenemos la suerte de tener a un esposo, guapo, caballeroso y buen amante como tú.

― Pues que te diré, soy afortunada.

― Y dime, ¿ has pensado en tener un bebé?

― La verdad no, estamos en un buen momento, sabes la verdad nunca imagine casarme tan luego, pero creo que primero quiero disfrutar de un tiempo a solas con Lucas, conocernos, viajar, disfrutar, hacer cosas de pareja y luego tal vez en algunos años, pensaremos en tener un bebe, pero por el momento esa posibilidad está muy, pero muy lejos.

― ¿Le tienes miedo a la maternidad?― !No! Pienso, o tal vez ¿si?

― Soy maestra, obviamente me gustan los niños.

― No es lo mismo ver a uno cuantos niños unas horas, a tener un bebé todo el día.― punto para Leslie.

― Sabes que, ni siquiera se porque estamos hablando de esto...― no puedo terminar de hablar porque suena mi teléfono.