x. Dejarse llevar por l(a/o) corriente.

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Mira.
Aclaremos las cosas.

La cuestión no es perder el control.
Es dárselo a otro.

Cuando te conocí
me di cuenta
de la maravillosa idea que sería
regalártelo a ti.

El chico
que ama el amor
y la vida
y las aventuras
y el desastre la noche la fiesta y correr y saltar y vivir.

La maravillosa idea de darle el control
a alguien descontrolado.

El volante a alguien sin el carné
el avión a alguien con vértigo.

Mira,
lo declaro
(lo confieso
lo proclamo
lo escribo para dejarlo grabado)
de una puñetera vez:

Cariño,
ahora mismo
soy una hoja a la deriva.

Y no sé cuál es el viento que me empuja.

(Me dijiste que de pequeño creías
que podías luchar contra él,
pero yo no te dije
que hasta hace un par de días, también.)

Todo en lo que pensaba cuando respondí "nada".Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora