Capítulo 4: Los Åström

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Los turistas protagonistas de nuestra historia habían quedado impactados por la noticia, por poco iban a ser asesinados,las precauciones que habían decidido tomar no eran para nada paranoicas, se dieron cuenta de que no eran nada frente a la sombra de lo que estaban lidiando, no eran nada frente al dios de neón. En vez de ir a cualquier hotel o motel, prefirieron encontrar la forma de volver a Estados Unidos.

-Voy a encender mi teléfono un momento.- Dijo Mohan, antes de que cualquiera pudiera interrumpirlo continuó. -No se preocupen, tengo un encriptador de IP, mientras no lo utilice durante suficiente tiempo, nadie podrá rastrearnos; lo que quiero hacer es ver mi cuenta bancaria, necesitamos saber cuanto tenemos disponible para el viaje de regreso, no se preocupen, nos salvamos, sólo tengo que retirar el dinero.

Mohan encendió su móvil, se dirigió a la aplicación de se cuenta bancaria, pero, al abrirla, tiró su teléfono y se agitó, empezó a respirar agresivamente, el mayor miedo del objetivo Mohan Kohler, no tener capacidad de respuesta, no saber que hacer en alguna situación, se tiró al suelo a llorar.

-¡No sé que hacer!- Gritó histérico. -¡Desaparecieron todo el dinero de nuestras cuentas!- Estaba desesperado, y sus amigos se dieron cuenta de que estaba en pánico.

-¡Tranquilo, Mohan! ¡Se nos ocurrirá algo! -Luna intentó tranquilizarlo, y lo logró un poco, ya que tuvo ayuda de su hermana Rin.

-Chicos, podemos comprar un vuelo económico, traigo suficiente efectivo, tan sólo hay que ir al aeropuerto.- Dijo Jürgen confiado.

-Bien.- Dijeron todos.

Fueron caminando ya que no querían llamar la atención ni dejar rastro, y por suerte el aeropuerto estaba cerca, llegaron y, efectivamente, había un vuelo económico hacia San Francisco, aprovecharon y lo compraron, el vuelo salía en 3 horas.

-Rin, ven.- Le dijo Jürgen a la niña de 8 años, esto era demasiado para ella. -Esto se va a acabar pronto. ¿Ok? Ya nos vamos a casa.

2 horas y media después.

Pasajeros del vuelo 0376, se les solicita que aborden la aeronave.

Los jóvenes se dirigían a la puerta 08, sin embargo, un policía les pidió que se detuvieran, -¿Señor Fischer y Kohler?- Le dirigió la mirada a los chicos. -Sí.- Dijeron extrañados al unisono. -¿Señoritas Greenstorm?- La chicas respondieron con el mismo monosílabo.

Señores, ustedes están en nivel 3 de busca y captura en la INTERPOL, acompáñenme, se les procesará en un momento.

Los chicos se quedaron perplejos ante la situación.

-¡¿Qué?!- Exclamó Luna. -Oficial, se confunde, somos inocentes.

El policía solo los esposaba sin escuchar a nadie, Luna se dio cuenta de algo atemorizante mientras esposaban a Rin, el policía traía un collar de un ojo con la leyenda grabada de "El dios de neón observa". Luna le señaló a los chicos esto con los ojos y se quedaron horrorizados.

El agente los llevó a una sala de interrogatorios en el aeropuerto, donde otro oficial los esperaba.

-Bien, aquí nadie nos escucha.- Dijo el policía inicial mientras sonreía macabramente. -Ustedes ya deben saber de que va esto, yo no soy policía, yo y mi amigo pertenecemos a la iglesia del dios de neón. -Los jefes llegaran en breves para concluir con su asesinato, nos contaron que son ratas muy escurridizas, una cosa, no dijeron que no podíamos torturarlos mientras llegaban, bien, me quiero diver- Lo interrumpió una bala de revólver en la sien, proporcionada por su compañero.

-Soy de los Åström, enemigos del dios de neón, estoy aquí para ayudarlos, esa secta ha gastado millones en volverlos los más buscados del país, mi deber es sacarlos de aquí mientras limpio su identidad. Están a salvo. Están con los Åström.


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