Negan's Property {Daryl Dixon}

Capítulo 22

Una ardiente sensación comienza a formarse en la boca de mi estómago.

Es una mezcla de furia, enfado, vergüenza, rabia y asco.

Es como una bola de fuego que está a punto de estallar.

Y si estalla... arrasará todo lo que encuentre en su camino.

Levanto la vista , furiosa, justo a tiempo de ver cómo Daryl es placado por varios salvadores armados.

Ni siquiera llega a tocar a Dwight.

Tres hombres le devuelven a su sitio , esta vez varios metros a mi izquierda y se quedan con el , vigilando cada movimiento que hace.

Miro a Eugene, que deja caer lágrimas de sus ojos sin ningún tipo de pudor.
A veces me gustaría poder expresar mis sentimientos.

-¿Que quieres?

Rosita es la que habla, mirándole desafiante.
Trago saliva y espero la contestación del hombre con el rostro quemado, aunque ya sé cuál va a ser la respuesta.

-Lo siento cariño, no escuché tu nombre. Yo soy D o Dwight, llámame como quieras.

D, como la mayoría de los salvadores le llaman me mira divertido, como si todo fuera un puto chiste.

-¿ Entonces ?¿ Como te llamas?

El simple sonido de su voz me molesta y mi enfado aumenta.

-Rosita. ¿Que quieres?- escupe

Aprieto mi mandíbula y dejo salir el aire por la nariz, con fuerza.

-Pues Rosita... No se trata de lo que yo quiera; se trata de lo que vosotros vais a hacer.

-... vais a llevarnos a vuestro pequeño complejo , que al pareces es realmente bonito y luego... vais a dejar que nos llevemos todo lo que queramos y a quien queramos- continúa.

Su tono triunfal me pone enferma y las palabras se escapan de mi boca antes de que pueda procesarlas.

-Y una mierda, D- digo con sorna.

El chico rubio me mira con una sonrisa fingida y continúa como si nunca le hubiese interrumpido.

-... o le volaremos los sesos a Eugene- dice zarandeándolo- y después a cada uno de vosotros.

Dwight da varios pasos hacía delante, posicionándose justo a mi altura.

-Espero no tener que llegar a eso, de verdad...

Su fría mano agarra mi mandíbula y gira mi cabeza, para después posar sus labios es mi oído.

Intento separarme pero su agarre es firme y no lo consigo.

-Me quedé con ganas de probarte... no me tienes Dakota- dice en un susurro.

Dejo que la saliva se acumule en mi boca y cuando el salvador se separa ligeramente de mi, escupo en dirección a sus pies.

Él solo me mira y sigue su camino, sin inmutarse .

-Nadie más tiene que morir- dice volviendo a agarrar el cuello de Eugene.