3. Enamórame y rompe mi corazón.

74 4 0
                                    

No rompas mi corazón 

¿Cuál es tu intención? 

Eres todo un enigma,
Oh nena, muy linda,
Eres un ángel, ¿O un demonio?
Pero quedé encantado,
Quedé hechizado,
Por tu belleza
E inteligencia.
No rompas mi corazón,
Mejor cantemos aquella canción
Pero no me rompas
No rompas mi corazón
Te puedo reparar,
¿Cómo te voy a armar?
Te puedo amar,
Así a tu corazón puedo reparar,
Así no rompes mi corazón. 

Como en aquella canción 

Junto con una dedicación
Que inspiración
Pero no rompas mi enamorado corazón.

Me separé de Zedd y puse las manos sobre mis rodillas, una risa brotó desde el fondo de mí cuando mi mente aterrizó en la realidad

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Me separé de Zedd y puse las manos sobre mis rodillas, una risa brotó desde el fondo de mí cuando mi mente aterrizó en la realidad.

Reí a carcajadas y me limpié la lágrima que se me había salido de tanto reír, Dios, ¿quién se creía ese chico?

¿Por qué «él» tendría que ser diferente de todos?

Después me hice la idea de que ese chico estaba aplicando la psicología inversa conmigo. Declarando sus intenciones reales cuando normalmente los demás son más indirectos, se dan su tiempo para «seducirme», «impresionarme».

Mientras que Zedler había sido directo, me dio una advertencia clara: Me destruirá y que, con eso, provocará que yo, la mismísima rompe corazones, me enamore de él.

¡Qué buen chiste! Solo podía reírme, y a la vez, sentir curiosidad por cómo lo haría.

Hice que la curiosidad ganara, debo admitir que sabía sus intenciones, sin embargo, la forma de aplicarlas me pareció tan única que merecía una oportunidad, una oportunidad para tener un poco de mi interés.

Si antes me empezaba a interesar, después de ese beso lo hizo mucho más.

Por lo que dejé de reír, le quedé viendo con mi típica mirada juguetona, y en ese mismo momento decidí que jugaría con él.

Para ver quién rompe primero a quién.

Y propuse enamorarlo como no había enamorado a nadie antes, de una forma tan auténtica, que él no vería llegar el día en el que le rompería el corazón, y le demostraría que no será ninguna excepción.

—Quiero verte intentarlo y lograrlo —mentí en lo último con una sonrisa amplia, mostrando a mis perfectos dientes—. Enamórame y rompe mi corazón, Zedler.

Él alzó sus gruesas cejas oscuras y acercó su rostro al mío, de nuevo, como si lo estuviera examinando detenidamente en busca de algún gesto que delatara que estaba mintiendo.

Pero no lo halló, y respondió: —¿También aplicas la psicología inversa conmigo?

—Simplemente te doy una oportunidad invaluable, única, te abriré mi corazón, pero tendrás que ser muy original para llegar a él, por lo que te pido que no uses labias baratas conmigo, las detesto, haz que valga la pena, yo confiaré en que lo harás, enamórame de verdad, eres un experto, ¿no es así? Será fácil para ti. —Me acerqué a él y acaricié con lentitud su mejilla.

Te Romperé y Me AmarásWhere stories live. Discover now