Hielo y Fuego (Nowaki x Hiroki)

CAPITULO 22 Razones.

---Ryu---

Kaito me soltó y me le abalancé de nuevo a ese imbécil, le golpee con todas mis fuerzas en la cara al igual que le di un rodillazo. No puedo pensar en este momento sé que Kaito me dice varias cosas pero no me interesan lo único que quiero es hacerle pagar a esté infeliz todo el daño que le causo a Hiroki, afortunadamente Hiroki no vendría hoy al trabajo cosa que me alegraba así podré darle su merecido.

-RYU QUE RAYOS ESTAS HACIENDO. –grito y me aparto.
-Suéltame Kaoru tu no entiendes. –me intenta zafar.

Nowaki se estremecía en el suelo mientras tosía, quería abalanzarme pero me lo impedía.

-Kaoru por favor déjame.
-Estás loco. –dijo furioso.
-Sí y mucho. –grite.
-Deja tus estúpidos celos de hermano mayor. –me tomo de los hombros.
-TU NO SABES NADA.
-Que te calmes. –me golpeo la mejilla fuertemente haciendo que me quedara desconcertado- Maldición Ryu tu hermano puede juntarse con quien quiera.

Me quede en shock por sus palabras, me acaricie la mejilla donde me había pegado mientras mis lágrimas empezaban a brotar. Él jamás me había pegado, supongo que no sabe nada de mí…

-Ryu-san. –susurro Kaito.

Empuje fuertemente a Kaoru y me fui corriendo del lugar, me dolía mucho el pecho, sentí un gran vacío, me dirigí hacia la casa, me percate que Hiroki no estaba, tal vez salió con su pareja, entre a mi habitación y empaque mis cosas en mi maleta. Tome mi teléfono y marque el número de la única persona que me apoyaría siempre.

-Ryu, me alegra que me llames.
-Hayato, ¿estás ocupado?
-No, hoy es mi día de descanso.
-Podemos vernos.
-Claro, ¿quieres que pase por ti?
-Te veré en la estación.
-Ryu, ¿todo bien?
-N-no, -solloce- te necesito.
-No tardaré en llegar.

---Kaito---

Me sentí mal por Ryu, no tenía que haber pasado eso, en este momento Kaoru ayudo a sentar a Nowaki en el sofá, y salió corriendo por un botiquín.

-Yo… -empezó a decir.
-Quiero que te vayas lo más pronto posible. –comente.
-Por favor es-escúchame. –tosió.
-Hablare contigo fuera de la empresa. –lo mire.
-G-gracias…
-No sabes lo mucho que te aborrezco. –murmure y el solo bajo la mirada.

Kaoru llego con el botiquín y empezó a sanar sus heridas.

-Lo lamento, é no es así. –se disculpó Kaoru.
-No se preocupe, lo tengo merecido. –comento el peliazul.
-Sí usted quiere levantar un acta está en todo su derecho.

Sentí tantas ganas de golpear a este par, a uno por lastimar a lo que yo más amo en la vida, y al otro por no darse cuenta de sus palabras, por haber golpeado a Ryu, no puedo entender su comportamiento, solo cruce los brazos y me quede recargado en el marco de la puerta.

-Creo que ya está. –comento Kaoru después de un rato.
-M-muchas gracias. –hizo una mueca de dolor.
-Hablare apropiadamente con Ryu para que se disculpe contigo.
-No es necesario.
-Claro que lo es, con permiso. –camino y se colocó enfrente de mí- No entiendo cómo pudiste permitir que ocurriera esto.
-Usted no sabe nada.
-Esto lo sabrá Hiroki. –dijo determinado.
-Haga lo que quiera, pero si le dice eso y ve a su hermano usted estará en problemas.

Él me miro tajante y siguió su camino.

-¿nos vamos? –mire a Nowaki.
-S-sí.

Se levantó lentamente de su asiento y caminamos hasta su auto. Manejo hasta un departamento que me supuse que era el suyo y entramos.

-Siéntate por favor. –comento.
-Espero que me diga todo…

---Nowaki---

Todo mi cuerpo estaba adolorido, pero no era nada comparado con el dolor de mi pecho, hice sufrir a la persona que amo, se enteró de todo lo que hice…

Le empecé a contar a Kaito todo lo que le hice a Hiroki en el pasado, su semblante serio cambio al de la ira y apretaba fuertemente sus puños, le conté sobre las veces que lo engañe, como lo manipulaba, como lo dejaba solo después de tener sexo con él, también le conté que me empecé a enamorar de él, que tenía planeado decirle todo y empezar de nuevo.

-Eres un bastardo. –gruñó.
-LO soy y soy consciente.
-No tienes idea de lo mucho que sufrió Hiroki, ese día que lo vimos llorar como a nadie, eres un maldito HIROKI TE AMABA.
-Lo sé. –llore- Soy un estúpido, estoy arrepentido, yo jamás pude olvidarlo, lo seguí buscando pero nunca lo encontré.
-No te acerques de nuevo a él, RENUENCIA. –exclamo.
-No puedo, necesito estar a su lado.
-No lo voy a permitir, no quiero que te acerques a él, mañana le diré que has renunciado.
-No puedes hacer eso.
-Sí puedo hacerlo y lo haré, no sabes las ganas que tengo de golpearte hasta el cansancio, pero no vale la pena.
-Por favor, no me alejes de Hiroki, yo lo amo. –suplique.
-JA JA por favor, ¿amarlo? ¿tú? Él ahora tiene a su prometido y es mejor que lo dejes.
-No quiero.
-MALDICION NOWAKI EL NO TE RECUERDA Y JAMAS LO HARA.
-¿Qué? –me estremecí.
-Hiroki hace 5 años y medio sufrió un accidente haciéndole perder su memoria.
-N-no es verdad.
-Acéptalo Nowaki, has perdido. –comento.
-Por favor, no puedo alejarme de él.
-ESTAS DESPEDIDO. –comento y abrió la puerta- NI SE TE OCURRA PARARTE EN LA EMPRESA PORQUE MANDARÉ A QUE TE HECHEN ENSEGUIDA.

Salió de mi departamento dando un portazo, me sentí tan destruido, ya no solo mi cuerpo, sino mi corazón, soy la peor escoria del mundo, lo hice sufrir, yo lo destruí por completo, soy lo peor del mundo, pero lo amo más que a nada en el mundo, no lo quiero perder.

-Hiroki. –susurre entre las paredes de mi casa. –HIROKI

No puedo darme por vencido, lo amo y estoy muy arrepentido, tal vez si aclaro todo con él, podremos ser felices…

---Ryu---

Limpie mis lágrimas y vi a Hayato salir de su auto mientras corría hasta donde estabas.

-¿Qué te paso? –me tomo del mentón.
-Na-nada.
-Esto no luce a nada, esta inflamado y tienes el labio partido, ven tengo que curarte. –me tomo de la mano y me subió a su carro. Llegamos al carro y dejo mi maleta en su sala, me sentó en el sofá y tomo su maletín y me empezó a revisar.
-Au. –me queje cuando limpiaba mi herida.
-Lo siento mon amour pronto terminare. –me miro.

Se tardó unos pocos minutos más y lo abrace fuertemente, él correspondió a mi abrazo mientras tarareaba una canción tranquila.

“Ya no puedo seguir con esto, Kaoru y yo ya no tenemos un futuro… Solo me dedicaré a mi hermano…”