Hielo y Fuego (Nowaki x Hiroki)

CAPITULO 78 Rapto.

---Yudai---

Me siento tan feliz, acabo de enterarme de la mejor de las noticias, nunca pensé que hubiera quedado embarazo, o al menos no tan pronto.

Estoy esperando un bebé de Akihiko, el fruto de nuestro inmenso amor, tengo casi un mes, es lo más hermoso del mundo, no puedo esperar para decírselo a mi amado.

En este momento él salió a dejar a su hija a la casa de Kamijou, me alegro que ellos se lleven muy bien, como grandes amigos.

Sé que ellos comparten una niña y que aun Akihiko puede tener sentimientos por Hiroki y eso es válido, no quiero los olvide puesto son sus recuerdos muy valiosos, los sentimientos más puros y los mejores, no estoy molesto ni celoso, puesto que es su historia de vida que ha concluido.

Pero ahora él está conmigo, me ama y yo lo amo a él, nuestro amor es muto y ambos estamos luchando para que se fortalezca día con día.

Sé que con nuestro esfuerzo seremos felices, quiero que él sea feliz, se lo merece puesto que es un gran hombre.

Me mire al espejo y me levante un poco la camisa para ver mi vientre.

-No se me nota nada, -acaricie mi vientre- apenas tengo una pequeña línea, ¿debería ganar peso?

El doctor me dio una dieta que debo seguir, y que debo de tomar todo con calma y no alterarme tanto.

-Ah, -suspire- espero que no seas tan tímido como yo.

Escuche la puerta abrirse y me acomode mi camisa, respire profundamente y baje las escaleras.

-He llegado amor mío. –comento Akihiko.
-Bienvenido a casa. –sonreí y corrí a sus brazos.
-De saber que me recibirías así, saldría más seguido. –me beso.
-Baka, -me acurruque en su pecho- te amo Akihiko, no sabes lo feliz que me haces.
-Tú también me haces muy feliz, eres lo que yo más amo.

Caminamos hasta la sala y nos sentamos en el sofá.

-Akihiko. –murmure.
-¿Qué ocurre amor? –me recosté en sus piernas mientras acariciaba mi cabello.
-¿Te gustaría tener más hijos? –pregunte con miedo.

Él me miro y sonrió.

-Claro, quiero que tengamos 5 hijos.
-¿5? –me sorprendí.
-Así es amor mío, -me beso- quiero que seamos una gran familia.
-Tendrás que conformarte con 1. –suspire.
-¿Cómo?

Me reincorpore en el sofá y lo miré de frente.

-Estoy esperando un hijo Akihiko, -me sonroje- s-seremos papas.
-Y-Yudai... -me miro.
-¿Sí?
-ME HACES TAN FELIZ. –me abrazó- GRACIAS POR ESTÁ GRAN NOTICIA, GRACIAS POR HACERME TAN FELIZ.

Me cargo y empezó a besarme apasionadamente.

-Te amo Yudai, mejor dicho los amo a los dos. –me bajo y comenzó a acariciar mi vientre- ¿Cuánto tiempo tienes?
-Casi un mes. –comente.
-Hermoso. –sonrió- simplemente perfecto.
-No digas eso, es vergonzoso.

Él se incoo a la altura de mi vientre y lo beso.

-Hola pequeñín, espero puedas oírme, estoy muy feliz de saber que vendrás muy pronto así que te voy a esperar con muchas ansias, -acaricio mi vientre- te amo al igual que amo a tu mami.
-¿Mami?
-Así es amor, -sonrió- tu eres la mamá y yo soy el papá.
-E-Eso es vergonzoso. –me sonroje.
-Mi amor te amo tanto.
-Y yo a ti Akihiko, te amo tanto.
-Mi amado señor de Usami.
-¿Eh? –me sonroje.
-Yudai quiero que siempre estés conmigo.
-Es una promesa. –sonreí.
-Gracias, -sollozo- gracias Yudai, gracias.
-Akihiko, -lo abrace- gracias a ti por aceptar mis sentimientos.
-No amor mío, no debes agradecer, -tomo mi mentón- soy yo el que tiene tanto que agradecer por haberme enamorado y hacerme tan feliz, por darme la oportunidad de enamorarme de nuevo, los cuidare siempre, son mi familia a la cual amo, los protegeré.

Me acurruco en su pecho y yo me aferré a su camisa.

-Soy tan feliz.

---Hiroki---

Es hermoso tener a mis lindos niños en mis brazos, me hacen sentir tan feliz y completo, después de tantas cosas que ocurrieron ahora parecemos una gran familia.

Apenas nos instalamos en la casa que Nowaki había comprado, nuestros hijos tendrán su propia habitación cuando sean mayores, pero por ahora comparten habitación.

Hotaru adora a sus hermanitos, a pesar de apenas tener 1 años y dos meses es muy inteligente, guarda sus juguetes sola, no quiere que la carguen, siempre anda caminando de un lado al otro, y cuida a sus hermanitos, es tan lida.

Mi hermano a pesar de criar a su hija Rin siempre me apoya cuando debo cuidar a mis hijos y me da algunos consejos al igual que su marido ya que ambos trabajan en el hospital.

Hace apenas 1 mes Nowaki me propuso matrimonio, y yo acepte, fue un día muy especial y lindo para mí, queremos que sea una ceremonia sencilla y se hará en la casa dentro de algunas semanas, la decisión podría ser muy apresurada pero es lo mejor para nosotros.

Decidimos ir a dar un paseo como familia ya que hoy celebraremos mi cumpleaños, Nowaki es tan atento conmigo, siempre me consiente a pesar de no estar embarazo, es un gran hombre.

A pesar del pasado creo que lo he superado, esos fantasmas que me atormentaron quedaron atrás, ahora solo me queda seguir adelante junto con mi familia.

Colocamos a los trillizos en una carriola tripe que había conseguido Nowaki, tome la mano de Hotaru y caminamos por la calle. Cuando se cansaba mi niña estiraba sus bracitos y la cargaba mientras me daba besitos en las mejillas.

-Mamá, -sonrió- h-helado.
-Hotaru no debes comer tantos dulces. –la mire.
-Por favor. –hizo un puchero.
-¿Quién te enseño a hacer ese puchero? –pregunte.
-Fue papá Kusama.

Mire a Nowaki con reproche y el rio.

-Lo siento.
-Nowaki baka. –me queje.
-Baka. –rio mi niña.
-Por tu culpa mi hija dijo esa palabra.
-¿Mi culpa? –se sorprendí- S-Sí tú lo dijiste.
-Pero lo provocaste. –mostré mi lengua.

Nowaki me tomo del mentón y me beso.

-¿Qué haces?
-Fue tu castigo por culparme.
-Ba... no diré más.

Seguimos caminando hasta la una heladería y nos sentamos en una banca. Senté a Hotaru y cargue a Otani mientras Nowaki cargaba a Jack y a Sharon.

Le empecé a dar el biberón a Otani que se quedó dormido de inmediato, después lo coloque en la carriola y le ayude a Nowaki con Sharon, ambos le dimos sus biberones para que durmieran, ya que en toda la noche no durmieron nada.

Los colocamos en la carriola y Nowaki se levantó.

-Bueno Hiro-san es hora de...

Como si de una broma se tratará Wataru apareció de la nada y le disparo a sangre fría a Nowaki en el pecho.

-¡¡¡NOWAKI!!!!!

Nowaki cayó al piso instantáneamente mientras la sangre empezaba a rodearlo.

Tome a Hotaru de la mano con el propósito de acercarme a Nowaki.

-Das un paso más y, -sonrió Wataru agarrando la carriola de mis hijos- estos bastardos mueren.
-No les hagas nada. –solloce.

Todas las personas comenzaron a correr aterradas de lo que estaba pasando, vi a dos camionetas llegar al lugar.

-Vamos. –me tomo del brazo.
-No, no no, mis hijos.
-Vendrán con nosotros.
-NO QUIERO.

Me dio una bofetada.

-NO TE PREGUNTE. –gruñó.

Unos sujetos llegaron al lugar y cargaron a mis hijos.

-NO LOS TOQUEN. –grite- NOWAKI, POR FAVOR NOWAKI LEVANTATE.
-Tú lo pediste Hiroki.

Sentí una patada en mi vientre que me dejo sin aire. Wataru me cargo en su hombro rumbo a las camionetas.

-N-Nowaki...

Mi amor, por favor s-sálvate y encuéntranos.

Me subió a la camioneta y en cuanto los otros subieron las camionetas empezaron a andar.

-¿MIS HIJOS?
-Están en el otro auto, solo traje a la mocosa de Usami.

Vi a Hotaru y me aparte de ese loco.

-Tranquilo porque estoy siendo muy paciente. –gruñó.

Él trono los dedos y el hombre soltó a mi niña y la abrace a mi pecho.

-Mamá, miedo... -sollozo.
-Aquí estoy hija, -susurre- por favor Wataru devuélveme a mis hijos.
-Te pedí por las buenas que fueras mío pero creo que necesitas motivación.
-Déjalos ir por favor, ellos no tienen la culpa.
-No me interesa. –cruzo los brazos- No te preocupes al lugar donde vamos habrá una personas que los cuidará muy bien para que nosotros tengamos lo nuestro.

Quería gritarle, insultarlo, pero no puedo, el coraje se encuentra en mi garganta, no puedo creerlo, pensé que la felicidad nos rodeaba, que equivocado estoy...

Abrace fuertemente a mi hija y mire por la ventaba la otra camioneta rogando que mis hijos estuvieran bien.

-Nos divertiremos tanto Hiroki.

---Ryu---

Nos fuimos al hospital puesto Hayato tenía que revisar a sus pacientes, decidí acompañarlo junto con mi niña, casi no salimos porque no hace mucho mi hija le dio fiebre por los cambios de temperatura, pero ahora ya está mejor y creo que le hará bien ya que el clima es estable.

Al llegar al hospital todas las enfermeras comenzaron a rodearme.

-Es hermosa. –comento una chica.
-Se parece tanto a los dos.
-Awww hizo un puchero.
-Que tierna.
-Chicas, -comente- por favor, recuerden que apenas estuvo enferma y no la deben rodear tanto, debe respirar.

"Yo también"

-Lo sentimos. –hicieron una reverencia.
-No se preocupen.

Acompañe a mi amado a su oficina.

-DOCTOR HAYATO. –grito un enfermero.
-¿Qué ocurre?
-Tenemos a un paciente de último momento, -se alteró- ahorita los demás doctores están ocupados, por favor ayúdalo.
-Así será, ¿le puedes decir a Sheik si puede venir un momento?
-Claro.

El enfermero salió y mi amado me miro.

-Quisiera que me ayudarás.
-¿Yo?
-Sí.
-Está bien, sé que Sheik cuidará bien de nuestra hija.

En cuanto llego la chica, le encargue a mi niña y ambos nos fuimos hasta la sala de urgencias, nos cambiamos y abrimos la puerta.

¿QUÉ?

No podía creer lo que veía, no podía...

Nowaki estaba en esa cama...

Hayato estaba tan sorprendido como yo, así que nos acercamos rápidamente.

-¿Cuáles son los síntomas? –pregunto mi esposo.
-Ha perdido mucha sangre, su respiración es entrecortada, su presión baja y la bala impacto cerca del corazón, tal parece que no hay perforación.
-Gracias, ¿sabes qué pasó?
-Un tiroteo en una plaza, muchas personas huyeron y otras hablaron acerca de un secuestro.

Sentí que la sangre se iba de mi cuerpo.

¿Secuestro?

-Lo siento Hayato, debo...
-Ve amor.

Corrí hasta donde había dejado mis cosas y tome el teléfono. Comencé a marcarla a mi hermano.

"Contesta"

Cuando iba a colgar contestaron.

-¿Sí?
-¿Hiroki?
-Oh cuñado, no lo soy, -rio- no te preocupes a partir de ahora los cuidare.
-¿Wataru?
-Así es, -gruñó- está es mi venganza, así dile adiós a tu hermano.
-DEJALO IR.
-No solo lo tengo a él.
-NO PUEDE SER...
-Así es, tengo a esos mocosos, así que hasta nunca. –colgó.
-Hiroki, -murmure- Hiroki, ¡¡¡¡¡¡¡HIROKI!!!!!