Cupido... ¡En persona!

Especial 1: parte 2

•   •   •

Luego de un rato de tragos, retos, bailes y demás, se comenzaban a dar la 1 a.m. mi hermano por su parte ya esta borracho y él borracho habla mas que desaparecido cuando lo encuentran, una de las manías que tiene él es esa otra es hacer locuras y agradezco que aun no ha hecho nada. Sus amigos le intentan poner una cinta a ver si se calla un rato, aunque sea 5 minutos.

-¡Lleven lo a la silla de la vergüenza! - ordena Carlos mientras Marcos y Will lo llevaban a la recién mencionada "silla de la verguenza" una silla de niño de 5 años o para alguien que no tenga el mas mínimo rastro de trasero, es una silla súper pequeña donde me hacían sentar a mi cuando era pequeña y me portaba mal, sin embargo aún la tienen solo para que los alocados amigos de mi hermano y mi hermano se hagan bromas mutuamente. De seguro casi todos dentro de la fiesta están ebrios.

-¡Oigan! ¡vamos a hacer un juego! ¿les parece? - grita uno de los invitados - ¡se llama "Yo nunca, nunca" y ya la mayoría debe de saber de que trata! - dice el invitado a lo que casi todos dentro de la casa concuerdan - ¡para el descerebrado que no sepa, trata de que alguien dice por ejemplo: "yo nunca he salido con mas de 3 chicas a la vez" y quien beba es porque si lo ha hecho ¿les parece si jugamos?

-Siii - dijeron a coro la mayoría de los invitados

Todos salimos al patio para jugar el juego ya mencionado cada persona se sentó en una silla y algunas de las chicas en el regazo de su acompañante de esa noche, el juego comenzó:

-Yo nunca, nunca... He besado a alguien de mi mismo sexo - dijo una chica a lo que varias personas bebieron

-Yo nunca, nunca... He dejado a alguien porque me gusta alguien más - bebieron unos cuantos

Así se paso la noche, haciendo preguntas tontas hasta que ya casi todos estaban ebrios:

-Yo nunca, nunca he asistido a carreras ilegales - dijo con seguridad en su tono una rubia plástica de ropa tan apretada como para niña de 7 años.

Lo dices por rabia.

No, la tipa esa sabia que yo lo hacía.

Bufé y disimuladamente bebí un sorbo. Por mi suerte que parece que nadie me vio.

El juego termino y aproximadamente los invitados se comenzaron a ir a las 5 a.m. y yo me fui a dormir a las 6.

*Unas horas más tarde*

Me levanté a las 9 a.m. así que salí a caminar, en el camino me encontré a Oliver quien parecía sumergido en sus pensamientos.

-¡Eh, Oliv! ¡Hola! - sin respuesta. - Oye... - sin respuesta -¡Oye, pedazo de yegua!

-Ah, hola Emily, no te había oído

-¿En que estabas pensando?

-¿Has ido a carreras ilegales?

-Emm... No, no, ¿por? - me empiezo a poner nerviosa...

Calma, niña, ¿cuantas veces le mentiste a tu hermano?