Probabilidad

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Estaba sentada en el granero sobre un montón de heno.

Al principio había estado acompañada por los hijos de Clint; sin embargo, en cuanto cayeron rendidos llamé a su padre para que los llevase adentro, de alguna manera, cuando lo contemplé alejarse con ambos niños a cuestas no pude evitar recordar las veces en que mi padre había tenido que hacer lo mismo.

En ocasiones contadas con los dedos de una mano, me resultaba imposible no extrañar aquellos días: la sonrisa de mi padre, su voz con su típico tono de desgaste, la sonrisa de John, los jardines floreados de la base, incluso creo que llegaría a decir que extrañaba un poco a Vladimir, el niño mayor que molestaba a John y al que siempre acababa golpeando.

-Podrías hacerlo-aquella voz me sobresaltó por completo.

Me volví hacia la izquierda y me encontré con John, quien miraba al frente con calma.

-John...-gesticulé casi en silencio.

Mi mente no podía acabar de asimilar la sorpresa que sentía por verlo ahí, sentado junto a mí, sonriente, y perfectamente bien.

Antes de que él siquiera pudiese decir nada, me abalancé sobre él atrapándolo en un abrazo que él tardó en corresponder.

-¿Cómo...? ¿Estás bien? ¿Te hicieron daño?

-No. Estoy bien-me miró fijamente mientras me apartaba ligeramente-, Ultrón no va a hacerme daño, a ti tampoco _____.

-¿Y cómo estás tan seguro?-vacilé.

-Somos parte de su plan, de la nueva era, toda era necesita de tiempo y espacio ¿No lo crees?

No necesité que dijese nada más. 

John no había escapado, no estaba a salvo, ni él ni yo. Me puse de pie en un salto y miré de soslayo la puerta, no estaba demasiado lejos de mí; pero si intentaba entrar a la casa, desconocía lo que podía llegar a hacer mi hermano si estaba siendo controlado por la aliada de Ultrón.

-John, no sé qué te hicieron; pero sé que aún puedes oírme, que estás ahí-dije con tranquilidad-. Eres más fuerte que ellos, tienes que pelear contra...

-¿Pelear?-mi hermano soltó una carcajada-, ¿Para qué demonios me resistiría a un nuevo orden? No pienso renunciar a tu seguridad.

-¿Mi seguridad?

-Si no nos resistimos, si colaboramos, Ultrón me dio su palabra de que no te tocaría, que te dejaría vivir en paz. Seríamos libres, y tú no tendrías que seguir esforzándote por sobrevivir-algo en su mirada parecía un halo de esperanza-, tendrás una vida.

-Tengo una vida ahora-tercié.

-¡No puedes llamar a esto vivir! Mírate, _____, los dos lo sabemos, sólo que ninguno tiene el valor de decirlo. Sólo ven conmigo.

-No lo haré-bajé la mirada-, si... vivir significa dejar que miles de vidas se pierdan, prefiero morir intentando salvarlas-entonces clavé la vista en él-, y sé que tú también lo harías, puedo ayudarte a luchar contra ella. Voy a hacerlo.

Le tendí una mano que temblaba por la desesperación de convencerlo, de mantenerlo a mi lado, de intentar meterme en su cabeza para poder arreglar lo que fuera que esa mujer le hubiese hecho. Yo lo sabía, John podía ser un cabeza dura, mal hablado y muchas cosas más; pero sobre todas las cosas era una de las mejores personas que alguien podía conocer, y el mejor hermano que pude haber pedido.

-No tienes que hacerlo solo-le prometí-. Voy a ayudarte. No voy a dejarte solo con todo esto.

Por una décima de segundo, creí ver en sus ojos una chispa de resistencia; sin embargo, en un simple parpadeo desapareció.

Temporal (Steve Rogers y tú) [En corrección]Where stories live. Discover now