I'm Just An Angel {Vikturi/Otario AU Omegaverse}

2.

Si de algo se caracterizaba el pequeño Yuuri, era de su prominente no-sentido del peligro. Podría estar siendo acechado por miles de personas, las cuales, si eran algo discretas y no muy ruidosas, él no era capaz de notarlas. No es que fuese sordo o algo por el estilo, sólo era... demasiado despistado, demasiado Yuuri.

Tras cumplir con sobresaliente el trabajo del día, se elevó hacia lo que era su hogar. Dormía con su mejor amigo Phichit; era una relación sana de amistad sin ningún tipo de sentimiento de por medio, pues ni el beta ni el omega tenían "ese tipo de sentimientos" hacia el contrario. Era pureza en su máxima definición. Haciendo memoria, la mayor diferencia entre Phichit y él, era su facilidad de socializar. Por eso Phichit contaba con una agenda innumerable de amigos, mientras que la de Yuuri se limitaba a poco más que cinco personas.

El de aspecto tailandés era de su misma generación, porque fueron creados a la vez. Desde el primer momento entablaron amistad y fueron muy unidos, tanto que empezaron a juntar sus nubes para dormir (algo bastante normal si se permite decir); ahora ya ni se distinguía la diferencia entre lo que fueron dos nubes separadas alguna vez. Phichit ocupaba mayor espacio, pues amaba dormir a pierna suelta, mientras que Yuuri prefería "ser una bolita".

Qué recuerdos... Sin duda pasaban ya siglos de aquello, pero lo recordaba tan claro, tan vívido, que su tierno corazón le hizo correr para abrazar a Phichit y terminar rodando por las acolchonadas nubes que eran su hogar.

-Oh por Dios, Yuuri... ¿Qué recordaste esta vez?- Era muy común que al "nipón" le entraran ataques de ese tipo, donde corría a abrazarlo con los ojos cristalinos en lágrimas. -¡Oh mai gaaah! No tienes remedio, siempre serás un cerdito pequeño...

Yuuri le contó cómo había recordado todo lo ocurrido en tiempos pasados, había gastado tres paquetes de pañuelos y se había bebido dos vasos de agua durante toda la conversación. El tailandés se sorprendía de la cantidad de recuerdos que había en su mente, se acordaba de todo a la perfección. Le gustaba oír a su amigo hablar, pues conseguía recordar cosas que su propia mente olvidaba, Yuuri era muy listo, siempre lo había sido sin duda. La memoria de lo que él denominaba cariñosamente "su cerdito" era prodigiosa.

Esa noche durmieron juntos como usualmente, como desde hace años vienen haciendo. El cielo era el único lugar donde estaban 100% seguros. La entrada de un ser maligno (aun siendo el ser mas poderoso) lo convertiría en polvo y cenizas.

Pero que no entre no significa que no te vigile...

свинка~♡

Wooliiiss~~♡♡ holi mis coshitas heggmoosososostas ¿Qué tal? ¿Les gusta? Diganme lo que les parece, si tienen dudas, como quieren que siga la historia... Leo y respondo todo ♡ así que denle amorsh a la historia si queréis que continúe 7u7.

CxSdeLemmon