PROMETÍ AMARTE; CAMREN

EPÍLOGO

Los años pasan.... y estos últimos, han sido los mejores de mi vida. Han sido los mejores, desde que conocí a la mujer que robó mi corazón en aquel aeropuerto. Mi chica, a quién prometí amar con toda mi alma, y a quién amaré siempre.

Recuperé y superé recuerdos; tal vez, nuestra historia de amor ha tenido muchas dificultes, muchos obstáculos, mentiras, traiciones, aberraciones y tragedias. Sufrimos y lloramos mucho, pero tambien fuimos muy felices, y esos momentos elegí yo, para recordar. Siempre tengo en cuenta que si nunca pasamos por algún tipo de situación que nos hagas sentir tantas emociones, es como si no estuviéramos vivos; 'sentir es vivir'; sobretodo si hay un verdadero amor, y el verdadero amor casi siempre es caótico.

Un año después de casarnos por segunda vez, logré recuperar la memoria al noventa por ciento. Recordé, recordé todo de ella, casi todo de mi vida. Recordé todo lo malo por lo que pasamos, pero también lo bueno, recordé la hermosa sonrisa que tenia cuando le pedí ser mi novia; y la que tenia cuando nos casamos. Recordé esas madrugadas llenas de besos, caricias y palabras bonitas. Recordé las promesas y todos los planes que teníamos a futuro; que ahora estamos cumpliendo juntas.El amor de Lauren y el de mis hijos, lograron hacer tantas cosas en mí, y me siento bendecida al ser correspondida con tanto amor.

Sonreí instantáneamente, al mirar aquella foto de mi familia; que estaba sobre mi escritorio. Suspiré pasando mis dedos por encima de las sonrisas de mis hijos. Mi familia había crecido, ya no éramos sólo cinco. Ahora éramos siete,bueno...ocho. Yo estaba embarazada de nuevo, esperaba a mi sexto hijo. Había logrado quedarme embarazada después de un par de tratamientos, en los cuales estuvo involucrado Nick Bateman; quién se había vuelto uno de mis grandes amigos, y a quien le agradecía tanto.

Solté un risita al recordar la cara de mi esposa, cuando le dije que estaba embarazada. Las dos ocasiones, se puso loca de la emoción; ahora espero que sea de la misma manera.

De pronto, tocaron la puerta de mi oficina. Haciéndome sobresaltar un poco, y haciendo que se cayeran algunos folios.

-¡Santo cielo! Adelante...-contesté poniéndome de cuclillas para levantar aquellos documentos.

-¿Camz?- Sonreí al escuchar a mi mujer, entrando a mi oficina del hospital. A pesar de que ya habían pasado más de 'trece años' desde que nos volvimos a casar.trece años viviendo a lado de esa mujer, aun me seguía poniendo nerviosa y hacia que mi corazón latiera como loco desenfrenado.

Me quedé como boba mirando lo hermosa que se veía mi chica de ojos universo. Ella seguía siendo tan guapa,tan hermosa, tan perfecta. Cada día me enamoro más y más de ella. No hay día que no agradezca a la vida por una mujer como ella, también, le agradezco a ella por todos los años de felicidad que me ha dado.

-Hola, cielo - recogí los papeles para ponerlos sobre el escritorio, y después caminé hasta a ella para darle un abrazo, que ella no dudó en corresponder -Te extrañé - susurré antes de darle un pequeño beso en los labios.

-yo también, mi bonita- coló sus manos por mi cintura, mirándome a los ojos. - estás preciosa,siempre lo estás.

-Lo sé- guiñé un ojo, haciendo que ella riera.-¿cómo estás? ¿Cómo te fue en la reunión?

-Estoy bien-Dejó un beso en mi mejilla-Las londinenses lograron convencerme, en realidad, me conmovieron.

-Ah, te conmovieron? ¿Conmovieron a la dama de hierro?-Fingí un gesto se seriedad-¿Son guapas y jóvenes?-Se echó a reír.

-Si, y una de ellas es muy buena haciendo negociaciones-Rodé los ojos.- amor, son pareja. Hacen una pareja muy bonita, así como tú y yo-Volvió a besarme.-Además, es una buena apuesta en el mercado textil.