• t r e s •

231 20 1
                                    

p r e s e n t e

Era 6 de marzo.

No estaban en día de descanso, y tampoco en fin de semana. Era un martes normal como cualquier otro— sin embargo, Jordan sabía que no lo era.

Había ahorrado lo suficiente los últimos dos descansos, y en el último antes de ese martes, logró comprar lo que ella pensaba que era el regalo de cumpleaños idóneo para Kentin; quien en ese mismo momento estaba en medio de una clase práctica, arrastrándose por el barro en el suelo y saltando obstáculos con alambre de púas.

Ella, por su parte, fresca como una lechuga, acomodó sus anteojos sobre el tabique de su nariz en medio de su clase teórica de inglés.

Podía verlo desde la ventana, sudoroso, hiperventilando. Con los ojos entrecerrados, tratando de ver lo mejor que podía el terreno. Jordan sonrió para sí, pensando en su perfecto regalo.

El momento para entregarlo llegó unas horas después, en plena hora de almuerzo. Como siempre, tomó su respectiva bandeja de comida con una mano y se dirigió directo a la mesa donde estaba el castaño, solitario, agazapado y con la mirada gacha. El ruido metalizado contra la mesa fue lo que llamó su atención, mientras la rubia se sentaba de forma descuidada. Empujó la bandeja más cerca de él, dando a entender que no tenía hambre, y que le estaba cediendo su ración.

—Feliz cumpleaños, Kentin.

La única frase salió de sus labios, entregándole un pequeño paquete envuelto en papel marrón.

El muchacho de anteojos, sorprendido, feliz y agradecido a partes iguales, lo tomó con cuidado, destapándolo sólo para encontrarse con un pequeño contenedor de lentes de contacto. Al abrirlo, a penas pudo notar las lentillas transparentes… lo que le causó una emergente sonrisa enorme.

— ¡Jordan! —exclamó, pero cuando alzó la mirada, la rubia ya se estaba levantando. Kentin tuvo toda la intención de acercarse para darle un abrazo; pero ella negó con la cabeza antes de que eso pasara.

— Ni se te ocurra —sin embargo, le esbozó una ligera sonrisa ladina:—. Te serán más útiles de lo que crees.

Y se fue.

CDM ▶ armyWhere stories live. Discover now