#31

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Evan

Leía y leía su mensaje una y otra vez, no sé exactamente qué quería descubrir o si quería que fuera mentira, sólo sé que en estos momentos estaba destruido, por dentro y por fuera.

Traté de llamarle muchas veces, pero todo fue en vano, él no respondía y eso me volvía loco.

Mis ojos ya estaban completamente rojos, y ya no me quedaban objetos que romper, tenía una carga tan grande dentro de mí que no me dejaba respirar tranquilo. El saber que todo esto era mi culpa me desesperaba a niveles que nadie se puede imaginar.

Golpearon mi puerta, interrumpiendo mis gritos. Con la furia que aún sentía la abrí.

Mi pequeña hermana estaba del otro lado, al verme así lo único que hizo fue encogerse, como si yo la fuese a golpear.

- No .- susurré y trate de relajarme.

- Vine a ver como estabas .- me dijo.

- Estoy bien.

- ¿Seguro?

- Ajá.

- ¿Porque tus cosas están rotas?

- No paso nada.

- Evan, yo sé que estás triste por Liam .- murmuró y se acercó a mí.

- Yo..

- Descuida, él volverá .- me abrazó .- Además, ustedes se quieren mucho.

Suspiré. Si supiera la estupidez que hice ni siquiera me voltearia a mirar.

- Si, él volverá .- murmuré, aunque sabía que eso no pasaría.

En ése momento unas pisadas suaves se acercaron al lugar, sin tocar abrió la puerta y nós miró directamente, sonrió y acomodo un poco su cabello largo.

- Hola .- dijo con su suave voz y comenzó a examinar la habitación entera.

Hubiera querido con el alma que fuera él, pero en su lugar tengo a algo muy similar, su hermana pequeña.

- Ann .- gritó mi hermana y corrió a abrazarla.

- Hola Evan .- me miró.

Joder, si era exactamente igual a él.

- Hola.

- ¿Porque hay cosas rotas? .- preguntó mientras me miraba con sus ojos del mismo color que los de él.

- Eh, un temblor .. Hubo un temblor y todo se cayó .- murmuré, no soy bueno mintiendo.

La pequeña solo asintió y comenzó a quitarse su chaqueta.

- ¿Quieres jugar? .- le dijo mi hermana.

- Sólo estaré aquí por un rato.

- ¿Porqué?

- Mi mamá, mi papá y yo hablaremos con mi hermano por video .- sonrió.

Al escuchar eso mi corazón se acelero, no podía perder esta oportunidad de verlo.

- Ann ¿Crees que yo pueda ir contigo a verlo? .- la miré.

- Si.

- Gracias .- sonríe como pude.

- Mi mamá vendrá a recogerme dentro de media hora.

- De acuerdo, yo me ducharé y luego vendré .. Y luego...  Yo podré verlo y.. .- ni siquiera podía completar una frase, sólo entre al baño de mi habitación no sin antes darle, nuevamente, las gracias a la pequeña.

Después de darme la ducha más rápida de mi existencia, me vestí y peine.

Ya estando listo sólo tome un par de cosas y salí de mi habitación.

Tenía muchas ganas de verlo, necesitaba hablar con él, sé que si lo hago podremos arreglar todo esto, y asi volveremos a estar juntos.

Llegué a la habitación de mi hermana, pero en aquel cuarto sólo estaba ella.

- ¿Y Ann? .- dije.

- Ya se fue .- me dijo mientras peinaba a su muñeca.

- ¿Como que se fue? .- salí corriendo hasta la primera planta.

- Martha, ¿Donde esta la pequeña? .- casi grité.

- Su madre ya se la llevo, cariño.- me dijo.

- ¿Qué? .- alcé la voz .- Ella me dijo que..  .- no termine la frase y sólo salí corriendo hacia mi auto.

Manejé hasta la casa de los Bowen, no podía perderme la oportunidad de hablar con él, es hoy o nunca.

Cuando llegue ni me moleste en cerrar la ventanilla con seguro, sólo corrí y toque la puerta, pero ningún integrante de su familia estaba tras esa puerta.

- ¿Te puedo ayudar en algo? .- me dijo un chico algo alto.

- ¿La familia Bowen?

- Ah, ellos se mudaron hace unos días.

- Se.. Mudaron  .- trataba de procesar las palabras pero simplemente no podía.

- Así es.

- ¿Sabes a donde?

- No, lo siento.

Asentí algo en confundido y volví a casa.

- ¡Scarlett! .- grité con desesperación.

- ¿Que pasa? .- bajo las escaleras.

- ¿Ann se mudo de casa?

- Ajá.

- ¿Por que no me lo dijiste?

- No lo sé .- alzó los hombros.

- ¿Sabes a donde se han ido?

- Ella no me dijo a donde.

No me sentía bien.

- ¡Necesito saberlo! .- grité y corrí hasta mi habitación.

Ya no podía más, estaba completamente devastado. Había intentado de todo, pero era completamente tonto seguir tratando de arreglar algo que quizá él no quiera que se arregle.

No tengo fuerzas para seguir con esto, tal vez sólo debería dejar que las cosas sean como el destino me lo ponga en frente. Y tal vez el maldito destino no quiera que sigamos juntos.

Lo amo, pero tal vez no sea suficiente como para tenerlo en mi vida.

Quería un futuro con él, aunque nunca pase, tal vez lo que nosotros tuvimos no fue nada más que algo bonito.

Sólo necesito hablar con él una maldita vez, así podré disculparme, sólo necesito eso. Disculparme.





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Holu n.n

He estado pensando y creó que la historia terminara en el capítulo 40 ¿Que opinan ustedes?

Bueno Bai (╯3╰)

-TeamRare-

Me Enamoré [LGBT]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora