"El Estresado", "El Gato" y "El Rumbero"

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—¿Ya te vas? ¿Así...?

—Sí. ¿Algún problema?

El rubio, de pie frente al espejo del baño arreglaba el nudo de su corbata muy concentrado. Ni se molestó en darse vuelta para hablar con el hombre desnudo que le observaba consternado detrás de él.

—¿Puedes verme la cara al menos?

—Ya te vi más que la cara. Estoy apurado, tengo una reunión en treinta y dos minutos y tengo que cruzar la Autopista 18 que esta hora debe estar terriblemente colapsada de tráfico.

—¿Y ya...? ¿Te vas y cuándo se supone te vuelvo a ver?

—Ahora no puedo responderte. Déjame llegar a la oficina y revisar mi agenda. Te llamaré.

—¡Aaahhhh! Bien, vas "a revisar tu agenda". ¿Esa es tu nueva forma de decirme que ya no me necesitas, Liam?

El rubio tomó su saco del gancho y se lo puso. Volteó muy molesto a responderle:

—¿Qué carajo te pasa ahora? ¿Me vas armar un drama? Tú y yo no tenemos nada, y lo sabes.

—Me usas...

—No. Tú lo disfrutas, yo lo disfruto, se acaba y luego regresamos a nuestras vidas. Punto. Si quieres complicar las cosas y armarte una "telenovela" en tu cabeza, es cosa tuya. Es sexo, más nada.

El castaño suspiro frustrado. Liam ya estaba en modo "Señor Mason" y no había más nada que decir. Terminó de vestirse y fue a tomar su celular y las llaves de su automóvil que quedaron sobre la mesa de la cocina.

—¿Me llamarás entonces?

—Lo haré, David. Sólo... ¡No me presiones! Sabes todo lo que tengo en la cabeza ahora, te busco para liberarme un poco, no vengas ahora tú a complicarme más la vida.

El castaño se dirigió a la cocina a montar algo de café. Cuando iba a ofrecerle a su compañero, este ya había cerrado la puerta y se dirigía a toda prisa al ascensor. David Ross suspiró con tristeza y devolvió la taza a su lugar.

***

—Háblame, Diane...—Dijo apenas llegó a su oficina al ver a su asistente.

—Llego tarde, señor Manson.

—¿Te pregunté la hora acaso? ¡Ya sé que estoy llegando tarde! Dime en qué quedaron en la reunión.

—El señor Phillips no aprobó el crédito.

—¡Bien! Pensé que el maldito viejo terminaría jodiendo todo. Pero recapacitó. ¿Y Robertson?

—Él si desea aprobarlo. Estuvo en la reunión y su asistente tomó la palabra en su lugar. Convenció a algunos de la importancia de esta inversión.

—¡Detesto a ese hombre!

—Aún no se ha perdido todo. Habrá otra reunión, el jueves. Tiene tiempo de "contraatacar".

—¿El jueves? ¡Justo el día de cumpleaños de mi madre! —El hombre se puso la mano en la frente, completamente estresado. —¡Este definitivamente NO es mi día!

—Por cierto...su hermano le está esperando en su despacho.

—¿QUÉ? ¿Le dejaste pasar?

—Señor Manson...usted sabe como es él. Insistió y yo estaba con las manos atadas por lo de la reunión.

—¡Desaparécete de mi vista! ¡Largo!

La asistente se quitó de su camino y regresó a su puesto. Liam Manson entró furioso a su despacho y se encontró con el joven sentado en su asiento...haciendo "avioncitos de papel".

"Café con Leche"Where stories live. Discover now