Cool Guy [KookV]

Capítulo 11

Desde ya les aviso, todos los comentarios de "el abuso no tiene justificación" van a ser borrados. Todos sabemos que eso es así, no hay forma de justificarlo y si alguien no lo sabía, ahora lo sabe. Perdón por ser tan brusca, pero la historia va así. Este es un lugar para disfrutar y no nos vamos a poner a hacer debates morales.
Por otro lado, perdón la demora y gracias por todos los que siguen atentos a CoolGuy. 🖤
Sin más que decir, disfruten el capítulo.

(*˘︶˘*).｡.:*♡

Culpa. Culpabilidad y resaca eran aquellas principales sensaciones que llevaban los cinco participantes de aquél desayuno que SeokJin los estaba obligando a tomar. Aunque tampoco les venía mal luego de una noche de pocos bocadillos, mucho alcohol y otras sustancias. Momento llamado "bajón" de la noche o madrugada en donde el estómago pedía a gritos ingerir alimentos para no romperse con el peso de las bebidas subidas de alcohol.

Uno, por otro lado, tenía agregado a la resaca una profunda angustia que cerraba su pecho y lo hacía querer ahogarse en lágrimas y gritos. Porque TaeHyung había sufrido y se había quedado solo. Si él hubiese estado, nada de ello habría pasado. Pero no, porque fue interceptado por Rosé y Moonbyul cuando había ido en busca de agua para TaeHyung. HoSeok trató de rechazarlas lo más amable y pacientemente posible, pero las chicas al parecer estaban aferradas a la idea de conseguir algo con él; y para cuando pudo librarse, ya no encontraba al menor por ningún lado. Recorrió arriba y abajo, de izquierda a derecha por completo la casa y no pudo dar con él, hasta que se cruzó con la supuesta novia de JungKook, quien estaba entre furiosa y angustiada porque su novio había salido de la fiesta con un hombre en brazos.

TaeHyung.

No fue ni siquiera necesario salir en búsqueda de los demás, ya que al parecer tanto Seokjin como Jimin estaban buscando al menor de sonrisa bonita. Según Jimin, estaba con Yoongi cuando Jin apareció preguntando por TaeHyung, y Jimin aún estaba lo suficientemente consciente para que el efecto de todo lo ingerido desapareciera ante la mención de su mejor amigo. Trayéndose así a Yoongi consigo.
HoSeok les hubo mencionado lo que la novia del maknae dijo, saliendo todos corriendo en busca del coche del mencionado. Para su suerte aún estaba estacionado, pero la luz en el interior estaba encendida y ligeros sonidos podían escucharse dado que la música de la casa no llegaba lo suficiente.

HoSeok se imaginaba todo lo peor. Y eso le producía un horrible hueco en el pecho. Sólo deseaba que TaeHyung no cediera al menor, no quería, no podía aceptarlo. Un corazón roto era difícil de superar y él lo sabía bien.

Tras gritos, golpes y mucha preocupación al cabo de apenas unos minutos, Jeon salió disparado del coche sin mirar a ninguno y pacientemente esperaron a que TaeHyung saliera.

Pero eso no pasaba. TaeHyung no salía y eso sólo incrementó la preocupación que invadía su pecho. No sabía si acercarse sería correcto, no sabía si estaba bien sentirse tan preocupado y a la vez con tanto odio hacia su mejor amigo.

Pero aún no sabía con certeza que el que estaba allí fuera su bonito alien, y alguien debía confirmarlo.

HoSeok se acercó y abriendo un poco más la puerta, pudo divisar el menudo cuerpo temblando y llorando con desconsuelo. La ira hirvió en su pecho y sus puños se apretaron al punto de dejar sus nudillos blancos. Pero no era momento para eso, la persona frente a él lo necesitaba y esto se notó en cuanto al reconocerle se echó a sus brazos.

Ambos se abrazaron como si la vida se les fuese en ello, y HoSeok le juró no volver a dejarlo solo.

Algo como aquello no volvería a pasar.

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El trascurso del desayuno fue entre risas y malos chistes, con mucha comida deliciosa de por medio cortesía de Seokjin. Pero aunque trataba, TaeHyung no podía estar del todo concentrado en su desayuno y las personas a su alrededor. Su cabeza era un desorden y la culpa era uno de los pensamientos que más predominaba.

La culpa porque él incitó a JungKook a hacer aquello. Él fue quien se sentó en su regazo y comenzó a coquetearle. Él fue quien comenzó a besar su cuello.

Y Jeon sólo fue débil. Entonces lo llevó a su coche, y hasta ahí TaeHyung quería, lo quería todo. Estaba en su sueño, iba a ser marcado por Jeon JungKook, el amor de su vida. ¿Quién podía ser más afortunado? Pero... Él no había sido el único. Ni lo sería, nunca. Probablemente si hiciera una encuesta de las personas que tuvieron el placer de pasar una noche de sexo con Jeon, al menos la mitad de las chicas del instituto levantarían la mano.

Y TaeHyung no quería ser uno más del montón.

Pero en cuanto se quiso negar, Jeon ya no aceptaba un no, parecía cegado a su alrededor. Y eso comenzó a desesperarlo, se removía, pateaba, lloriqueaba, y no fue sino hasta que el azabache se paró a mirarlo gracias a los gritos de los chicos fuera, que se dió cuenta de su estado penoso y se fue. Sin preocuparse, sin mirarlo una última vez. Y a TaeHyung le pareció lo mejor, porque no quería que el contrario lo recordara con esa imagen.

Sin embargo las cosas se salieron de control, todos pensaron que JungKook había querido abusar de TaeHyung y en parte no era mentira, pero tampoco era así. No era que TaeHyung estuviera buscando la forma para defenderlo, porque eso no debía haber pasado, él tendría que haberse detenido en cuanto murmuró el primer "detente". Debía ser atento como lo había sido en el sofá al preguntarle si estaba seguro de lo que estaba haciendo y sus consecuencias. TaeHyung había aceptado, y maldición, no se sentía bien en absoluto con todo lo que había causado. Pero no era sólo su culpa, no lo era.

Y ahora él ahí estaba, desayunando con los amigos de vida del azabache mientras el otro estaría quién sabe dónde. Mientras era tomado como un depravado. TaeHyung quería arreglarlo, quería decirles que las cosas no fueron como ellos piensan. Pero el nudo en su garganta al pensarlo no se lo permitían.

Le estaba robando los amigos al azabache y ese no era su propósito, él estaba ahí para acercarse a JungKook pero desde su llegada este se ha alejado del grupo. Y el sentimiento de culpa se incrementaba.

Pero no todo era tan malo, y una mano que apretaba la suya con delicadeza se lo demostraba. HoSeok era quien le daba el ánimo que necesitaba, con esa sonrisa que iluminaba los días de cualquiera.

Así que lo dijo. Llamó la atención de todos los presentes y en timidez y voz baja aclaró todo lo sucedido. Sus mejillas rojas de la vergüenza delataban que no mentía. Y aunque en parte justifica lo ocurrido, no es suficiente para salvar a JungKook del regaño que todo el grupo planeaba darle acerca de conocer sus límites, y cuando se dice que no es no. Pero al menos TaeHyung pudo evitar algo peor.

ヾ(｡>﹏<｡)ﾉﾞ✧*。