Capítulo 2 invierno, ojo de la tormenta

114 15 13
                                    


Se acerca más, la bocina suena estrepitosamente, la distancia es tan poca que no podría detenerse aunque quisiera, esa sensación de que se acerca el final, las memorias y los sueños recorren mi mente, he hecho cosas buenas, he hecho cosas malas, ¿estoy condenado por desear que la muerte llegue?, quizás lo sabré en un momento, cierro mis ojos al que creo será mi último instante, mi última sensación seria ese impacto....... la lluvia seguía cayendo sobre mí, había llegado, lo sabía pues había salido desprendido pero era extraño, siempre me imaginaba que el impacto de un automóvil seria el mayor dolor de la vida pero no era tan malo, el único dolor que siento es en mi espalda y mi nuca, siento la fría y húmeda acera, también un peso sobre mí, un aliento agitado en mi oído, eso ultimo me confirmo que algo diferente había ocurrido, lentamente abrí los ojos, el auto no estaba, lo más seguro es que hubiera seguido de largo al no haberme chocado, baje mi mirada, una persona estaba sobre mí, lentamente se separó de mi dejándome apreciarlo de mejor manera, sus cabellos eran castaños pero caídos por estar mojado, sus ojos iguales a los míos, no parecía muy alto, más bien de mi edad, por ultimo su piel era más bronceada que la mía y en su rostro se veía una sonrisa, esas sonrisas que te dicen que todo estará bien.

-Estuvo cerca ¿no?, otro poco y no te alcanzo a sacar-se reía como si todo esto fuera un chiste, no era así, era de alivio de que algo malo no hubiera ocurrido, me había salvado pero yo aún no procesaba todo, me costaba un poco y me distraje viéndolo detenidamente, llevaba una ropa muy delgada, ni siquiera traía un paraguas a pesar de estar lloviendo torrencialmente, este se abrazó a sí mismo y se levantó del suelo-brrr hace frio, deberías irte a casa antes de que te enfermes con esta lluvia, jeje aunque yo también debería irme-se seguía riendo temblando suavemente, ¿cómo diablos es tan despreocupado?, es obvio que el que no está bien es él, me dio una palmada en el hombro como si esperara mi reacción, pensé en moverme pero luego recordé que no lo valía, ¿para qué hacerlo si solo terminaría dando vueltas en toda la ciudad?, lo más probable es que terminare muriendo de una pulmonía, lo que me hizo quitar esas ideas fue un estornudo, me percate que él tampoco se había movido, parecía querer hacerlo pero no dejaba de observarme con una mirada de confusión-¿no tienes dónde ir?-me pregunto temblando cada vez más, no era de sorprenderse por sus ropas y que estaba tan mojado como yo, me comenzó a mover intentando hacer que reaccionara y simplemente negué-entonces ahora lo tienes, pero movámonos ya, me congelo-gimoteo agarrado de mi mano, no pude reaccionar y ya se encontraba jalándome, corriendo y haciendo que yo lo hiciera también para no perder el paso y llegar a caer, como un idiota sumiso solo me deje llevar pensando que no puedo perder nada más...¿no puedo verdad?.

Mientras me cuestionaba eso ya habíamos pasado varios calles, de vez en cuando se volteaba a verme, como si quisiera decirme algo pero se mantenía callado, sin darme cuenta comencé a reaccionar de mi depresión, estaba más atento a mi alrededor, esa zona de Radiant garden no la conocía, seguramente me perdería si salía de esta, ya no habían autos en las calles, menos aún gente, los callejones estaban oscuros y me imagine a algún animal sin hogar escondiéndose ahí, vi cómo se tambaleo, se había resbalado pero alcance a jalarle para mantener el equilibrio, este suspiro aliviado, me vio de reojo y riéndose apenado comenzamos a caminar para no caer, al cabo de unos momentos llegamos a una casa de dos pisos, nos colocamos bajo el techo de la entrada y pude darme una mirada a mí mismo, apenas sentía algo, ambos estábamos bastante empapados, por no decir sucios por lo anterior, baje la mirada y note que aún me sujetaba, estaba helado, temblaba ligeramente y peleaba con las llaves como si no supiera cual era haciendo pucheros al equivocarse, lentamente hice que me soltara, pareció no preocuparse y me quede viendo una de las ventanas, había luz, significaba que había alguien en su casa....me acaba de llevar a su casa.

Las estaciones,  RoxasWhere stories live. Discover now