Fue Mi Error [EreMin]

00.06

-¡Buenos y amados días mi querido!.-Abrí la puerta de "nuestra" habitación con dificultad, cargando con unas simples cosas que bien pude dejarlas en el piso pero, ah no tenía que hacerme la vida imposible, ok ya.
Y sí lo sé, soy un asco con esto del romanticismo, no nací para amar y ser amado. Pero ni modo así es la vida y sólo hay que aceptar las cosas con los brazos muy abiertos. Por otra parte Mikasa me despertó muy temprano para que le hiciera un rico desayuno a Eren "ya que se supone que así sería cuando seamos más que amigos y no super amigo y novios". La experta en ese tema lo sabe (palabras textuales que ella se auto puso y empleo). Me acerqué a la cama del rey León observandole dormir. Dormía peor que un niño pues babeaba, y juntaba toda la cobija en tipo almohada para dormirse y abrazarla. Aún sigo sin entender como es que yo dormí a su lado "y no obteniendo exactamente una hermosa imagen como siempre la pintan". Al despertar vi a Eren con los brazos extendidos soltando una pequeña pero muy fina línea de baba, mientras que yo al despertar gracias a Mikasa me golpe contra ella en la cabeza, y al salir sin "despertar a Eren" cai de cara, pues mis amadas piernas estaban revueltas entre la cobija que Eren mantenía enrollada.- Vamos pequeño León despierta.- Me agache para dejar las cosas en el piso con una gran pereza tomando asiento al lado de él. Me volví con él acariciando su rostro como lo hacía mi madre para despertarme.

-¡Ah!, no quiero nada.-Me apartó Eren con el rostro aún adormilado. Saqué una servilleta que Mikasa me hizo llevar. Ya sentado en la cama de él, tomé su rostro con mucha delicadeza, lo giré un poco hacia mí para limpiarle la cara, como si se tratará de una madre. Empecé por quitarle las lagañas y luego por su saliva, wow es verdad que es peor que un niño.

-¡Kya! ¡esto es mucho! ¡ahhh!. ¡Por Dios! ¡me desangro!.-Pegué un brinco asustado por los gritos de Mikasa ya que no me los veía venir. Al terminar de quitarle la suciedad de su cara me quede ahí sentado. Apenado de los gritos de la hermana de Eren, sólo mordi mi labio sintiéndome morir. ¿Cómo no le da asco o vergüenza ver esto a ella?, como cualquier persona. Al ver que Eren se volvía a mover para despertar preste más atención a él, así para evitar sentir vergüenza.

-Ah, ¿qué?. ¿Armin qué haces a estas horas despierto?.-Preguntó cubriendo sus ojos con ambos brazos, aunque no había mucha luz en su habitación, seguramente algún árbol le cubría.

-Eren por favor si ya es muy tarde. Son las... 9:47 de la mañana.-Eren apartó su brazo alzando una ceja seguramente no me creyó. Acarició mi rostro con la yema de sus dedo soltando una sonrisa. -¡Ah!, por cierto, muy buenos días, espero y no sea un asco en esto.- Bueno de hecho soy aprendiz de Mikasa, ya que dijo que todas las comidas las haré yo mientras viva aquí, ella sólo dejará una libreta con las recetas de lo que quiera. Me incline para tomar la comida de Eren. Al tenerla entre mis manos mire lo que había. Empezamos con algo suave "natilla, con tres rebanadas de pan acompañadas de uvas, eran como cinco". Un licuado de fresa y lo más difícil, los cubiertos. Desde luego ese solamente era el primer platillo faltaba el segundo. Eren sólo se sentó e comenzó a comer al poco rato dejó su plató, levantando la vista sospechosamente, creó que vio a Mikasa observanos, formó una sonrisa mientras la saludo. Al terminar ese plató le entregué otro que era sólo avena preparada. Me salí de su... "nuestra", habitación para ir a la cocina, una vez ahí limpie los platos y lo que necesite he regresé con él. Él estaba parado enfrente del lavamanos mirándose en el espejo de su baño, acomodando su cabello con ayuda del agua.

-Gracias por la comida.- Fueron palabras muy simples que a cualquiera le rompería sus ilusiones como matrimonio u noviazgo. Sólo que su mirada y tono de voz fue más tiernas de lo esperado.

-De nada, para mi es un placer que te haya gustado.-Él se separó del lavabo y espejo. Para abrazarme. Se separó de mi, con su mano derecha alzó mi mentón. Hey está escena es muy incomoda y a la vez me da tinta que entró al sanitario y no se lavó las manos que asco.