𝑪𝒂𝒑𝒊́𝒕𝒖𝒍𝒐 𝟑𝟗

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Se mantiene serio mirándome fijamente llegando a ponerme incomoda, me remuevo en mi lugar pero no le digo nada para que deje de hacerlo. Su madre y yo acabamos de contarle todo, y su expresión no dice nada, parece que procesa todo pero ¿Por qué me mira a mí como si fuese culpable de algo? Yo sólo lo ayudé, lo cuide como pude y trate de llevarlo a cada una de sus citas con el doctor.

Perrie me da un codazo y aparto la mirada de Chris para verla.

—Quiero... hablar—susurra, asiento y nos disculpamos para luego salir al patio trasero.

Vamos hasta el principio del bosque y nos sentamos en la tierra dura con apenas pasto sobresaliente, me siento como indio y ella abraza sus piernas.

—¿Qué sucede?

—¿Crees que deba hablar con él?

—Sería mejor mañana que se encuentre mejor, ya lo viste—hago una seña con la cabeza en dirección a la casa, ella asiente y aparta su mirada triste para ver al frente.—no te asustes, tienes tiempo todavía para pensar en ello—sonrío, ella voltea a verme con reproche, resopla y se recarga sobre mi hombro sin soltar sus piernas.

Sí, bastante extraño lo sé, pero ya vivimos bajo el mismo techo no íbamos a pelearnos todo el matrimonio de nuestros padres. El cuál, por cierto, es en unos días, ya que por el accidente de Chris todo se tuvo que cancelar de último momento.

—Me enteré de algo hace unos días—murmura sin alejarse.

—¿De qué o quién?

—De tí y James—me tenso y es cuando ella se aleja para verme con una sonrisa.

—Oh no, no es lo que tú piensas él y yo no...

—Ya lo sé—rueda los ojos.—pero se gustan, y no me vengas con que no porque voy a golpearte—la miro mal.

—Pero no lo hace, yo a él si y vaya que me lo ha dejado claro, pero...—aparto la mirada de ella para ver los enormes árboles frente a nosotras.

—¿Pero...?—niego y me pongo a jugar con unas pequeñas piedras que hay cerca, la oigo suspirar.—eres sensible—volteo a verla con el ceño fruncido.—sólo no te gusta que lo noten. En fin, lo de Derek te lastimó demasiado porque de verdad tenías sentimientos hacia él—asiento levemente mientras aparto la mirada de nuevo.—pero James, aunque sea un bruto y grosero, es un buen chico por dentro y, Alissa, lo haces sonreír a cada minuto del día, cosa que antes no se veía en él, además de que no se le ha visto con ninguna chica...

—¿Y Kendall?—alzo una ceja y cierra la boca.—estoy segura de que quedaron para después, es James—ruedo los ojos y ella sonríe.—¿Eué?

—Estás celosa, eso significa que..

—Cierra la boca o voy a golpearte—alza ambas manos mientras sonríe.

—Aceptalo

—¿De qué hablan?—me estremezco al oír su voz y me levanto de inmediato para darme la vuelta e irme a casa, pero me toma del brazo.—tengo que hablar seriamente contigo—dice cerca de mi rostro.—Perrie...

—Nos vemos—dice ella y se va trotando hacia la casa.

Me suelto de su agarre y me alejo para verlo con los brazos cruzados, él sonríe como si fuera el mejor de sus días y su gesto me hace sentir extraña.

—Habla, tengo que irme

—¿A dónde? Chris ya se fué

—¿Se fué ya?—frunzo el ceño y dejo caer mis brazos a cada lado. Quién sabe hasta cuando lo vuelva a ver.

Mis Hermanos y Yo [MISHYY #1] Onde as histórias ganham vida. Descobre agora