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Ambos hombres decidieron bajar al primer nivel de la casa, para encontrarse con April que había optado por un vestido morado intenso un par de dedos arriba de la rodilla, cosa que al huésped le pareció vulgar y degradante, si fuera su mujer la agarraría de los pelos si fuera necesario con tal que no saliera y le haría el amor toda la noche sin darle ninguna explicación.

La castaña y su amiga llevaban dos maletas pequeñas que dejaron junto al mostrador, a lo cuál el anciano comprendió de inmediato que había aceptado su propuesta de ocupar el cuarto del ex huésped, el señor Smith que tuvo que mudarse porque le ofrecieron un mejor empleo en otra ciudad.

Solo quedaban seis huéspedes, la señora Winter con sus dos hijos de veinte y dieciseis años respectivamente, que había pérdido a su marido en el ataque a las torres gemelas en 2001, lo que la orilló a mudarse al viejo continente. April por las razones que ya conocemos, el señor Jenks ya de edad avanzada que subsistía gracias a su pensión y por supuesto, el amargado viajero del tiempo.

- Ben, como puedes ver, acepté tu propuesta y te prometo pagartelo dando lo mejor de mi en el trabajo, muchas gracias - habló la muchacha en el tono más dulce que pudo, cosa que al castaño le enfadó y solo se limitó a gruñir, mientras que el anciano sonrió y asintió.

- Hola, ¿tú debes ser John verdad? - comentó la amiga de la castaña, llevandose una mirada inquisidora de pies a cabeza del hombre y su manera tan hiriente de ignorar. La morena no se sintió mal en absoluto, al contrario, lo tomó con gracia.

Luego de un silencio incomodo, Cattermole se debatía entre si molestar a la ojiazul o ser más amable con ella ahora que ya sabía su secreto, después de todo él y la mamá de esta compartían el mismo yugo. Pero decidió darle gusto a su lado cruel y soltar su veneno con una sonrisa socarrona

- Ah, no sabía que era tan importante para ti, ¿les has hablado de mi a todos los que conoces? - mientras la miraba fijamente esperando su reacción.

- No te creas tanto, si le hablé de ti es porque eres el ser más detestable, petulante y arrogante que he conocido - la muchacha no podía concebir que existiera alguien tan grosero, pero nadie iba a arruinar su noche perfecta. Así que ella y su amiga subieron con las dos maletas para dejar las pertenencias de April en su nueva habitación.

La conversación entre ellas había sido agobiante para la castaña, ya que Stella no paraba de decir lo guapo y varonil que le parecía el grosero de John, así que bajaron de nuevo, se despidió de la morena para esperar a su novio, que no tardaría en llegar.

Y en efecto, dos golpes azotaron la puerta principal, el novio de la chica no era muy educado, el dinero no le había comprado clase, ya que entró como si fuera su casa ignorando al anciano y al castaño.

Esto le molestó en sobremanera a John, sintió ganas de golpearlo, no había nada peor para él que la falta de civilidad en las personas y cuando vió que ese maleducado besaba a la chica en los labios de una manera un tanto desenfrenada, comenzó a reirse por lo bajo, pero fue lo suficientemente notorio para que la pareja se separará y Robert se dirigiera a él en un tono brusco

- Y ¿a ti quién te invitó? -

- No necesito invitación y menos la de alguien tan inmoral como tú, la clase baja destila por tus poros. - con un tono de grandeza mientras arqueaba una ceja y le dedicaba una mirada de asco.

April en su desesperación, tomó a su novio de la mano mientras se despedía de Ben con la mano que solo suspiraba, pero el chico con una cara amigable, pero sin duda un traidor no podía quedarse así mientras había sido insultado y replicó.

- ¿Clase baja yo? Se nota que no conoces a mi padre, los Stone somos una de las familias más importantes de Londres; en cambio tú solo eres un viejo rancio, pasado de moda - señalaba la ropa del otro - y entrometido. ¿Entendiste o sigo?

- No me importa si estás pódrido en dinero, eres basura y eso se nota, pero para que te quede claro lo viejo que estoy ...- dió unos pasos para ponerse de frente al chico, con el puño cerrado y toda su colera contenida le soltó un golpe en la cara, haciendo que Robert cayera hacia atras deteniendose en la pared.

John sonreía de lado a lado, esperando la respuesta del chico, pero este último solo se puso la mano en la nariz para percatarse que le salia un mar de sangre y para satisfacción de John se quejaba del dolor, más no se atrevió a devolverle el golpe, era un cobarde.

April estaba cabreada, ahora más que nunca sentía miedo de ese hombre que sin vacilar había golpeado a su novio y le dedicó su mirada más severa, de un reproche y odio profundo porque su noche estaba arruinada, así que procedió a ayudar a su novio porque si hablaba, seguro Ben la echaría por matar a ese prepotente.

Ben estaba atónito, pero no le llamaría la atención por lo que hizo, al contrario, el tipo ese se lo merecía después de todos los desplantes hechos a April y ni se molestó en sacar el botiquín para que curaran al chico.

Robert con el alma como si un volcán hiciera una erupción, tomó bruscamente a la chica de la mano para salir, pero nuevamente la lengua serpiente del huésped hizo otra de sus azañas.

- Niña, estaba equivocado contigo, creí que eras más inteligente, pero ya veo que no. Pero bueno, vayan a revolcarse tal cuál cerdos - con un tono sarcástico y haciendo un gesto de despedida con la mano dedicado a la pareja.

- ¡Me las pagarás, viejo estúpido! - gritó Robert, tanto él como su novia azotaron la puerta y desaparecieron de la vista del castaño que era acompañado por el anciano, quien seguía impresionado.

Separados por el tiempo #Worlds2018Where stories live. Discover now