CAPÍTULO I

235 39 3
                                    







EDWARD.

NEW YORK.






Estoy saliendo de mi departamento, despidiendo a la hermosa rubia que me acompañó anoche, cuando mi móvil comienza a sonar; "Black" se lee en la pantalla y yo solo espero no tener problemas.

—Padre —respondo.


—Где ты, черт возьми! — grita Jeason al otro lado.

(—¡¿Dónde mierdas estás?!)


<<Mierda, está hablando en ruso. Esto no es bueno>>


— В Нью-Йорке, где еще?

(—En New York, ¿Dónde más?)


­—И не могли бы вы объяснить мне, какое дерьмо пошло не так с моей доставкой, и почему мамам твоей сестре больно?!

(—¡¿Y podrías explicarme que mierdas salió mal con mi entrega y por qué madres tu hermana está herida?!)


<<¡¿Qué, que?!>>


—Что?! Я ничего не знал об этом! —le digo más que alarmado.

(—¡¿Qué?! ¡No sabía nada de eso!)


¿Sam está herida?


—¡Sí ya me imaginaba que tu no sabías ni una mierda de nada! —<<Mierda, ya dejó de hablar en ruso. Eso es peor>>— Me imagino que tampoco sabrás quien es Derek, porque mierdas se perdió la mitad de mi cargamento, porque el pinche encargado no fue a recibirlo, porque carajos tu hermana salió herida y quien chingados coordino el ataque.

<<Puta, está encabronado>>

—No, no lo sé.

—¡Sí ya me di cuenta cabrón! —me grita y yo tengo que apartar el móvil de mi oído para que no me destroce el tímpano— ¡Te dije que la protegieras!

—¡Ya, venga, iré a verla!

—Oh, claro que irás. Se adelanta la cena familiar.

—¡¿Qué?!

—¡No me levantes la voz cabrón! Anda a buscar a tu chingada hermana, los veré en la casa de Brooklyn.

Cuelga.

Cicatrices [Saga Clandestinos]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora