Contigo ¡Porque te quiero!

Las promesas se cumplen

Sentía las lágrimas invadiendo mis ojos, trataba de ser lo más fuerte posible, porque aquí y ahora no es el momento, pero inconscientemente comenzaron a correr por mis mejillas.

Tengo la cabeza hundida en el hueco entre su cuello y su hombro, tratando de no soltarlo.
Si lo suelto, quizá desaparezca, quizá despierte y esto sea un sueño, no soy lo suficiente fuerte para soltarlo.

-Hey.

Fede me levanta la cara entre sus manos, tiene los ojos llorosos pero no ha llorado todavía, en cambio yo, ya no puedo detener las lágrimas.

-No puedo creer que estás aquí.
-Las promesas se cumplen.
-¿Cuánto vas a durar?
-El tiempo que vos queras que me quede.

Sonrío mirándolo a los ojos, con esta necesidad de besarlo ahora mismo, pero sé que no podemos.
Los fans comienzan a acercarse a él, yo me alejo un poco y me pongo al lado de Mica.

-¿Por qué no me dijiste?
-Porque era una sorpresa tonta, y mira.

Apunta con su dedo hacia un lado del parque, volteo y está Facu, observando todo desde lejos.

Corro hacia él, él sonríe y me abraza.

-Te dije que haría lo que fuera con tal de estar contigo.
-Idiota, ¿por qué no me dijiste que venían?
-Ni yo sabía, solo desperté y me dijo que hiciera mi equipaje y nos venimos.
-¿Y los demás?
-Vendrán después, ahora no podían, solo vinimos Fede y yo.

Cuando los fans se han alejado, Fede se acerca a nosotros y Mica también. Comenzamos a caminar al hotel donde se están hospendando los chicos.

Al llegar al hotel, Facu y Mica van al restaurante del sitio a comer algo, sé que lo hacen para darme privacidad con Fede.

Entramos a la habitación y Fede pega mi espalda a su pecho, acerca su boca a mi oído y susurra.

-Te extrañé tanto.

Doy media vuelta y le rodeo el cuello con los brazos.

-Creí que no iba a volver a tenerte tan cerca.
-No me iba a permitir perderte.

Nos besamos, al fin después de seis meses esperando, pude sentir de nuevo la calidez de sus labios.

Sin dejar de besarnos, comenzamos a avanzar hacia la cama donde dormirá Fede.
Me tumba en la cama y se tumba encima mío.

Sus manos entran debajo de mi blusa, el contacto de su piel fría me hace estremecer.

Continuamos en lo nuestro, se levanta un poco, se quita la playera y se vuelve a tirar sobre mi, sube poco a poco mi blusa hasta quitarla completamente, nos deshacemos de nuestros zapatos, sus manos comienzan a desabrochar el botón de mi pantalón sin dejar de besarme, desabrocha también el botón de su pantalón, pero ninguno nos lo hemos quitado todavía, hoy no llevamos prisa, tendré varios días, ojalá varios, para hacerlo todo el día, entonces no hay razón para perder el control y hacerlo como animales.

Sus manos comienzan a entrar bajo mi pantalón, se detienen en mis glúteos y comienza a besarme el cuello, hundo mis dedos en su cabello mientras me muerdo el labio inferior.
Baja por mi cuello dejando pequeños besos, después vuelve a subir y sigue besándome en los labios.

El sonido de la puerta nos sobresalta, me cubro la parte de arriba con mi blusa mientras Fede se levanta de encima mío y nos sentamos en la cama.

Facu nos observa sin decir nada, pasa los ojos de Fede a mi.

Fede se da cuenta que no tengo puesta la blusa y pone las manos sobre las mías intentando cubrirme un poco más.

-Salte de aquí tarado.
-Lo siento.

Facu sale y cierra la puerta.
Fede suelta un suspiro y me ve a los ojos, ambos soltamos unas pequeñas risitas.

Bueno, creo que si llevábamos prisa hoy, o mínimo, hubiéramos puesto el seguro a la puerta.

Nos vestimos y bajamos a buscar a Facundo y Micaela.

-Lo siento, yo solo iba a decirles si querían comer algo.

Dice Facu mirando a Fede.

-Eres tan tonto ketchup.
-Sorry frita pero yo no sabía que estaban a punto de coger.

Fede le da un golpe en el hombro y los cuatro comenzamos a reír.

-Vamos a la playa después de comer.

Propone Mica.

-No puedo Mica, mañana tenemos examen y tengo que estudiar.
-Siempre pasas igual, ya deja de preocuparte.
-No en serio no puedo.
-Dale, ya no seas aguafiestas papa frita.

Dice Facu haciendo un puchero.

-Vamos solo un rato, tengo mucho que estudiar todavía.

(...)

Vamos al sitio mas deshabitado de la playa, para, por primera vez, caminar con Fede de la mano.

-Ojalá algún día podamos caminar de la mano sin preocupación.
-Solo dame tiempo para decirle a las sogas, será lo más pronto posible.
-Me van a odiar.
-Ya sé, pero tienen que aceptar que me he enamorado.

Volteo a ver a Fede y sonrío. Él sigue viendo la playa con esa sonrisa suya tan perfecta.
Indudablemente no cambiaría este hombre por nada.

¿Cómo pude siquiera pensar en terminar con él? ¿Cómo se me ocurrió que si le daba una oportunidad a Rob iba a poder superar a Fede? Eso es imposible, con nadie había sentido lo que siento cuando estoy con él, no pienso perderlo nunca.

Ya somos novios, solo es cuestión de hablar con mis papás, decirle la noticia a las sogas, y por ende, que todo mundo se entere de nuestra relación.
Pero tiempo al tiempo, total, ¿qué puede salir mal?...