¡Hey tú!

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Puede ser que parezca muy sobrada pero.. fui a tú casa, te esperé hasta que llegaras, tú madre estaba en casa me invito a pasar y estuvo hablando un buen rato conmigo, ella dijo que haría un postre para la cena y me dejo en la sala, hasta que por fin te dignaste a aparecer.

-¿Hola? Que bueno verte por aquí..

-¿Enserio?, Enserio Lucas.

-O-Oye ven, vamos a mi habitación.

Accedí, fui a tu habitación y la verdad creo que fue lo mejor.

-¿Qué haces acá?

-¡Excelente pregunta!

Justo cuándo iba a decirte el motivo por el que estaba acá, hablo tu madre; dijo que iría al supermercado porque necesitaba algunas cosas, luego que se marchará te hable, te grite y lloré. ¿Lo recuerdas? Y sino dejame que lo cuento otra vez.

-He tomado la desición de venir hasta acá para dejar las cosas en claro.

-¿Qué cosas?.

Eso me dio un coraje que no imaginas.

-¡Qué cosas! -Respondí en un grito e indignada.

-Sí es por no estar presente estos últimos días disculpa, esque los trabajos me tienen algo atareado.

-Sabes qué... ¡Vete a la mierda! Eres un maldito desgraciado, te conozco desde pequeño, nos críamos juntos, nos dimos nuestro primer beso, fuiste mi primer novio, también nuestra primera vez, todo, absolutamente todo lo hicimos juntos, ¡DIME QUE NO LO RECUERDAS Y ENSERIO PERDERÉ LA PACIENCIA!.

Lloré como nunca, grite hasta que me ardiera la garganta, me desahoge y tú simplemente derramaste unas cuantas lágrimas, me miraste y trataste de abrazarme pero ¿qué pasó?. Me quite, no quería un abrazo tuyo estaba mal, no quería verte.

-Es cierto.. ¡FUISTE MI PRIMERA NOVIA, MI PRIMER BESO, MI PRIMERA VEZ, MI PRIMER AMOR, MI HERMANA Y MI MEJOR AMIGA!, ¡SOY UN ESTÚPIDO!. No tienes porque recordarmelo sé que metí las patas y que nunca podré encontrar a nadie como tú pero entiendeme... ¡La amo! Haría todo con tal de tenerla.. perdóname..

Me tomaste de ambos brazos, me dejaste inmovil, me tiraste en la cama, quedaste encima mío, te acercaste, nos miramos a los ojos, traté de quitarte pero erás más fuerte, ¡Me besastes!, dijiste que lo sentías tanto, yo grité tan fuerte que me quedé sin voz, lloré, lloré y mucho tú estuviste presente. ¡Joder eso dolió! No era cualquier cosa, te estaba perdiendo, me recordaste a muchos momentos juntos y ahora, ahora estoy aquí en mi habitación encerrada y cada vez que recuerdo ese momento me da una punzada en el pecho muy fuerte... ¡Te amaba!, ¡Te amo! Y te amaré.. sin importar cuanto daño me hayas hecho te seguiré amando, nuestra amistad se perdió, ya todo quedó muy claro, me di cuenta que ya no me querías y te dí campo para que fueras libre y ya no fuera un estorbo, desde lejos te cuidaría eso tenlo por seguro.

¡Te adoro! Eres lo mejor que me pasó en la vida.