26

257 34 35
                                    

Cartas pt.2

Las mañanas eran extrañas.

Esa mañana en particular, las nubes habían tomado el cielo, dejando al sol escondido y manteniendo la temperatura baja. El frío ya estaba viniendo de a poco; el otoño más húmedo de lo habitual estaba poniendo nervioso a Yoongi, porque realmente no era bueno aguantando los días fríos, y dudaba que la poca ropa que llevó al departamento del menor, fueran suficiente para pasarlo.

Debía ir a buscar más de sus cosas, y él lo sabía, pero realmente no podía.

Tenía miedo.

Las imágenes de su vecino aún estaban en su mente, y era muy probable que, si volvía, sufriría un ataque de pánico y Yoongi quería evitarlo a toda costa. Por ello, una de las cosas que más amaba de regresar del trabajo, era acostarse en la tibia cama del menor, con esas frazadas abrigadas y sábanas con su aroma. Y lo mejor de todo. Jimin a su lado, abrazado a su cuerpo; su respiración pausada; sus murmullos sin sentido.

Las mañanas no eran lo mejor para Min Yoongi, y odiaba ser despertado, pero si quién lo hacía, era Jimin, dándole besitos en la cara y llamándole por su nombre repetidas veces con una voz tierna, no se hacía mucho problema. Sentir al menor cerca suyo lo hacía sentir pleno, nada más importaba.

Reposó un momento, con los ojos aún cerrados, mientras Jimin dejaba un rastro de sus besos por la piel descubierta. Hizo un sonido de protesta cuando el menor se alejó de su cuerpo para levantarse y Jimin río divertido. Luego, abrazó al mayor y depositó un pequeño beso en sus labios.

--Gruñón - Jimin sonrió sobre sus labios y Yoongi río.

--No puedes despertarme y marcharte - atrajo a Jimin hacia él y lo apresó con un abrazo - quiero mimos.

Jimin río nuevamente.

--No hay tiempo para mimos, debemos hacer el desayuno. Jin-hyung no puede hacer muchas cosas aún...

--¿Nos levantaremos para hacerle el desayuno? - Yoongi puso los ojos en blanco - Jimin, ¿sabes siquiera preparar arroz?

Jimin se arrodilló en la cama e hizo una mueca de molestia.

--Viví sin ti durante tres años, puedo preparar arroz. Y para que sepas, aún tenemos comida de HeeSeok, podemos usarla.

--Lo que quiero decir - Yoongi se levantó lentamente de la cama. Su cabello estaba desordenado - es que debemos implica a muchas personas. Y no sabes preparar arroz... y no, no cuenta el instantáneo.

--Cállate, solo ven conmigo - Jimin gateó fuera de la cama y quedó frente al pelinegro. Enredó sus brazos alrededor del cuello del contrario y le sonrió coquetamente - podríamos besarnos muuuuuuucho.

--¿Mientras preparo arroz? - Yoongi abrazó al menor por la cintura y besó su nariz - quiero que sean besos de buenos días. Ah, y con mucho café. Y hay que noquear a Jin para que no nos interrumpa, porque se pone tan extraño con las muestras de afecto; me mira con cara de mamá enojada, y ya sabes, me perturba.

Jimin depositó un beso en la mejilla de Yoongi y acarició la parte inferior de su cabeza, justo en el inicio del cuello.

--Eso es porque no hemos dicho nada al respecto~~

--Cariño, soy tan evidente, probablemente ya lo sabe.

Jimin se sonrojó violentamente.

--¿C-cariño? Ah...y-yo no sé - se separó con torpeza y caminó hacia la puerta. Yoongi lo siguió - de todas formas, pienso que deberíamos decirle.

Convulsión (YoonMin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora