Mi Cuñado Y Yo [+18 ©]

¡No quiero morir!

Después de varios días en R.D  decidimos volver a casa. La empresa marcha perfectamente bien y Daniel y yo estamos llenos de felicidad. Nuestras peleas solo son por quien ira a comprar la cena. 

Hace unas horas llegamos a casa, Carmen a brincado de la emoción al vernos tan  amorosos.

La mas feliz y emocionada soy yo de tener todo lo que quiero, Daniel me hace la mujer mas feliz del mundo, no diré que fue conveniente aquel rompimiento, pero valla que ha servido de mucho, en estos últimos días se ha convertido en un hombre distinto, es mas atento, amoroso y no se despega un segundo de mi lado. No ha tenido ningún contacto visual con otra mujer y pues solo lo ha llamado Laura, la mujer de los problemas anteriores.

Estamos recostados en la cama, descansando de largas horas de vuelo y Daniel no para de darme besos. Me tiene tan enamorada que no puedo creer donde guardo tanto amor.

-Déjame ir por favor- digo tratando de salir de sus brazos, pero me tiene sujetada a el.

-Nunca- 

-Daniel necesito ir a buscar a mis hijos-

-Mañana-

-Como no me sueltes en este instante te rompo la cara-

-Inténtalo-

Maldición, cada palabra tan limitada que dice me hace hervir la sangre. Lanzo mi brazo hasta su cara, pero este en un rápido movimiento lo toma y lo lleva hasta mi cara haciendo que yo misma me golpee.

-AUSH- grite

-Eres débil amor- dice riendo

Me lanzo encima de el, quedando justamente pegada a su pene, me mira con cara de travieso y ya se lo que pasa por su mente. No pierdo tiempo y aprovecho la situación.

Beso su boca con mucha pasión y este sin perder tiempo me corresponde, llevo mi boca hasta su cuello y lo beso mientras acaricio su cabellera. llego hasta su pecho donde continuo besándolo, siento como su erección crece, bajo lentamente por su abdomen y cuando estoy cerca de llegar a su pene este suelta un ronco gemido.

Me tiro rápidamente de la cama y este me mira confuso.

-Eres débil amor- Digo burlándome

-No te atrevas Masiel Gonzales- 

Suelto una gran carcajada, ya se entero de mi juego.

-Acompáñame a buscar los niños-  Contesto haciendo nada de caso a lo que dice.

Aun se encuentra en la cama y me mira como si quisiera matarme. 

-No puedes dejarme así- Señala su aun erección por encima del baquero que traía.

-Ya lo hice cariño- 

Vi como se levantaba de la cama y decidí correr por mi vida. De un golpe cerré la puerta mientras moría de risa.

-ME LA PAGARAS- grito del otro lado de la puerta

-Te amo cariño, te espero abajo-

Dicho esto bajo las escaleras y no paro de reír.  Ahora debo ir a soportar las criticas de Manuel ya que allí se encontraban los niños.

No puedo quejarme, en los últimos años Manuel se a comportado como un buen padre. Aunque siempre fue buen padre para Joel pero a Liliana yo la saque a delante sola, cuando se entero de mi embarazo años atrás me pidió abortar porque ya tenia un hijo con otra mujer. Yo continué con mi embarazo pero el se alejo de mi. A pesar de todo Lili ama su padre como a nadie y no pretendo nunca contarle el pasado.