¡El no lo hizo!

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Llegamos a casa y mi cara aún es de pocos amigos. En el camino no he dicho una sola palabra y en el rostro se me nota la preocupación y el enojó.

Todo este rato Daniel solo me observa y no me dice nada, al contrario de los niños que tratan de jugar y ser felices con el montón de regalos que le hemos traído de R.D.

Nos encontramos en la sala destapando todos los obsequios de los niños. Intento cambiar mi cara a alegría para bienestar de todos.

-Señorita aquí le traen esto- Esa era Carmen entregándome un sobre.

Ya se de que se trata. Daniel continua observándome sin hablarme.

Como lo espera, es un citatorio. Manuel me demanda por la custodia de los niños.

Daniel se acerca hasta mi y lee aquel papel.

-Tranquila amor eso no pasará, eres la mejor madre del mundo-

Besa mi frente y me recuesta en su hombro. ¡Como lo amo!

Estamos así unos segundos hasta que el sonido de mi celular nos separa.

-Hola cariñó- Dice Manuel al otro lado del celular.

-¿Que quieres?-

-Espero que te haya llegado mi carta- se burla

-¿Para que llamaste?- Respondo con enojó

-Solo quiero una noche contigo cariñó y prometo dejarte en paz-

-¿Que dices imbécil?-

-Piénsalo, solo una noche de sexo como antes y todo estará bien-

-Vete al infierno-

Dicho esto cierro el celular. ¿Como se le ocurre pedirme algo así? Ni que estuviera loca. Prefiero que se me pudra la vagina antes que el la toque.

-¿Quien era?- Dice Daniel.

-Tu hermano-

-¿Que quiere?-

-Sexo a cambió de los niños-

Su cara cambio por completo. Esta enfurecido y hasta ahora pienso en lo que dije.

Se levanta sin decir una palabra, toma las llaves de su moto y sale.
Corro hacia el, pero al llegar afuera ya se había marchado.

El auto de Helena llega hasta mi.

-¿Peleaste con Daniel otra vez?- Pregunta todavía en el auto -Va echó una furia en la calle-

-Necesito ir donde Manuel, espérame-

Subo hasta mi habitación, me visto y me despido de los niños. Llegó nuevamente a la sala donde veo a Helena con el dichoso papel en la mano.

-¿Por esto es el enojó de Daniel?-

-Manuel me ha pedido sexo a cambio de retirar la demanda-

Sus ojos se agrandan y también su cara cambia a enojó. Es sorprendente ver como a cambiado tanto.

-Es un imbécil- Concluye

-Lo mismo digo-

Nos ponemos en marcha hacia donde le he dicho, nos pasamos varios minutos de camino y al llegar veo la moto de Daniel estacionada junto a una ambulancia y un carro de policía.

Helena y yo nos tiramos a toda prisa del coche y corremos adentro.

Mí cuerpo se descae al ver como llevan a Manuel en una camilla inconsciente y ensangrentado. Me agarró de la mano de Helena y un gran mareó se apodera de mí.

Llegamos hasta el piso de Manuel y esta todo manchado de sangre, me agarro mas fuerte a Helena y me preparó para lo peor. Observó todo el lugar echo un desastre y mi vista llega hasta Daniel, ambas manos esposadas y varios policías tras de el.

Su mirada choca con la mía y este niega con la cabeza ¿Que has echó Daniel?. Varias lágrimas salen de sus ojos y yo aún estoy sorprendida, sin decir nada.

Nuevamente un gran mareó se apodera de mi y esta vez caigo al piso. Veo a Daniel correr hasta mí, pero los policías lo detienen evitando contacto conmigo.

Helena me sostiene y me levanta. Con ambas piernas flojas me acercó hasta Daniel.

-Te juro que yo no lo hice princesa-

Sus ojos se inundan y los míos también.

Policías sostienen ambos brazos de el y se lo llevan como si de un animal se tratara. Mis ojos siguen lo de el en cada segundo y lagrimas muertas salen de mi. Estoy completamente en la nada como si mi alma se hubiese marchado de mi cuerpo.

Un policía vestido de negro con varias insignias se acerca a nosotras, por su ropa intuyo que debe ser el de mayor rango.

-Señoritas, no pueden estar aquí- Dice llegando a nuestro encuentro

-El no lo hizo- Digo en un hilo de voz y a mis adentro

-Oficial, nos iremos en cuanto nos diga que paso- Esta vez habla Helena

-El tipo que se acaban de llevar disparo a sangre fría al residente de esta casa-

-El no lo hizo- Repito en voz baja

-¿Tienen prueba de eso?-

-Pues recibimos una llamada de los vecinos y al llegar lo encontramos a el manchado de sangre, a los pies de la victima- 

-El no lo hizo- Nadie me escucha solo mi conciencia.

-Son hermanos- habla Helena -No se mucho de leyes pero se que eso no es prueba suficiente-

-Tiene usted toda la razón, mandaremos a examinar el arma y si se encuentran sus huellas pues sera condenado, de lo contrario estará libre en 24 horas-

-EL NO LO HIZO- Grito a todo pulmón, no se como lo hice pero me lance sobre aquel policía y golpee su rostro.

Helena me agarro ambas manos evitando que continuara con mi debut de fiera hambrienta. 

No se que esto haciendo, esta no soy yo. Estoy bastante segura de que Daniel no haría algo así, el podrá ser muy impulsivo pero no se atrevería hacerle daño a nadie y menos a su propio hermano.

Paso mis manos en mi cara y trato de reaccionar a lo que echo, sin decir o hacer mas salgo de aquel lugar, bajo las escaleras en segundos y me encierro en el auto, a los pocos segundos Helena llega hasta mi.

-¿Que fue eso?- Pregunta sorprendida

-Estoy segura que el no lo hizo- 

-Esta bien, no te voy a contradecir, pero así no se solucionan las cosas-

-¿Y como lo hago?- Digo mientras lagrimas me acompañan otra vez

-Yo me encargare-

Pone el auto en marcha.

-Quiero ir donde Daniel-

-Al único lugar que iras sera a tu cama, estas pálida necesitas descansar-

Intento hablar pero, una debilidad tremenda me acompaña y es cuando entiendo que necesito descansar y asimilar lo que esta sucediendo.     




Mi Cuñado Y Yo [+18 ©]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora