Capítulo 22 /Ándate/

1.4K 144 12
                                    

La vida te va mostrando paso a paso de lo que es capaz de hacer. De los cambios que puede dar y de los caminos por donde te puede llevar.

Yo no estoy preparada para esto, no estoy preparada para nada de lo que me está pasando. No quiero ni puedo asumir lo que mis oídos acaban de escuchar.

"No podrá caminar" esas incesantes palabras se repetían una y otra vez en mi cabeza formando un gran nudo en mi pecho. Necesito despertar de esto o por lo menos que alguien se ría frente a mí y me diga que todo es una broma y que el hombre que amo no está ahí lanzado en una camilla sin poder mover sus piernas.

Lágrimas sin control caían de mis ojos, mientras Rocío y Helena tratan de ayudar a calmarme. Lo peor de todo es escuchar decirle al Dr que yo debía contarle todo a Daniel, ya que en éste momento soy su única familia presente.

-¿Cómo le voy a decir?- Dije entre llanto.

-Tranquila, todo estará bien- Dijo Rocío acariciando mi pelo.

Estoy tan cansada de que me digan que todo va a estar bien cuando se que no es así. Cuando todo se te viene encima de nada vale un "Todo estará bien"

Observé al Dr que anteriormente había venido como se acercaba otra vez. Nos levantamos y fuimos a su encuentro.

-Ya está despierto, puedes entrar- Se dirigió a mí mostrándome la puerta de donde se encontraba.

Mi corazón se aceleró y mis piernas comenzaron a temblar.

-Si quieres entro contigo- Dijo Helena posando su mano en mi hombro.

Dirigí mi mirada a ella y traté de dibujar una sonrisa dándole tranquilidad.

-No te preocupes, creo que puedo con esto-

Ella asintió y yo me moví seguida del Dr. Cada paso que daba era más desgarrador para mí, no se lo que estoy a punto de hacer, no se como vaya a reaccionar y tampoco se con que palabras darle ánimos cuando el mío está por el piso.

Entré en la habitación para verlo ahí, acostado en una camilla canalizado, con sus piernas vendadas, pero aun así con una hermosa sonrisa en su rostro.

El frío de la habitación se podía sentir, mientras los latidos de mi corazón iban más rápido. Trato de aguantar las lágrimas, pero me es imposible viéndolo en ese estado.

-No llores princesa- Me dice sonriendo -Se que te da pena que siga vivo, porque tendrás que que seguir aguantándome-

Una pequeña carcajada salió de mí y comencé a secar mis lágrimas. Es hora de ser fuerte.

Me senté en la camilla junto a él y sostuve su mano, sonriéndole como de igual forma él hace conmigo.

-Siempre, siempre, SIEMPRE voy a estar contigo- Dije y volví a sentir una lágrima correr mi mejilla.

-Conozco esa cara. Dime ¿Qué pasa?-

-Me prometes que sea lo que sea seguirás teniendo esa sonrisa- Comenté acariciando su mejilla.

-Te lo prometo- Besó mi mano.

-El Doctor dice que los impactos en tus piernas son muy delicados y... Y tienes que guardar mucho reposo. También dijo que- Suspiré -No podrás utilizar tus piernas por un tiempo-

Un silencio se dejó venir en toda la habitación, acaba de romper su promesa porque lo que antes era una sonrisa ahora se convierte en frío.

-¿Me estás diciendo que estoy inválido?- Dijo sin siquiera mirarme.

-Amor el Doctor dice que con mucha terapia te puedes recuperar, yo te-

-Dime si o no Masiel. ¿Quedé inválido?- Preguntó con seriedad.

Mi Cuñado Y Yo [+18 ©]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora