×51×

12 1 0
                                    

   4:59pm 
Estaba dando los detalles finales de mi maquillaje, no quería que fuera como 3 kilos sobre mi cara. Cuando termine de dar los toques finales habían golpeado la puerta levemente. Me revise por enésima vez para verificar si había quedado todo bien. Nuevamente volvieron a tocar, mi reacción fue bufar y poner los ojos en blanco.

Calum realmente era impaciente.

— ¡V O Y!—Vocifere lo suficiente como para que se escuchara hasta la puerta, tome mi bolso y verifique si llevaba todo ahí. Sin duda alguna, camine hacia la puerta, la abrí y juraría que si no fuera porque tuviera orgullo o dignidad, no me caería sobre los pies de él. Ni mucho menos babearía. Verlo junto al marco de la puerta recargado, con su flequillo cayéndole de lado, sus labios entre abiertos por el cigarrillo que llevaba en ellos,  su chaqueta abierta dejando lucir su camisa desabotonada luciendo una parte de su pecho,¡SANTO CIELO! Era como un maldito dios del inframundo. Su aroma. Su rico perfume me había llegado a las fosas nasales, intente disimular mi respiración profunda para continuar oliendo su aroma, cada inhalación que hacía se volvía cada vez más excesiva. 

— Hola—Saludo, su hermoso hoyuelo apareció. Caí.  Una sonrisa se mostraba en mi rostro, me acerque hacia a él y plante un casto beso cerca de sus labios, rozándolos. Él había quedado sorprendido con una sonrisa traviesa. 

— Hola—respondí en cuanto me aleje de él. —, gracias por la invitación.

— No hay problema.—me guiño y sentí mis mejillas sonrojarse. Tuve que tranquilizar mis hormonas y mis nervios para estar al margen de mi perfil.

— Me alegro que seas puntual.

— Escuche que no te gusta que te haga esperar —hablo, cerré la puerta detrás de mi y caminamos hacia el pasillo hasta haber llegado al elevador.

—No se equivocaron.

— Parece que no—presiono el botón del ascensor.

— ¿Y hasta donde iremos?—le pregunte. 

— ¿Crees que te secuestrare?—vacilo mientras se volvía a recargar sobre el marco y ladeaba de un lado a otro el cigarrillo.

— Mm..mm, puede que haya una posibilidad—coloque mi dedo indice sobre mi barbilla y lo observaba—, ¿no? 

— De ser así—camino hacia a mi anulando el espacio que había entre nosotros. Yo sonreí nerviosa pero no me aleje de él. Él rodeo mi cintura y me estrecho contra su cuerpo, quedando sus labios cerca de mi oído. —ya lo hubiese hecho cuando estaba en tu puerta—sonreímos, retiro el cigarrillo de sus labios tirándolo sobre un cesto que estaba a lado del ascensor. Un pequeño "plin" se escucho. Las dos puertas plateadas se abrieron, unas señoras de mayor edad nos observaron desorbitadas, él y yo nos quedamos paralizados ante sus miradas. Después de que ellas vieran que las puertas cerrarían, apresuraron el paso deteniendo las puertas. Salieron y nosotros seguimos estando medio abrazados, mirándonos a los ojos. 

—Mira, no tienen tantita dignidad—comento una de las señoras, no eran para nada discretas ya que estaban demasiado cerca de nosotros—, sin vergüenzas. 

— Uy si—hablo con un tono de lo más obvio—, ¡como es que se abrazan así!.—se quejo observándonos de reojo , instintivamente me quise alejar de Calum pero él me había estrechado aun más a su cuerpo. Yo estaba delirando porque no se atreviera hacer algo más. 

Calum comenzó a reírse, yo lo observe confundida ante su risa porque no era una común, era de burla.
— Y él muy digno se burla.

— ¡Está loco! —espetaron. Yo no me contuve más, solté una carcajada y Calum me acompaño mientras nos adentrábamos hacia el ascensor. Cuando volvieron a cerrarse las puertas,nos miramos y volvimos a reír.  Disfrutaba tanto estar con Calum. Me gusta Calum. Me gusta mucho. Me gusta su compañía, su voz, su risa, su hoyuelo, su cabello, sus labios, sus ojos...Eso me gustaba más de él. Porque a través de ellos yo me miraba y sabía que él a través de los míos miraba su reflejo. Porque eso era lo que más quería. Lo quería a él. Conmigo.  

×SECRETS OF THE SECOND LOVE×Donde viven las historias. Descúbrelo ahora